¿La novia de Boruto? [MITSUBORU]

Un día con las suegras

Otra hermosa mañana en Konoha era visible desde la casa Uzumaki. La paz y tranquilidad eran palpables y todos los habitantes estaban felices de tener esos momentos de relajación con sus familias, nada podría salir...

-¡VUELVE AQUÍ MALDITA LOMBRIZ DE TIERRA!

-¡PAPÁ NO!

-¡NARUTO BASTA!

-¡CORRE CUÑIS CORRE!

¡Ay!, ¿a quién engaño?, si ya saben cómo son las cosas para que me obligan a leer este guion. En fin, la hipotenusa. En la casa Uzumaki un rubio salvaje aparece persiguiendo por todos los pasillos a una serpiente escurridiza. Sus palabras, no las mías.

Naruto corría detrás de Mitsuki tras haberlo encontrado con su hijo en el sillón, y no lo malpiensen. Sí, ambos estaban recostados viendo una pelicula, solo viéndola, pero Naruto, como el dramático que es, lo malinterpretó y amenazó al novio de su hijo.

Boruto le seguía rápidamente, tratando de convencer a su padre de que no lastimara a su novio. Hinata los veía desde el sillón con una mirada seria, enojada por la reacción de su esposo. Y junto a su madre, Himawari veía todo mientras grababa con su celular, alentando a su cuñado a correr de la furia de su padre.

-¡YA BASTA NARUTO!- gritó levantándose con fuerza- ¡O DEJAS AL CHICO O TE DEJO EN ABSTINENCIA HASTA QUE HIMAWARI SE CASE! ¡TU DECIDE!

Naruto se detuvo como si hubiera chocado con una pared invisible. Volteó hacia su esposa con una curiosa mueca, daba alusión de estar pensando en la respuesta. Efectivamente, analizaba si valía la pena quedarse en abstinencia por vengar a su familia.

Mientras tanto, el albino respiraba entrecortadamente mientras se recargaba en sus rodillas, Boruto se acercó a él mientras le entregaba un vaso de agua y acariciaba su cabello mojado por el sudor de su frente. Mitsuki le sonrió y acaricio la mano de su novio mientras con la otra tomaba la refrescante agua. Viéndolos así, hasta Naruto se conmovió por la adorable relación que tenian, hasta que Mitsuki abrazo a su novio e inocentemente le dio un beso en el cuello, y créanme, esta vez sí fue sin dobles intenciones, un beso cargado del más puro e inocente amor. Sin embargo, Naruto lo vio como un grito de guerra.

-¡LO VALE! – gritó con la intensión de correr otra vez hasta su objetivo, Mitsuki empujo a su pareja lejos del alcance del mayor y se alejó hacia el lado contrario para que no saliera lastimado, pero antes de que el rubio diera un solo paso se detuvo al sentir un aura peligrosa tras de él. ¿Sabían que las madres pueden volverse asesinas profesionales si alguien ataca a sus bebés? Naruto lo supo ese día, Hinata no solo lo confino al sillón, sino que también le dejo un mini trauma a su esposo, nunca habia visto a su esposa tan terrorífica, y no sabía si estaba asustado o excitado.

Por otro lado, Hinata, tratando de compensar a su yerno, decidió invitarlo tanto a él como a Sarada a una cena. Si ambos ya habían tenido una reunión con su esposo, no veía porque no ella no podía tener una plática con las parejas de sus hijos.

Pues bien, ahora les tocaba a las suegras...

-.-

Iwadenki

La madre de Denki era una mujer poco conocida ante los medios, tenía un carácter dulce pero fuerte, especialmente si necesitaba proteger a su adorable hijo. Por eso mismo decidió, en contra los deseos de su esposo, tener una cena con su yerno mientras su esposo se ocupada de los asuntos de su empresa. Ahora se encontraba con su hijo y su novio en un pequeño quiosco en el jardín, con velas alumbrando la noche e incluso flores dando un aroma delicioso. Todos bebían de un champagne carísimo de París que había "tomado prestado" de la bodega de su esposo y reían como si escucharan un espectáculo de comedia.