XVI

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Ya era de mañana, Ernie se fue al trabajo, Agatha se quedó en casa, mayormente ella se queda en la cama, no puede hacer mucho esfuerzo, pero ella no quiere quedarse sentada sin hacer nada, de vez en cuando se levanta y limpia un poco para descansar, en sillón o en una silla.

Ella descansaba en el sillón de la sala leyendo un poco es uno de sus pasatiempos era de tarde, ya había limpiado la casa. 

Harry estaba enfrente de la puerta de la casa de los mellizos, se preparaba mentalmente en como hablar con ella, aunque a veces se le venía a la cabeza la idea de que ella le dé una cachetada por imbécil. Aunque le digan que no tiene oportunidad con ella, el todavía siente que si tendrá la oportunidad con ella.

Toco el timbre, los nervios lo invadieron, Agatha se levantó con cuidado en camino a la puerta, giro la perilla de la puerta.

Al abrirla, sus ojos se encontraron con él, ella se mantuvo seria mientras que él le dio una pequeña sonrisa, el corazón del chico comenzó a acelerar, el ama a la chica y verla de nuevo para hablar con ella, la felicidad lo inundaba por completo.

—Hola Agatha—esas fueron las primeras palabras que salieron de la boca del azabache para romper el silencio incomodo.

—Hola—contesto la chica con seriedad—¿A que viniste?—.

—¿Por lo menos puedo pasar?—pregunto Harry todavía viéndola, suplicaba internamente que no lo cacheteara.

Ella dudo al principio y lo dejo pasar, ya no le importaba lo que el hiciera, no sentía rencor y enojo por él, ella lo perdono a mediados de su embarazo, no quiere decir que ella regresara con él. Él le fue sincero y eso se entiende, a veces el amor en una pareja se acaba, y es mejor dejarlo ir... Y ella lo dejo ir, ella ya no lo ama.

Cerró la puerta, el chico se quedó parado y ella lo dirigió a la mesa del comedor, se sentaron en las sillas, el silencio incomodo era grande, no sin antes darle un vaso de jugo de calabaza.

—¿Podemos hablar?—pregunto finalmente  Harry.

—Claro—respondió seca la chica.

—Te quiero pedir perdón por lo que había pasado hace tiempo...—.

—No tienes que pedir perdón—lo interrumpió la chica—Solo me fuiste sincero. No querías que siguiera en una mentira—el chico iba hablar pero ella continuo—Lo que paso ya quedo en el pasado, cada quien tiene que seguir con su vida—.

—Entiendo—respiro hondo y la miro a los ojos—Quiero intentarlo otra vez contigo—el tomo ambas manos de ella con sus manos, ella se tensó—Aun te amo, todo este tiempo creí que estaba enamorado de Melody, nunca tuve la valentía de decirle la verdad—la seguía mirando, ella no sabía que pensar—Cuando te vi en el ministerio, no pude evitar sonreír, verte fue lo mejor. Y ahora estas cargando a una nueva persona en tu vientre, estoy seguro que soy el padre. Por favor, déjame ser parte de tu vida y la de mi hijo—suplico y ella se soltó de las manos de Harry.

—Lamento mucho lo de Melody, por lo que entendí era una buena persona, y te hace una persona cobarde no decirle la verdad, pero tu disidiste no hacerlo por obvias razones—ella sabía de la condición de la chica fallecida.

—Ella sufría de...—.

—Ya lo sabía—lo interrumpió, el chico no hablo—Yo te perdone, el hecho de que te perdonara no significa que regresaremos, tenlo claro Harry, ya no te amo—ella lo miraba a los ojos, el empezó a tener ardor en su pecho—No te negare, tendrás una niña, formaras parte de su vida, hablaras con ella, saldrás con ella, jamás negaría que el padre vea a su hija—.

Un nudo en la garganta se formó en Harry, su pecho dolía, su corazón estaba partido, llego demasiado tarde, la chica que ama ya no siente ese sentimiento de amor por él, se sentía destrozado.

—Por lo menos quiero ser parte de la vida de mi hija—el tartamudeaba.

—Y lo serás, ahora voy en el octavo mes, si quieres ver su nacimiento, adelante, no te negare que veas a tu hija—contesto de forma tensa.

—Gracias, por escucharme, será mejor que me vaya—se levantó de su asiento.

—Muy bien—lo guio a la puerta.

Todo era incomodo, al llegar a la puerta, ella la abrió para que el chico saliera, Harry salió de la casa, él estaba frente a ella.

Posiciono su mano derecha en la mejilla izquierda de ella, se acercó para darle un beso a los labios de ella, pero Agatha giro su cabeza en otra dirección, ella le había dejado en claro que ella no quería nada con él.

—Adiós Harry, nos veremos algún día—dijo para luego cerrar la puerta.

Harry soltó un sollozo que se estaba aguantando, todavía tenía el corazón partido y decidió irse a su departamento.

Agatha por su lado, soltó un suspiro, no podía creer que después de todo lo que paso la viniera a buscar para pedirle que volvieran, y además que la intentara besarla.

—¿Cómo le diré a Ernie que Harry estuvo aquí?—se preguntó a sí misma.


❄︎𝓞𝓾𝓻 𝓕𝓲𝓷𝓪𝓵 𝓝𝓲𝓰𝓱𝓽 𝓐𝓵𝓲𝓿𝓮❄︎ ʰᵃʳʳʸ ᵖᵒᵗᵗᵉʳ ʸ ᵗᵘ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora