¡wrong room! [wonmin].

capítulo veinte.

"¡Seongmin llegué!"

Gritó su hermano.

Ambos adolescentes se habían espantado, todo era silencioso y de repente llega Minhee gritando. Y no, no estaban haciendo nada como para espantarse del repentino rubio frente a, la ya cerrada, puerta. Sólo Wonjin sentado de lado en el regazo de Seongmin, su brazo pasando por encima de los hombros del pelirosa así formando un abrazo. Oh, y claro que los dos en su respectivo celular, viendo cualquier cosa que se encontrarán por ahí y fuera de su agrado.

"Uy, par de tortolitos, parecen chicle en el zapato, nunca se despegan".

Dijo con diversión.

"cállate".

y esa fue la respuesta que obtuvo por parte de su hermano menor. Y éste aún seguía en su celular, más que contestar parece que lo había simplemente ignorado. Mientras que del chico encima de él solo escucho una pequeña risa nasal y sus labios ligeramente se curvearon.

"¿te trata también así?"

preguntó.

"porsupuesto, Seongmin es un encanto insultandote o callandote cada que pueda. Realmente no cambia por nada ni nadie".

Contestó después de algunos segundos y después de apagar aquél aparato que tenía sobre su mano. Encongiendose de hombros una vez termino de hablar.

De verdad creía fielmente que el menor de todos ahí: era así. Nunca diría apodos lindos, lo más a lo que llegó fue a aquel apodo que le dió: "Wonnie". Y ya. Pero tampoco se quejaba de eso, ya que solo decía insultos o te callaba cuando algo le avergonzaba, la gran mayoría, no todas. Mientras que las demás era porque realmente no soportaba que alguien siguiera hablando, pero éstas ¿por suerte? eran escasas.

"Seongmin..."

llamó su hermano.

"¿qué?"

"mandé, se dice mandé".

corrigió, esta vez Wonjin.

el menor de ahí sus ojos rodó.

"¿mandé?"

"¡¿qué haces besando a la maldita lisiada?!"

Y los dos menores se voltearon a ver. No comprendiendo aquella broma de su mayor.

"okey..? ehh, Minhee, vamos a salir, nos vemos luego".

"oh, bien, no tarden. Espero hayas pedido permiso".

"ajá".

Wonjin se levantó del regazo de Seongmin y, porsupuesto, antes de eso quitó su brazo que se encontraba por encima del hombro del menor. Al fin dejándolo libre de su peso y una vez Ahn estuvo de pie; ambos se encaminaron hacia la puerta.

🍓

Probablemente habían pasado unos 17 minutos desde que habían salido y, al menos para Ham, iban sin un camino al que llegar realmente. Sólo caminando, tomados de la mano y, sí, demasiado cliché; ambos caminando sin rumbo alguno mientras iban tomados de las manos oh, y otro detalle más: comiendo helado, más cliché no podía ser.

"vamos a una plaza".

soltó Seongmin, sin más.

y un "oh, claro..." recibió como respuesta por parte de su acompañante, Wonjin.

y así fue. Pocos minutos después se encontraban justo enfrente de una plaza, en la cuál, Wonjin, podía deducir; había mucha gente. Y no, no estaba equivocado, en cuanto entraron vió demasiada gente a su parecer. Y también vió un sin fin de tiendas, algunas de ropa, otras de tecnología, trajes y vestidos, collares, pulseras, anillos y todo lo que tuviera que ver con plata u oro, bebidas, helados, librerías y muchas más tiendas.