Eres mi Bitch-chan,Mi acosador (Laito y Tu)

34.

Le conté brevemente todo lo que había sucedido, a quiénes había conocido y cómo había sido mi estadía aquí.

-No me agradan -sonrió.

-Ni siquiera los conoces.

-Pero ya me dijiste sus apellidos y bastó eso para saber de ellos.

-Claro, olvide que eres un ser inigualable -lo miré y comencé a reír.

-Por supuesto, ya te lo había demostrado

-Lo sé, lo sé, por eso te agradezco que seas mi amigo -me acerqué a él y recargué mi cabeza en su hombro.

-No llegarás a clases si te quedas conmigo -el comenzó a acariciar mi espalda y sonreí.

Él siempre hacía eso para relajarme, siempre podía contar con él, fue la única persona que estuvo conmigo y no lo olvidaré, comencé a cerrar mis ojos hasta que se escuché un estruendo en la puerta, abrí repentinamente mis ojos y miré nuevamente a las mismas personas frente a mi, tanto los Mukami, como al Sakamaki y el Tsukinami.

-¿¡__________, estas bien!? -Ruki me miraba preocupado al igual que sus hermanos.

-Yo... -quisé hablar pero me interrumpieron.

-_________. estaba preocupado por ti -Carla parecía molesto pero a le vez angustiado.

-Tranquilo yo...

-Estuve buscándote, ¿segura estas bien?

-Laito...

-MNeko-chan, no respondías mis llamadas.

-¡Déjenme hablar! -grité.

¿Cómo querían que les respondiera si no me dejaban hacerlo? Respiré profundamente y los miré.

-Estoy bien, es sólo que tuve una visita inesperada y decidí faltar.

-¿Y las llamadas? -volvió a preguntar Kou.

-Yo...

Él se levantó y me rodeo los hombros con su brazo.

-Yo se lo quité, quería que me prestara toda su atención.

-¡Tú! -Carla lo miró furioso y solo sentí como comenzaban a reírse.

-Me da gusto que me reconozcas Tsukinami.

Yo me giré a verlo extrañada.

-¿Se conocen? -pregunté a lo que él asintió.

-¿Recuerdas que te dije que mi padre me abandonó y decidió criar a otros niños antes que a mí? -yo asentí y el se giro a los demás- Preciosa, tanto los Sakamaki, Mukami y Tsukinami son los hijos que decidió criar mi padre antes que a mí.

-Eso quiere decir que tú -Ruki lo miraba confundido y mi amigo sonrió.

-Así es -el volvió a tomarme por los hombros y guiñándome un ojo habló- Soy Kino, Kino Sakamaki