Celos

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Antes de darse cuenta, solo faltaba un día para que dieran su examen de licencia profesional.

- Izuku, si estás planeando ir a correr te detendré con mi arma de captura. -

- Pero-

- No, son como las nueve de la noche. -

- ¿Midobro irá a entrenar? ¡Creo que un gimnasio sigue abierto! -

- Por favor Kirishima, no le des ideas. -

Hitoshi tuvo que resistirse al ligero puchero que Izuku tenía la costumbre de hacer cuando quería salirse con la suya. Sí, ya ha notado que hace eso intencionalmente y no, no está cayendo de nuevo ante eso otra vez. Al día siguiente tendría que levantarse temprano para ir al centro donde estarían haciendo la prueba, podía sentir que toda la clase estaba nerviosa. Tal vez solo algunas excepciones como Bakugou, pero esas explosiones que escuchó en el gimnasio debían significar algo.

Por supuesto, él también lo estaba, a pesar de que tenía listo su modificador de voz y su arma preparada. Se iban a enfrentar contra chicos de otras escuelas, Hitoshi al menos tenía la ventaja de haber pasado un poco desapercibido durante el festival deportivo, pero no el resto de su clase. Ahora bien, podía sentir los nervios de Izuku desde su propia habitación, fue por eso que salió y lo encontró en la sala común a punto de poner sus zapatillas de deporte.

Aún sigue asimilando todo el tema de las parejas destinadas desde que tuvieron esa charla no hace mucho. Todo surgió por la forma en que Hitoshi logró captar la adrenalina de Izuku cuando estuvo probando su último movimiento y también el dolor en sus costillas luego de ese golpe. Cuando preguntó por eso a sus padres, nunca vio a Aizawa moverse tan rápido y obligarlo a llamar a Izuku para que fueran a su departamento.

Entonces resulta que sus padres también eran destinados y reconocieron las señales. Cuando se lo confesaron a ambos, Hitoshi no solo se sorprendió de que eso existiera, sino de que Izuku al parecer ya tenía sus sospechas, es más, lo sabía. Él... no se lo tomó tan bien al principio pensando que Izuku no tuviera planeado decírselo.

- Estaba confundido. - Fue lo que le dijo. - No quería que fuera una cosa de castas ¡Te lo dije! Y Hound Dog sugirió que lo habláramos, pero no quería obligarte a algo que no quisieras.

- ¿Me lo ibas a decir? -

- ¡Sí! Hitoshi, esto nos involucra a los dos, no iba a ocultarlo por mucho tiempo. Es solo que sucedió lo del campamento, todo lo demás y ahora con los exámenes tan cerca...No quería preocuparte. -

- Claro, por supuesto que ahora no lo estoy. -

- ¡Yo no sabía que podíamos sentir las emociones del otro! -

- ¡Pudimos investigarlo! -

- ¡Basta! - Aizawa detuvo su discusión. -

Estuvieron tensos un par de días hasta que su maestro los despidió de un curso de heroísmo porque no estaban concentrados. Eso le dolió, pero sabía que tenían que resolver las cosas. Sí, le molestaba un poco que Izuku no se lo comentara, pero durante esos días pudo comprender también que ambos estarían asustado con ese tipo de noticias. Incluso si no tienes idea de que algo así existiera. Luego de una conversación, abrazos reconfortantes y ser regañados por Aizawa, investigaron un poco más sobre qué involucraba ser destinados.

Desde que Izuku dejó por completo sus brazaletes y empezaron a salir oficialmente, Hitoshi podía sentir ligeramente los nervios del otro o cuando se lastimaba severamente. También notó que podía identificar con mayor facilidad los otros aromas que estaban alrededor de su novio. Interesante. Del mismo lado, Izuku podía percibir esas mismas señales, incluso identificar si estaba en una situación de peligro. Según Yamada, con los años podrían saber dónde se encontraba el otro bajo esas alertas.

Más allá de tu mirada [Omegaverse - Shindeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora