ᴏɴᴇ-ꜱʜᴏᴛ | ᴛᴏᴋyᴏ ʀᴇᴠᴇɴɢᴇʀꜱ×ᴍᴀʟᴇ ʀᴇᴀᴅᴇʀ

¹² ᴍɪᴋᴇy

Pedido de saioumami

꧁ ʀᴀɪᴋᴏ ꧂

|Raiko|

Estamos yo y los chicos de la ToMan en la casa Sano, haciendo una pijamada por pedido de Mikey. Cuando él se fue al baño yo aproveche y me comí sus preciados Doroyakis, ¿Y qué paso después? Bueno, resulta que Manjiro ya de por sí estaba enojado porque Baji y no me acuerdo quién más lo estuvo jodiendo todo el rato desde que llegamos a su casa. Gracias a mi gran mala suerte, el comandante de la Tokyo Manji Gang, el invencible Mikey. . . Explotó conmigo, teniendo que ser parado por Draken y así dejarme a mí escapar o sino me agarra y chau Raiko.

- Pobre Raiko -Comentó Takemichi sintiendo empatía y hasta lastima por mí, mirando desde arriba de las escaleras como yo bajo lo más rápido posible-.

Sí, pobre de mí, aunque los Doroyakis si que estaban ricos.

- ¡Sueltame, Kenchin! -Mikey dice en voz alta pataleando y moviéndose como gusano para intentar safarse de los brazos de su amigo- ¡Maldita sea, Raiko ven acá! -Grito con notable enojó-.

¿Ven esa cosa fantasmal ahí? No se asusten, es mi alma que salió corriendo (o volando) de mi cuerpo.

Aah, necesito que Shinichiro salga de su trabajo y venga ya acá y controle a Mikey. Porque Izana se está riendo y Emma está fuera con Hinata.

- ¡No podré retenerlo más tiempo, Raiko! -Me advirtió Draken, probablemente ya le duelen los brazos de tanto forcejeo por parte del rubio enano- lo siento, Rai -Dijo para finalmente soltar a Mikey-.

¡No, no, no! Soy muy joven para morir. Esto me hace recordar a los Juegos de terror donde el monstruo te persigue y tú corres desesperado y con miedo de saber que lo tienes detrás tuyo. Bueno, pues así se siente, encima es de noche.

Me tuve que esconder en una habitación, porque es obvio que Mikey es mucho más rápido que yo en términos de correr.

- ¿Dónde mierda estás? -Se escucho su voz por los pasillos más el ruido de las puertas de cada habitación siendo abierta con brusquedad- ¡Sal ya! -Y tocó abrir la puerta de la habitación donde yo estoy-.

Es la primera vez que lo veo así de enojado, la primera vez dije "Seguro es una masita que no mata ni una mosca". ¡Ja! Muy gracioso yo del pasado. . . Ahora esa "masita" me quiere matar y no hay nada ni nadie que lo detenga.

- Ay -Solté una queja al hacerme daño con un clavo del armario donde estoy escondido, rápidamente tape mi boca deseando que Mikey no haya escuchado nada-.

Pero no, hoy es mi día de mala suerte, o Mikey tiene buen oído, no sé. La cosa es que sí me escucho, ¿Cómo lo sé? Simple, esta caminando ahora mismo hacia el armario donde estoy escondido. Esta escena es típica de película de terror, donde generalmente la persona que teme por su vida se salva ya que el monstruo o asesino va hacia otro lado por equis cosa. Pero como dije, tengo mala suerte y esto no es una película.

- ¡Acá estás! -Abrió la puerta del armario dejándome sin escapatoria alguna, me agarro del cuello del buzo que tengo puesto y me tiro contra la pared sin delicadeza alguna-.

- ¡Espera, espera! Lo siento mucho, en serio, te compró más Doroyakis y cualquier cosa que quieras -Sudando de los nervios, viendo como Mikey me deja acorralado contra él y la pared-.

- Todas las tiendas están cerradas, ¿Dónde pretendes comprar Doroyakis? Yo los quiero ahora no mañana -Me mira con el ceño fruncido y un aura oscura que me hace sentir pequeño e indefenso-.

- ¡P-Puedo hacerte más! Sé cómo se hacen ya que. . . Es fácil y se lo hice a mi hermana menor -Dije con nervios y hablando con cierta dificultad- seguro hay lo necesario para hacerlos acá -Me relaje al ver la cara más calmada de Mikey-.

- Bien -Escuche que dijo con la voz más relajada, alejándose de mí para dejarme suspirar en paz- pero, más te vale que te salgan bien -Me advirtió-.

- ¡S-Sí! Me saldrán bien, lo prometo -Rápido conteste ante esa advertencia suya, saliendo rápidamente del cuarto con Mikey siguiendo a paso lento-.

- ¿Y? -Camino a la cocina me encontré con los chicos que me miran sorprendidos de verme sin un rasguño (Sin contar el maldito clavo del armario)-.

- Le dije a Mikey que le haré Doroyakis, y así, salvar mi vida -Dije con simpleza y tranquilidad para que no noten que realmente me estoy cagando del miedo-.

Seguro piensan que todo estará bien ya que supuestamente sé cómo hacer Doroyakis. Pero no, mi hermana me los hacía, yo nunca en mi vida he hecho Doroyakis, intentaré recordar la receta que ella me dijo. Espero tener suerte porque no voy a soportar correr de Mikey otra vez.

• • •

Tuve que hacer todo bajo la mirada atenta de Mikey y, bueno, todos. ¿Estaba nervioso? Sí, mucho, pero por fin, la buena suerte llegó a mí. . . Ok, que buena rima me tire ahí.
Como decía, la buena suerte llegó y me dejó hacer los mejores primeros (y espero últimos) Doroyakis que he hecho.

- ¿Están ricos? -Le pregunte a Mikey quien está probando uno de ellos, mordiendo levemente mi labio inferior de los nervios-.

Yo, personalmente probé uno y estaba riquísimo, así que supongo le debe gustar.

- Están. . . ¡Geniales! -Dijo Mikey con brillos en los ojos de la emoción, comiendo más de ellos disfrutando lo ricos que están- gracias, Raiko -Para sorpresa de todos, se levantó de la silla donde estaba y me dio un corto beso en los labios-.

Sip, Mikey paso de querer matarme a besarme, ¿Sorprendente, verdad?. Juro que nunca en mi vida pensé que la cocina llegaría a salvarme de tal manera, seguro el miedo me hizo hacer lo que probablemente nunca hubiera podido hacer.

- Para mí que en vez de pegarte te iba a hacer otra cosa. . . -Comentó Baji con una sonrisa media pícara- ¡Ay! -Se quejó al recibir un codazo por parte de Chifuyu-.

Por mi parte. . . Estoy rojo, como un tomate, tapando mi rostro con mis manos de la vergüenza.
Aunque, tal vez me hubiera dejado si realmente me hubiera hecho otra cosa. . . ¡D-Digo! Ustedes no leyeron esto, ¿Ok?.

o(╥﹏╥)

Pregunta, ¿Prefieren que publique capítulos dos días a la semana o solo un día?.

Pdte: Espero les haya gustado.