🅟🅔🅛🅤🅒🅗🅔
𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝙴: 𝚄𝚗𝚊 𝚖𝚊ñ𝚊𝚗𝚊 𝚍𝚎 𝚜𝚞𝚎ñ𝚘.
El frío invierno suele ser una época que es preferible para varias personas por diferentes cosas, unas más razonables que otras pero al final no deja de ser de las épocas que muchos esperan con ansias. Ya sea porque es más fácil el abrigarse para mantenerse calientito que en el verano buscar algo con lo que mantenerte fresco, o porque podemos usar prendas que en otras estaciones nos estarían dando un terrible calor, quizás también por las festividades y comida que solo solemos probar por estas fechas.
En el caso de cierta persona, era la excusa para acurrucarse y abrazar a su pareja más de lo normal.
(...)
La mañana era bastante fresca después de que toda la noche hubiera llovido como si no hubiera un mañana definido, aún estando lo suficientemente cubierto por suaves sábanas sentía un incómodo frío al intentar abrazar algo que claramente no se encontraba ahí, revolviendo se más en su cama buscando a la persona que le hacía sentir todo tipo de cosas fue que ya un poco más frustrado por no hallarlo decidió pararse por fin de su cama, aun con su pijama decidió salir de la habitación con sus pantuflas en forma de perrito con una mancha en su ojo izquierdo.
No sabia a donde se dirigía su somnoliento cuerpo pero aun así no renegaba y se dejaba guiar por el olor de la comida y el sonido de algunos trastes, caminaba por la sala mientras se tallaba los ojos y de vez en cuando miraba de reojo algunas fotos colgadas en la pared, algunas nuevas y otras de ya varios años atrás, pero sin duda sus favoritas eran las que estaban casi al final.
Cerca de la entrada de la cocina se podían apreciar tres fotos un poco más grandes que las anteriores.
La que se encontraba en la izquierda era una foto de tres jóvenes con el uniforme de una pandilla, dos rubios abrazaban alegremente a uno de pelo negro que intentaba quitarselos de encima, la otra era de un grupo de adultos tratando de tomar una foto decente en medio de lo que aparentaba ser una reunión y la ultima la cual estaba en medio de las otras dos, se podia apreciar a dos adultos cargando a un pequeño que abrazaba felizmente dos peluches.
Al terminar de verlas y recordar algunas cosas por fin se dignó a continuar su camino un poco más despierto.
Al estar en la entrada de la cocina decidió apoyarse en el marco, admirando así por un pequeño rato a la persona que se encontraba cocinando sin darse cuenta de su presencia.
Aprovechando esto decidió acercarse y al ya estar detrás de él movió el largo cabello del chico para luego abrazarlo por la cintura y apoyar su mentón en el hombro de este, respirando un poco de su aroma.
Recibió unas pocas caricias en la cabeza hasta que el contrario dejo lo que estaba haciendo para voltearse y permitirle abrazarlo de frente, aunque aun apoyando su cabeza en su hombro con los ojos cerrados mientras en contrario volvió a otorgarle algunas caricias en su cabeza.
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│ ፝֯֟𝓟𝓮𝓵𝓾𝓬𝓱𝓮 ⁝│Kokonui
Fiksi Penggemar▏Esperaba de todo menos que Sanzu ▏apareciera con ese estúpido peluche ▏en manos, maldita sea las ganas de ▏abrazarlo como si se tratase de ti no ▏no me faltaban, ni siquiera podía verla ▏a ella en ese peluche solo a ti y hacia ▏que mi pecho dolier...