Obsession (Jikook22)

Cap. 1. Desconocido

—Sigue corriendo, tu puedes, vamos Jungkook

Se repetía una y otra vez en la cabeza del pelinegro, mientras corría sin un rumbo fijo, no podía dejar que sea quien sea que lo persiguiera lo alcanzara

Había una tormenta fenomenal, cosa que impedía ver hacia enfrente, maldita sea su suerte, no pasaba ni un carro por el área.

Miraba hacia los locales, y todos estaban cerrador, y los que tenía la luz prendida, nadie atendía a sus toques de desesperación en la ventana

Sus piernas empezaban entumecerce, la intensidad de la lluvia, hacia que la visión fuera más borrosa

¿Por qué tenía que pasarle esto a él?

¿Quien era ese sujeto?

Su mente divagaba para recordar, pero por el momento crítico que estaba pasando, se le era difícil pensar con claridad.

Lo único que se repetía en su mente, era lo último que le dijo el hombre antes de atascar la puerta y salir corriendo.

Tu, debiste ser mío, ¿sabes por qué no me reconoces? ¡Por qué jamás me miraste! ¡Siempre fue más importante el imbécil con el que te comprometiste! ¡Te alcanzaré Jeon Jungkook, no importa cuánto corras! te amo tanto que te daré ventaja, mi amor

Sin darse cuenta su velocidad empezaba a diminuir, estaba completamente cansado, esto debía parar.

Entonces se escucho un disparo

—¡Detente ahí, Jeon Jungkook!

El pelinegro se detuvo en seco, y se giro lentamente, visualizo la silueta del sujeto, quien lo había gritado desde aproximadamente unos 50 metros de distancia.

Solo le quedó una opción; logro ver qué un auto se acercaba, y muy poco probable se detendría si solo le gritaba que lo ayudara al momento que el carro pasará frente el, así que sin pensarlo, se aventó frente a este, provocando que lo atropellara...

Pondrían pasar tres cosas, uno, moriria,  dos, el auto se detendría auxiliarlo, tres, o simplemente huiria como la mayoría de conductores irresponsables lo hacen

Pero cualquier de esa 3, haría que lo dejarán de perseguir

Logro escuchar el como crujieron sus huesos al recibir el impacto, con la poca conciencia que le quedaba, miro hacia un lado, y el hombre desapareció, solo escucho como el dueño del auto se acercó a él, gritándole que si estaba bien y llamando a la ambulancia en el acto, y ahí, no supo más.

Minutos más tarde llego la ambulancia, entre paramédicos hablaban de las fracturas que probablemente tendría, su cabeza no dejaba de sangrar, la respiración de Jeon cada vez era mas disnea, la frecuencia cardíaca estaba debajo del rango normal, hasta que el pitido de un aparato los hizo ponerse en alerta

—Lo estamos perdiendo

—Desfibrilador 

Quitaron la camisa del chico y secaron el área

—1, 2, 3

Nada

—1, 2 ,3

Seguía sin dar resultado

—Lo perdemos

—1, 2 ,3

El aparato volvía a sonar

Luego de casi 10 minutos que parecieron horas, lo bajaron y se adentraron a urgencias

—Paciente gravemente herido, joven de 25 años de edad, sexo, masculino, sufre lesiones en la cabeza, cuello, rostro, heridas externas e internas, al parecer sufre de varias facturas