٬ 👱 ․⠀Reality. ˚ . ✦ (Hyunlix)

11

Al llegar a la casa de Jeongin, el peliazul lo recibió con el almuerzo, Hyunjin sonrió y se sentó junto a su amigo.

—Gracias, Innie

—No agradezcas, disfruta

El castaño asintió y empezó a comer, la comida estaba realmente deliciosa, Jeongin siempre había tenido dotes de cocinero.

—Cocinas demasiado rico.

—Lo sé.— Habló con su boca llena y Hyunjin puso cara de asco.

—Luego el cochino soy yo ¿Verdad?

—Siempre vas a ser el cochino.

Los dos rieron y siguieron peleando unos minutos más mientras terminaban de almorzar.

—¿Y como te fue con Felix?— Cuestionó el peliazul.

—Despertó.— Jeongin dejó de comer sorprendido.

—Como, como, como, qué

—Lo que escuchaste.

—¿Y te recordaba?

—Al parecer no, pero se le hacía conocido todo lo que le contaba y yo en general

—Mmh.. eso sí es raro.

—Ciertamente.

—Hablando de eso, en la tarde tenemos que ir a ver a la amiga de mi madre

—Es verdad, ¿tú dices que tendrá que ver con algo de eso?

—No lo sé, pero vamos a averiguarlo.

-

El reloj marcaba las tres de la tarde y los dos chicos estaban en camino a la casa de la dichosa bruja, Hyunjin estaba nervioso, realmente no sabía lo que la mujer iba a decir ¿Y si tal vez si tenía que ver con cosas esotericas?

—Bueno, es aquí.— Pararon frente a una casa vieja y sucia.

—Voy a enojarme mucho sí nos secuestran.— Advirtió el castaño.

—Relajate bro

Jeongin tocó la puerta suavemente y esperaron, cinco, diez, quince, Hyunjin perdía la paciencia.

—Ya vámonos.

—Espera, oigo algo.

El peliazul puso un dedo sobre sus labios para que se callara, efectivamente se oían pasos, y una mujer adulta junto con un gato negro salieron de la casa.

—Hola, Yang Jeongin ¿Verdad?— Preguntó con una sonrisa, se veía amable.

—Así es, señora

—Oh, estás demasiado grande, niño, pasen, pasen— La mujer se hizo a un lado y dejó pasar a ambos chicos, era gracioso observar como el castaño iba pegado al peliazul por miedo.

Se sentaron en la sala de la señora frente a un escritorio y está tomó a su gato en brazos.

—Bien, según lo que me contó Jeongin, lo que te pasó fue que encontraste a tu llama gemela.— Los dos chicos se miraron entre sí sin entender. —Tú y ese chico estuvieron conectados desde el día de su nacimiento, su alma es una divida en dos, energía femenina y energía masculina, siempre estuvieron destinados a encontrarse, pero algo estaba impidiendolo.
Cuando el chico tuvo el accidente, su alma aprovechó el momento para salir y poder contactarse contigo, eso fue lo que ocurrió según pude entender.

El castaño estaba boquiabierto con lo que acababa de escuchar ¿Sería esto cierto? Sí era así, necesitaba decírselo a Felix.

—Pero, ¿Cómo podríamos confirmar esto?— Cuestionó el peliazul sorprendido.

—Necesitaría ver al otro chico y hacer una especie de regresión para ver si recuerda algo, o si podemos contactar con su alma.— Hyunjin asintió.

—El todavía se está recuperando, mañana van a darle el alta, pero en cuanto pueda vendremos junto a el, gracias señora.

—Llamenme Sun, fue un gusto.