Gotoubun Revengers

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Habían salvado a Raiha, pero para salvar a Fuutarou debían hacer un esfuerzo grandísimo y no solo cargaban con su vida si no con muchas mas que fueron arrebatas por la ToMan del futuro.

Además, tras el sucedo de Maeda ellas no querían ver a nadie mas morir, esa cargaba estaba en ellas y por eso es que estaban impulsadas a no rendirse.

Pero ¿Acaso lograrían hacer algo? ¿Podían salvar a Draken siendo tan debiles? No podían ni si quiera proteger a la persona que juran amar.

Además de estar asustadas ante esta situación, y la única que parecía hacer algo era Yotsuba que golpeaba a los que se acercaban para que no les hicieran daño, pero hasta ella tenía limites.

— ¡TENEMOS QUE ENCONTRARLO! — Yotsuba dijo mientras acertaba un golpe a un miembro de Moebius — ¡A DRAKEN O KIYOMIZU-SENPAI! —

— ¡PERO HAY DEMASIADA GENTE! — Miku dijo esquivando a varios pandilleros peleando — ¡Es imposible encontrarlos de esta manera! —

— ¡A-Además no sabemos que hacer! — Itsuki exclamó asustada — ¡S-Si lo que nos dijo Ichika es cierto será peligroso si encontramos a Kiyomizu-senpai! —

— ¡Ese tipo es un cobarde! — Nino exclamó — Ocupando de un arma para ganar una pelea...—

— Pero ese no es el punto — Ichika parecía ser la mas calmada, pues las palabras anteriores de Fuutarou demás del beso la tenía cuerda — No podemos dar vuelta atras, hay que encontrarlo — Inmediatamente el propio Kiyomizu paso al lado de ellas, haciendo que se shockearan y pusieran en guardia — E-Es el...—

— Chicas vamos a el — Nino intento acercarse — No permitiremos que se salga con la suya —

— C-Chicas del cuchillo esta brotando sangre — Itsuki hizo observación, mientras Kiyomizu reía — No puede ser que el.... —

Inmediatamente las cinco siguieron el rastro de sangre, para ver a la distancia el cuerpo de Draken encima de un gran charco de sangre, y parecía estar muerto porque sus ojos se encontraba completamente cerrados además de que no se movía.

Un grito desgarrador salió por parte de las Nakano, alertando no solo a Fuutarou quien fue inmediatamente hacia ellas, si no del propio Mikey que estaba dialogando con Peyan.

Al parecer, sus esfuerzos habían sido en vano.

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Los gritos desgarradores de parte de las chicas al ver el estado de Draken no se habían echo de menos, pues enfrente de ellas yacía en el suelo el cuerpo de Draken, encima de un gran charco de sangre.

Mikey al ver a lo lejos lo que estaba pasando, intento acercarse pero fue en vano ya que estaba siendo retenido por varios miembros de Moebius y el mismo Hanma.

— ¡QUITATE! — Mikey le dio una fuerte patada que apenas lo hizo retroceder unos cuantos metros — Eres molesto...—

— No te dejaré ir — Hanma hizo una sonrisa un tanto tétrica y se puso en guardia — De aquí o mueres tu o muero yo Mikey.... ¡ESTO SERA FABULOSO! —

Ambos empezaron a conectarse varios golpes y patadas, era cierto que Mikey estaba siendo superior pero no había podido finiquitar nada debido a la resistencia de Hanma, que no dejaba esa sonrisa espeluznante y seguía de pie.