.｡..｡.♡✿ 𝓜𝓾𝓳𝓮𝓻 𝓟𝓻𝓸𝓱𝓲𝓫𝓲𝓭𝓪 ✿♡.｡..｡. ~ Ray y tú

•|✿⊱ 𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 4 ⊰✿|•

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Volví al salón cuando las clases terminaron, todos al salir me miraron con pena, algunos con una sonrisa ladina, tal vez porque recibiría mi castigo por haber llegado tarde a esta clase, pero realmente no me importaba cómo me miraban, ni lo que me estuviera esperando por haber llegado tarde, he pasado por esto muchas veces y ya no me importa nada. Tomé mi asiento mirando como la anciana borraba lo que tenía en la pizarra, no pude evitar ver su trasero

Ahora que la veo bien, me doy cuenta de que tiene un cuerpo de infarto, sus nalgas eran grandes, con una nalgada se moverían como gelatina. Me reí por mi propio pensamiento, haciendo que _________ se diera vuelta y me mirara con el ceño fruncido, dejé de reír mirándola con una ceja alzada y mi típica sonrisa ladina, pasé mi mano por mi pelo haciéndolo para atrás, tratando de verme sexy, pero no ocasione nada en ella, sólo alzó una ceja y se dió la vuelta ignorándome

¿Quien se cree que es para ignorarme de ese modo?, ¿Acaso tiene idea de cuantas chicas están deseando que yo las vea de ese modo?, Sin duda no sabe lo que es disfrutar de la vista, osea, soy el chico más guapo y deseable de la preparatoria, todas están atrás de mí, ¿Por qué ella me ignora así?, Todas con una simple mirada seductora estan bajo mis pies, haciendo lo que yo les pida, pero ella no, sigo diciendo que es igual que yo, pero en versión mujer

—Quita esa mirada de niño presumido —dijo dándose la vuelta —Te daré unos problemas de matemáticas para que las resuelvas en lo que estás aquí

—¿No puede ponerme algo más fácil?, No sé, como besar sus labios

—Te recuerdo que hacer ese tipo de bromitas te podría costar caro

—Me gusta arriesgarme

—Conmigo no niño, harás lo que yo te diga y sino lo haces atente a las consecuencias

—Cuantas veces he escuchado eso de otras maestras, y siempre terminan perdiendo ante mí —sonreí —Estoy seguro que tu también saldrás perdiendo, así que no me retes nena

—Primero te enseñaré a dejar de hablarme así —me tomó de una oreja

—¡Oye qué demonios te pasa!, ¡Suéltame me duele!

—Será peor si sigues llamándome por apodos absurdos —me soltó —Ahora cállate y presta atención

Llevé mi mano hasta mi oreja para tallarla y que el dolor disminuyera, demonios pero que mujer, tiene una fuerza impresionante, creí que me arrancaría la oreja, pero eso no quita el echo de que quiera estar con ella, al menos por una noche. _________ anoto unas cuentas en la pizarra explicándome cómo debía de resolverlas, no eran tan complicadas, eso nos las enseño la señora Sonia, y en lo poco que le había prestado atención, le pude entender cómo resolverlas

Las anote en mi libreta y las fui resolviendo sin dejar de ver a _________, sólo cuando se distraí, pero cuando me miraba volvía mi vista a la libreta a seguir resolviendo el problema, algo que no me costó ni 20 minutos, las terminé en un dos por tres, y claro que cuando se las mostré a _________ se quedó sorprendida de ver qué todas estaban bien; puede que sea un chico problema en la preparatoria, pero eso no quita que deje de lado mis estudios, hago mi esfuerzo para prestarle atención a los maestros y al menos tener una nota buena

Es bueno tener un cerebro exelente, así puedo repasar una cosa al menos cinco veces y es suficiente para resolver cualquier cosa, nadie de aquí sabe que yo soy bueno en todas las materias, pues me tomarían como un cerebrito como a Norman, y no quiero ser el házme reír de la preparatoria al saber que soy un cerebrito con carácter de un Bad boy

—Pensé que eras más tarado, pero me equivoqué

—Puedo hacer muchas cosas, sólo es cuestión de que me deje enseñarle

—Haces otro chiste como ese y te dejo la otra oreja roja

—Bien, me calmó

________ me dejó sentarme en mi asiento tranquilamente, con tal de que no haga ruido, no podía ni siquiera sacar mi celular, sólo quedarme callado esperando el momento en que la anciana decida dejarme ir, bueno, no dijo nada de que estaba prohibido dormir, así que, me dormiré un rato.