The Black Prince.

Oculto.

Bien, el capítulo anterior realmente no mostró mucho de lo relacionado con la muerte de Yu Ziyuan, porque es desde el punto de vista menos esperado, podríamos decir que de Jiang Yanli. Y aquí esta la verdadera razón de porque Yu Ziyuan fue tan fácil. Solo puedo decir que ellas saben más que cualquiera 👀👌

Las damas gemelas de la antigua Madam del muelle de Loto caminaban tranquilamente con vestidos a juego de un tono morado. Mirando con atención cada puesto.

Ellas habían estado pensando demasiado. Jiang Fengmian siempre fue un hombre amable y nunca se atrevió a ser realmente agresivo.
Jinzhu y Yinzhu podían recordar a la perfección la escena en el gran salón.
Su Madam llevaba horas gritando palabras de desprecio hacia Wei Ying, un niño adorable de mejillas redondas y rojas qué había llegado al muelle hace unos pocos días siendo cargado por el líder de secta.

Se habían encargado de destrozar el cuerpo de la antigua Madam, los niños tal vez no recordarían todo lo que sucedió en el antiguo pabellón, pero ellas sí, la risa enojada de Yu Ziyuan se había elevado en el momento que el líder había aceptado qué A-Ying era su hijo, eso había enfurecido a la mujer que azotó el látigo en el aire con violencia.

-Cerdo asqueroso-recitó con enojo, ignorando los murmullos de los ancianos Jiang-te atreves a ser me infiel, con un cultivador rebelde-siseo con la energía espiritual incendiandose con rapidez por el arma.

-¿Quién es realmente infiel aquí?-declaró Jiang Fengmian sosteniendo su espada con dificultad-¿yo o tú?

-¿Con qué descaro te atreves a llamarme puta?-grito más que enojada, la lengua peligrosamente venenosa de la mujer lleno el pabellón-Tú maldito cerdo infiel.

Jiang Fengmian sonrió con burla, y sin temer tomo la espada apuntando al cuello de Yu Ziyuan.

-Soy un doncel, maldita perra-siseo cumpliendo la amenaza, con los ojos de la mujer sumamente abiertos.

El salón se quedo en silencio un par de segundos, ante la conmoción, la risa de Jiang Fengmian era tan malditamente dulce y apática, como sí hubiera esperado cortarle la lengua a la araña violeta desde hace años.

-Se que no son mis hijos-sonrió con burla ante la mirada retorcida de miedo de la horrible mujer-y me encargue de ellos.

La sonrisa extraña de Jiang Fengmian fue la gota qué derramó el vaso en el temperamento de Yu Ziyuan.

-¡Nunca planeaste dejarle la secta a Jiang Cheng!-grito furiosa lista para atacar de nuevo.

Una pequeña aguja se deslizó de la manga de una de sus sirvientas más confiables, fue en ese preciso instante  qué Yu Ziyuan no logro hacer qué su brazo obedeciera sus ordenes y solo se quedo parada. Pensaba que Jiang Fengmian no cumpliría su amenaza, aún con la espada demasiado cerca de su cuello, él hombre era un cobarde qué siempre prefería salir corriendo antes de enfrentarse a ella. Aunque normalmente eso solo ocurría cuando estaban discutiendo con palabras, nunca habían llegado a usar sus armas contra ellos mismos.

Su mano se sentía tan pesada, y Zidian parecía no querer responder. Ella había notado la sombra de una sonrisa proveniente de sus damas de compañía, una sostenía una aguja, mientras la otra se reía ocultandolo en su manga, había usado los puntos de acupuntura para detenerla, maldita sea. Solo escucha las risitas gemelas que le miraban con ojos críticos, su lengua se atoro en su garganta cuando sintió otra pequeña aguja atraparse en su cuello. Ella solo se sostenía por lo que parecían ser hilos de qi sujetando la como una marioneta.

Parpadeo cuando sintió el filo de la espada de su esposo cortar su cuello, su cuerpo se desplomó hacia adelante, casi como sí le cortaran los hilos, sangre salio de su boca y la vista se le nubló con el último recuerdo de Jinzhu y Yinzhu sonriendo detrás de las mangas largas con ojos brillantes y delineados en tonos rojos. Su pequeño A-Cheng fue alejado para no ver su muerte y los gritos de A-Li fueron aterradores, cerro los ojos con el último pensamiento de maldición.

Yinzhu y Jinzhu sonrieron a la par mientras compraban semillas de Loto para el joven amo A-Ying, quien había dicho que quería probarlas. Nadie podía culpar a estas dos damas de compañía qué habían ayudado con la caída de su antigua señora.

Ellas ahora mismo estaban comprando cosas para su joven amo, su amada dama A-Li qué había pedido un vestido nuevo, porque su A-Die estaba en camino. Ambas mujeres estaban felices.

El mundo no debía saber que ellas habían planeado todo, que habían tomado a Yu Ziyuan y le susurraron cosas increíbles sobre como Wei Ying era el hijo bastardo de Jiang Fengmian, que estaba dispuesto a quitarle a Jiang Cheng su lugar, el mundo no debería saber que la habían paralizado para asegurar su muerte. Ellas habían llevado a su antigua dama a la muerte.

-¡Yinzhu!-la voz alegre de Jiang Cheng rompió el panorama general-¡A-Ying dice que no puedo abrazar a gege!

Jinzhu suspiro, metió sus manos en sus mangas y asintió hacia Yinzhu, ella iría a ver el escándalo de ambos niños.

-¡Primero debo abrazarlo yo!-la voz de Wei Ying se elevó rápidamente entre risitas.

-¡Pero yo soy más chico!-grito haciendo pucheros.

-¡Y yo soy su gemelo!-Wei Ying chilló lleno de indignación-¡tengo derecho de antigüedad, llego conmigo al mundo!-infló las mejillas infantilmente.

La risa como campanas de viento rompió el aire, era una voz dulce e infantil qué hizo qué ambas damas sonrieran. Los pequeños maestros estaban tan entusiasmados por estar fuera en un día tan precioso, Wei Ying apenas se estaba recuperando de ser azotado, pero era una bola de energía pura cuando quería serlo.

-¡JieJie, A-Ying sigue sin dejarme abrazar a Gege!-el grito de Jiang Cheng fue lo que realmente hizo qué ambas mujeres caminarán hacia ahí con rapidez.

La risa de Jiang Yanli solo las motivo, sonaba a que la niña estaba disfrutando de ver a sus hermanos jugar y pelear. Sería un día difícil, más cuando el líder de secta Jiang seguía fingiendo qué estaba adolorido por la muerte de su esposa, fingir qué todos estaban tristes por su muerte, los ancianos les dijeron que tomarán a los niños y salieran a recorrer las calles. Y sí encontraban con alguien conocido por las calles, nadie necesitaba saberlo.

-A-Ying deja que A-Cheng abrace a A-Xing-canturreo divertida.

-¡Es mío!-grito de manera infantil-¡Yo tengo derecho de antigüedad!