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Pasando unos pocos segundos la menor comenzaba finalmente a masturbarlo cada vez con más velocidad, tanto con su boca y una de sus manos. Logrando con bastante agilidad unos movimientos muy iguales a tiempo conjunto, provocandole más placer al otro.

Eso causaba que este vaya perdiendo más la cordura, siendo así cada vez más difícil contener las enormes ganas que tenía de colocarla nuevamente contra la mesada pero de espaldas, otorgando de esa manera una bella vista de su trasero y vagina, para así penetrarla de esa manera a su total gusto. ( Y si que se estaba aguantando. )

Por una parte, por la mente del mayor nunca había pensado que la contraria podría ser tan buena y ágil con aquella bonita boca y delicadas manos que tenía. Pero bien agradecía que lo haya descubierto finalmente.

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Aunque de un momento a otro, Jackson agarró de repente con ligera delicadeza el cabello de la chica y lo jalo para atrás, así logró que lo observará y también detener sus movimientos por unos segundos. Causando que su gran erecto pene quedará en su rostro por completo; ella lo observó un tanto confusa pero de igual forma muy excitada por como estaba logrando poner en ese estado al querido mejor amigo de su hermano, pero aprovechó el momento para así poder recuperarse de las arcadas que le había dado hace un rato.

— Me estás volviendo loco, en serio. —  confesó en un susurró pesado mientras que con la única mano libre que tenía la obligaba a levantarse, a su altura, pero sin soltar todavía su agarre.

— Y te juro que si sigues así no me haré cargo de lo que ocurra después. — agregó observandola fijamente, con una expresión en su rostro que le provocaba a la chica el no querer detenerse y que las cosas simplemente fluyan. Pues sus suspiros y jadeos pesados claramente la habían encendido, aunque lo único que rogaba en esos momentos era de que a Chris ni su hermano se les ocurra bajar.

— Pues . . . — dió un pequeño suspiro sin despegar su vista del rostro contrario, a la vez que ahora colocaba una de sus manos sobre la mejilla derecha de este y así dar un pequeño camino hacía su nuca. ( En ese momento Jackson fue soltando lentamente su agarre. ) Mientras que con la otra la llevó a su propia boca, relamio sexualmente uno de sus dedos y luego ubicó aquella mano en un principio sobre el pecho contrario, para ir descendiendo lentamente hasta su entrepierna; agarró su pene, provocando nuevamente estremecer al joven y con el dedo mojado dió ricas pequeñas caricias sobre su glande. Para luego responder finalmente.

— Hazme no arrepentirme de lo que pueda ocurrir.

Jackson al escuchar aquello, sonrió de forma traviesa a la vez que se mordía fuertemente su labio inferior para luego comenzar a besarla de manera desesperada. Definitivamente le encanta demasiado ese lado de _____, un lado que nunca había visto pero amaba haber descubierto.

Entre besos y caricias desesperadas el mayor en unos pocos segundos le quitó aquel top que tenía puesto, para luego seguir con su sostén. Al ver sus senos rápidamente se acercó y comenzó a lamerlos y masajearlos, metió uno a su boca casi completo para así succionarlo, provocando más sensibilidad realmente a su pezón cuando se separó.

La pelinegra soltó un leve quejido tras ello, haciendo que el contrario soltará una pequeña risa en su interior por eso.

De un momento a otro, él la volvió a colocar contra la mesada de la cocina, pero esta vez de espaldas, tal cual como lo deseaba; le desabrochó rápidamente los botones de su short y lo bajo un poco para luego empezar a meter una de sus manos por debajo de su tanga. Y sin mucho rodeo, comenzó a tocarla a su antojo mientras que con la mano libre la colocó sobre la boca de ella, así pudiese soltar los quejidos y gemidos que quisiese sin que la escuchen los demás.

— Mmm . . .! — la chica no pudo evitar gemir fuertemente cuando Jackson había descubierto su punto sensible. Y este si que pensaba aprovechar mucho aquello.

En poco tiempo ella ya se encontraba muy mojada, teniendo a la vez una respiración completamente agitada.

El pelinegro se detuvo por unos segundos para así quitarle su short y por completo y lo que quedaba de ropa, su respiración se detuvo un poco al poder observar perfectamente el hermoso cuerpo que ella tenía. Y por su mente en ese momento pasaron muchas cosas, siendo una de ellas el querer poder tenerla de esta manera solo para él, de ahora en adelante sin importar ya nada.

Agitó levemente su rostro para distraerse de aquellos pensamientos por lo menos por el momento y disfrutar todo lo que estaba ocurriendo en el presente.

Tras eso, la tomó de la cintura y la acercó más a su cuerpo, luego colocó nuevamente una de sus manos sobre la boca de la menor para así a la vez ir introduciendo su miembro poco a poco dentro de ella. Una vez ya casi adentro, con la mano libre que tenía la volvió a tomar de la cintura para así de un firme impulso apretarla más a él, logrando que su pene entrará de una vez por todas de una embestida sin previo aviso; eso provocó que ella se estremeciera por completo, junto a que soltará otro gemido fuerte.
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— Gime para mí bebé, nadie más te escuchará. — susurró de manera ronca en la oreja de ella, para luego morder el lóbulo de esta.

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── ¿Quieres Jugar? Entonces Juguemos. [ PAUSADA Y EN EDICIÓN ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora