٬ 👱 ․⠀Reality. ˚ . ✦ (Hyunlix)

7

Jeongin no podía creer todo lo que acababa de escuchar, se acercó a su amigo y lo envolvió en un cálido abrazo, el pensaba que Hyunjin no se merecía lo que le había pasado.

—Dios, Hyun, lo lamento tanto..

—No, tranquilo, ya estoy bastante estable, por así decirlo.— besó la mejilla del peliazul y esté le entregó una de sus características sonrisas.

—Está bien, prometo ayudarte a averiguar qué pasó con Felix.

—Eso estaría bien, de verdad muchas gracias Innie— No lo iba a negar, había extrañado demasiado a Jeongin.

—Ahora que lo pienso, una amiga de mi madre es bruja, quizás pueda ayudarte.

—¿Bruja? ¿Y eso en que ayudaría?— Preguntó curioso el castaño.

—No lo sé, quizás el alma de Felix se salió de su cuerpo o una mierda así.— Bromeó en peliazul y ambos estallaron en carcajadas.

—Que idioteces dices, Innie.— Negó y despeinó al más bajo.

—Idiota tú.

—Pero así me recibiste en tu casa.

—Vete a bañar, cochino, hueles a caca.

—Con gusto ¿Dónde está el baño? Hace más de un año que no me doy una ducha decente.— Jeongin puso cara de asco y Hyunjin guiñó el ojo.

—Por allá, báñate, fuchi.— sacó la lengua simulando asco y el castaño se levantó para darse la deseada ducha.

Mientras tanto el peliazul sacó su teléfono y llamó a la amiga de su madre para preguntarle acerca de lo que el castaño le había contado, la bruja dijo que tendrían que charlarlo más a profundidad prescencialmente, por lo qué Jeongin le pidió si podían verse para hablar sobre eso, ella le dijo que sí y le asignó un día, ahora solo hacía falta avisarle a Hyunjin.

Por otra parte, el chico de cabello castaño ya había concluido el baño, ahora se encontraba mirándose al espejo, su color de pelo lo tenía totalmente aburrido, al igual que esos mechones largos que amenazaban con cubrir su vista, debía cambiar su aspecto, cada vez que observaba su reflejo solo recordaba el psiquiátrico.
Se secó y sacó ropa de su valija, toda esa ropa que llevaba un año sin usar, se colocó su pijama favorito y salió del cuarto para sentarse junto al peliazul.

—¿Que hacías?— Le preguntó al chico sentado a su lado.

—Hablando con la amiga de mi madre.

—¿La bruja?

—En efecto.

—¿Que te dijo?

—Que teníamos que verla prescencialmente para charlar más profundamente del tema— Jeongin explicó y Hyunjin elevó una ceja.

—¿No nos va a secuestrar, verdad?

—No, bobo, solo vamos a hacerle una consulta.

—Uhm.. ¿Y cuándo sería eso?

—Mañana por la tarde.

—Está bien, no voy a negarte que las brujas dan escalofríos.

—Tu cara da escalofríos.

—Cierto, es por qué no me tomé la pastilla, voy.

El castaño se levantó y fue a concretar la acción que había dicho, dejando a un peliazul sonriente recostado en el sofá de la sala.