Era un día asoleado y despejado. La alarma acababa de despertarme y, aunque debería de sentirme feliz por haber sido aceptada en la prestigiosa UA, realmente no cabía emoción alguna en mi en estos momentos.
Me levante a regañadientes y lo primero que hice fue lavarme la cara. Me miré al espejo y observé la gema impregnada en mi frente, la hermosa piedra roja en forma de rombo que era un recordatorio constante del poder que guardaba en el interior de ella.
O más bien de la persona que guardaba.
Mi padre solía molestarme los primeros años que estuvo encerrado adentro, intentando atormentarme con amenazas y con su supuesto plan para matar a todo el mundo. Después de un tiempo dejo de hacerlo, tal vez acepto que jamás lograría salir o simplemente está tramando algo.
Deje de preocuparme por eso hace un tiempo, y decidí concentrarme en crear una vida normal junto a mi madre. Después de todo lo que habíamos pasado era lo menos que podía hacer.
Me vestí con el uniforme y le lleve el desayuno a mi madre. Antes de irme me deseo mucha suerte, y lo único que pude hacer fue mostrarle una mueca.
No sabía cómo sentirme al respecto.
Después de que fallé en el examen de prueba mis esperanzas se habían ido, y ahora, por arte de magia, estaba caminando hacia la UA para tomar mi primera clase.Una vez entré a las instalaciones mi nerviosismo comenzó a mostrarse. Llegué al salón y vi a todos mis nuevos compañeros, platicando y riendo unos con otros.
Era la primera vez que asistía a una escuela ya que siempre había estudiado en casa, así que mi ansiedad social estaba desbordándose. Me fue casi imposible detener el impulso de salir corriendo al ver a tanta gente desconocida, pero antes de que pidiera huir un chico alto con lentes noto mi presencia y me agarro del brazo para ponerme en frente de toda la clase.
—¡Guarden silencio, compañeros! ¡Nuestra nueva compañera hablará! —dijo a todos, pero nadie le hizo caso.
—¡Cállense de una puta vez, idiotas! —gritó un chico rubio con enojo, irritado por el ruido del salón.
Todos se callaron y prestaron atención. Sus miradas se posaban en mi, observándome con atención.
—Apellido, nombre y quirk —habló un hombre con visibles ojeras en los ojos, supuse que era el sensei.
—Mi nombre es Hiroshi Akane y mi quirk... —hice una pequeña pausa, intentando buscar las palabras para explicarles mi don—. Consiste en manipular mi propia energía oscura y crear cualquier cosa que desee.
El salón se quedó en un silencio que no tardó en incomodarme. Mire al sensei y éste estaba dormido en un saco de dormir, lo cual se me hizo bastante extraño.
—¡Genial! —grito de repente un chico con pelo amarillo.
—¿Por que no nos enseñas un poco? —dijo esta vez una chica, su piel era rosada al igual que su cabello.
—No creo que sea buena idea...
—¡El salón de clases no es para practicar nuestros dones, Mina! —respondió el chico con gafas.
Y antes de que el salón estallara de nuevo en desorden el sensei habló.
—Todos preséntense con su nueva compañera para iniciar de una vez por todas la clase —dijo con voz cansada.
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Hermoso sufrimiento || Shoto Todoroki
FanficHiroshi Akane es hija de uno de los villanos más fuertes que jamás han existido, pero ella, para librarse del legado de su padre, logró capturarlo en una gema que ahora guarda en su frente, siendo parte de ella. Ahora asiste a la Academia de Héroes...