Segundo día de estar viviendo en la tierra.
El ángel se despertó sintiéndose renovado y listo para la misión, mientras que el demonio se despertó sintiéndose débil y mareado. Ambos desearon poder adaptarse el uno al otro. Y el ángel parecía hacerlo mucho mejor que el demonio. Recordaron que tenían que cenar juntos al menos una vez al día, pero no estaban de acuerdo en qué comida lo harían todavía. Puede ser desayuno, almuerzo o cena. Sin mencionar el horario, ni siquiera tuvieron la oportunidad de hablar entre ellos.
El ángel salió y buscó el comedor. Este lugar no era tan complicado. Es hermoso y genial como un ático antiguo. Encontrar el comedor estaba ahora en la cabeza del ángel. Recordó el mapa que le mostró su senior. Entró en la habitación y se sorprendió por la gran mesa larga que era el comedor. Esto no fue algo que le hubiesen mencionado. Miró hacia el final de la mesa del comedor y vio que el demonio estaba ahí.
Chirrido...
No hubo un saludo sino solo un breve contacto visual. El demonio tiró de su silla y se sentó en silencio en ella, mientras miraba los alimentos frente a él con placer. Estaban uno en cada orilla de la mesa. Sin embargo, el demonio sintió que el espacio para su comida no era suficiente. Su senior le dijo que no podía cruzar al otro lado de la mesa del comedor si el ángel no estaba de acuerdo. Y, por supuesto nunca le pediría nada al ángel. Sólo lo dejo ser.
El demonio dejó de pensar y empezó a comer su propia comida. Echó un vistazo al ángel por un breve momento y frunció el ceño. Había mucho espacio en el lado del ángel porque su comida consistía en solo unas pocas cosas y un vaso de jugo de naranja. Es una pérdida de espacio. Solo un plato y un vaso de jugo de naranja ... ¿Cómo podría estar satisfecho con solo eso? Y ese plato de fruta. ¡Oh my...!
Había muchas preguntas que el demonio quería saber, pero el ángel realmente no sabía lo que este pensaba porque también tenía un sentimiento extraño sobre la comida del demonio. El ángel nunca había visto una comida lujosa como esta antes, incluso desde que nació hace mil años. ¿Es realmente una comida para una sola persona? Filetes ... Pollo ... Arroz frito ... Pasta ... Champagne ... Uvas ... Y mucho más que el ángel no había visto antes ... Él sabía muy bien que compartían la mitad de la mesa del comedor. Cuando vio la mesa por primera vez, pensó que era enorme. Pero después de ver la cantidad de alimentos en el otro extremo, se sorprendió de lo bien que el demonio se las arregló para colocar todas esas cosas. Está acomodado hasta el punto de que el ángel estaba dispuesto a cederle un poco de espacio si se lo pedía, nunca había pensado que una sola persona pudiera comerse todas estas cosas. Es algo entre extravagante y sorprendente.
Después del desayuno
El ángel fue el que se puso de pie primero. Trató de entablar una conversación mientras comían, pero no pudo porque terminó su comida primero y el demonio comía muy lento. Incluso cuando dio su último sorbo al jugo de naranja, el demonio seguía con su pollo.
"Debería ir a explorae la casa". El ángel salió del comedor después de terminar su delicioso desayuno. Todo iba bien, excepto por el hecho de que aún no había tenido la oportunidad de hablar con su compañero de casa. El ángel pasó mucho tiempo explorando la casa a tal punto de que podía recordar cada centímetro de ella. Pasó junto a la recámara del demonio, pero no tuvo el valor suficiente para entrar allí ya que salía humo por debajo de la puerta. Se detuvo un momento antes de llegar a la sala de estar y fue entonces cuando vio que el demonio estaba jugando al ajedrez, ¿Jugar al ajedrez era el pasatiempo del demonio? se preguntó. Aparte de eso, el demonio estaba jugando al ajedrez consigo mismo, era un avatar de sí mismo, porque no tenía con quién jugar. El demonio sabía que el ángel estaba mirando. También sabía que quería jugar con él, pero primero tenía que acabar con su astuto avatar. Su avatar se lo tomó con demasiada calma, ¿No sabía qué él era el maestro del ajedrez? Pero el oponente no era otro mas que él mismo, por lo que conocía todos sus trucos.
"Esto es ..." el ángel pronunció con entusiasmo junto al demonio.
"..." el demonio frunció el ceño sin una sola palabra.
"¿Qué estás haciendo?" pregunto el ángel mientras se ponía en cuclillas para ver mejor.
"..." es una pregunta tan obvia pensó el demonio. ¿No vio que estaba jugando ajedrez? ¿O pensó que estaba jugando a Jackstones? ¿O es porque en el cielo no tienen ajedrez? Incluso en la tierra lo hay. ¿Cómo podría una ciudad tan prospera como el cielo no tener uno?
"¡Uhm! Esto es ajedrez ... ¿Puedo jugar contigo?" el ángel preguntó mientras sonreía dulcemente. Pero eso solo hizo que el malhumorado demonio se enojara. El demonio le dio una rápida mirada al ángel, tiro todo y se fue. No quería hacerse amigo de nadie ahora.
¡Tap! ¡Tap! ¡Tap!
No hubo una sola respuesta o reclamo. Nada por parte del demonio. Simplemente salió de la sala de estar y dejó aturdido al simpático ángel.
"Qué hombre más raro" dijo el ángel. Este podría ser un momento para que el demonio pueda adaptarse pero es posible que aún no esté listo para tener un nuevo amigo. Entonces, el ángel decidió hacer lo que le gustaba. Una de sus actividades favoritas era la jardinería. Decidió plantar algunos árboles en la casa para que pareciera fresca y relajada. Sus hermosos ojos se iluminaron al tocar las plantas que iban creciendo. Sonrió de alegría después de darle una vida más a esta casa.
Los días del ángel y el demonio continuaron así. Por supuesto, al principio fue muy difícil. Pero después de un par de semanas, se volvió más fácil. Después de un mes, simplemente se acostumbraron. No se hablaban mucho entre ellos. No era ese tipo de conversación porque el ángel fue el único que habló, el demonio solo observó, observó y observó. Después de despertarse, desayunaban juntos como de costumbre. El ángel veía al demonio comer una tonelada de alimentos todos los días, mientras que el demonio veía cómo el ángel solo comía algunas cosas como vegetales, cereales, papilla de arroz, leche sin sabor o jugo de naranja. Solo querían que pasaran los días para poder cumplir la misión. Sin ofender. Nunca hubo respuesta del demonio. De hecho, el ángel nunca intento intimidar al demonio. El demonio solo se preocupaba de gritar en cualquier momento porque ya no soportaba la situación.
Así que hoy, el demonio dedicó gran parte de su tiempo a sumergirse en la bañera llena de sangre ya que no lo había hecho durante un tiempo. Colocó su bebida favorita a un lado de la bañera. Era un momento tan pacífico para él, era su zona segura. Inclinó la cabeza hacia el borde de la bañera deseando que este momento durará para siempre. De pronto ...
"¡Qué demonios!" el demonio salió de su bañera debido a los desconocidos sonidos del piano. Buscó el sonido. No es que nunca hubiera escuchado el piano, es solo que nunca había escuchado una melodía mejor. Después de seguir el sonido del piano, vio que el ángel estaba colocando sus dedos sobre el piano con delicadeza.
Espléndido... Esta era la única palabra que bien podía describir la música del ángel. Una de las actividades favoritas del ángel era tocar música. Y esta era la primera vez después de venir a la tierra que tuvo la oportunidad de tocar el piano. Sus ojos reflejaban la felicidad de su interior. Sus delgados dedos tocaron maravillosamente las teclas del piano. Cada nota que tocó fue perfectamente espléndida. Esto hizo que el demonio, que estaba escuchando a escondidas, se dejara llevar por esa felicidad. El demonio creía que cualquiera que escuchara esta música se dejaría llevar ya que podría ser un sonido celestial. Después de unos momentos, el ángel se dio cuenta de que había alguien mirando. Así que volteo a ver al demonio, quien se puso nervioso en cuanto se dio cuenta que el ángel lo veía. El demonio no dijo una palabra. Después de que la música se detuvo, simplemente se dio la vuelta para irse.
"¡Espera!"
"¡Ouch!" En el momento en que el ángel tocó el hombro del demonio, este se apartó mostrando sus ojos rojos como la sangre. El ángel retrocedió unos pasos mirando la parte que había tocado y que cubría el abrigo. El demonio miró al ángel con rabia. Sintió que el dolor regresaba. Había tratado de no tocar esta herida durante un tiempo, pero ¿cómo se atrevía este pequeño individuo a tocarla?. La herida que había estado esperado a que sanara.
