Fue toda una gran aventura, ¿Verdad Hero~? Aúnque seguramente habrá muchas más que nos esperan. Deberíamos descubrir todo lo que se nos esconde alrededor juntos.
Toma mi mano y no me sueltes. Que... A pesar de lo que diga la sociedad, mi corazón sol...
La preparación de la cena estaba casi finalizada, pero mis nervios seguían intactos o aumentaban a medida que se acercaba la noche.
Por Notch, jamás estuve así de ansioso. Era la primera vez que organizaba algo así, o la primera vez que dirigía algo en mi vida.
Fui lo más rápido a la habitación de Amy.
-(Steve) No sé que ponerme...
-(Amy) Tengo algo para estos casos, no te preocupes.
Sacó un frac elegante, de un color verde azulado muy oscuro.
-(Amy) ¿Cómo lo ves?
-(Steve) ¿No será muy elegante?
-(Amy) Tu querías que fuera así, ¿no?
-(Steve) Sí, pero ahora me come la inseguridad.
-(Amy) No te preocupes, Stevie. Haz lo que tu corazón sienta. Además, ya sabes que Herobrine siempre se viste elegante para la cena.
-(Steve) Si... Tienes razón.
Tomé una bocanada de aire e inspiré profundamente para calmar los nervios.
-(Amy) Hazme caso y déjame a mi el resto. Antes de la hora de la cena, quédate en el patio junto a la mesa y nosotros le guiaremos.
No pude evitar hacer un pequeño salto de emoción.
-(Steve) Demonios, voy a prepararme ya. Estoy que no puedo con las ansias.
Amy suelta una sonora carcajada.
-(Amy) ¡Eres demasiado adorable, Steve!
-(Steve) ¡N-No es cierto, me voy!
Y dicho eso, no tardé en irme a prepararme mentalmente para aquella cena sorpresa. Mis nervios estaban a flor de piel y admito que no podía evitar sonreír cada vez más al pensar en su reacción.
...
Llegó la hora, y me puse en mi puesto, en el jardín. Amy me dijo que me quedara allí y que ella le guiaría hasta dónde estoy yo. Tomé un par de respiraciones y mi corazón se aceleró cuando ví que estaba en la puerta del jardín, siguiendo las luces. Se acercaba a mi, andando poco a poco. Parecía realmente atónito.
-(Herobrine) ¿Qué es todo esto...?
Su rostro de sorpresa decía todo, no sabía realmente lo que estaba pasando, aunque sonreía porque parecía gustarle.
-(Herobrine) ¿Steve?
Reí un poco al ver sus reacciones y se me bajó los nervios que tenía. Quería sorprenderle y definitivamente lo conseguí. Parecía un cachorrito ilusionado.
-(Steve) Bueno... Digamos que esta noche, tú y yo, no vamos a cenar con el resto, porque...
Me acerqué y le muestro el pequeño ramo de rosas blancas.
-(Steve) ...Quería agradecerte personalmente todo lo que has hecho por mí... Y pensé que una cena... Tu y yo solos, en el jardín... sería buena idea. Ya sabes, algo romántico.
Toma la rosas, admirando cada una de ellas y acariciando los pétalos.
-(Steve) Sé que es más tradicional el rojo... Pero las blanquecinas me recuerdan a tus ojos... Por eso elegí estas.
-(Herobrine) Steve... Son preciosas... Muchas gracias.
Me di cuenta como se sonrojaba un poco. Sonreí al ver la ilusión de Hero.
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