Capítulo 7: Enyesado

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Llegamos al hospital y me llevaron a una sala. Yo estaba mareado y todo lo estaba viendo lento, hasta que todo lo veía negro.

-Allan, Allan, despierta- dijo el doctor

-¿Cómo sabe mi nombre?- pregunté

-Una chica que te trajo me lo dio- dijo

-Au- dije

-¿Que te duele?- preguntó

-El tobillo- dije

-¿Me permites tocarlo?- dijo

-Si- dije

-Esta muy inchado- dijo

-Au- dije

-Parece que esta fracturado, voy a mandarte a hacerte unos rayos x para comprobarlo- dijo

-¿Qué pasa si sí esta fracturado?- pregunté nervioso

-Tendremos que enyesartelo- dijo

No quería que me lo enyesaran porque apenas llevo una semana en la escuela, se van a burlar de mi.

-Bueno Allan, coloca tu pie encima de esta mesita- dijo

-au, au...no puedo- dije

-Ven yo te ayudo..- dijo

-No no, aaaau- grité por el dolor

Yo me decía a mi mismo, ojala que no esté fracturado mientras que el doctor me escaneaba el pie con una máquina toda rara.

-Ya lo escanie- dijo

-Y ¿Cómo esta?- pregunté

-Esperate, los resultados se estan imprimiendo- dijo

-Okay- dije

-Aquí está...mm, creo que vamos a tener que enyesartelo- dijo

-Ay no- dije con tristeza

Me llevaron a otra sala que supuse que era en la que enyesaban porque había 3 doctores y un montón de cinta para yeso a los lados. Me acostaron en una cama.

-¿De qué color quieres el yeso?- preguntó un doctor

-Verde- dije

-Voy a inyectarte una anestesia porque cuando voy a enyesarte el pie necesito apretarlo fuerte y no quiero a nadie gritando aqui ¿okay?- dijo

-Esta bien- dije

-Ya esta, ahora a enyesar- dijo

-¿Cuanto tiempo tengo que tenerlo puesto?- pregunté

-3 meses- dijo

-Oh por Dios- dije

-Vas a tener que comprar unas muletas- dijo

-¿Qué es eso?- pregunté

- Es como un tipo de bastón de metal con que el extremo superior está adaptado para colocar la axila y la mano, y que se utiliza para apoyarse al andar las personas que tienen alguna dificultad al hacerlo, en tu caso es para caminar- dijo

-Ah okay- dije

-Listo, ya lo enyesé- dijo

El doctor me sacó de la sala en una silla de ruedas y me llevó hasta donde estaba Marisol y Roberto.

-¿Estas bien?- preguntó Mari

-Ahora si- dije

-Tenga, lleve eso a la caja allá lo paga- dijo el doctor

-¿Qué es?- pregunté

-Es un papel que dice todo lo que se te hizo para poder cobrarte- dijo

-Ay, debo llamar a mi hermano- dije

-¿Porqué?- preguntó Mari

-Para que me traiga el dinero para poder pagar- dije

-No, yo te lo pago- dijo Rober

-¿Enserio?- pregunté

-Si dale- dijo

-Despues te lo pago- dije

-No te preocupes, es cortesía- dijo

-Gracias- dije

Pagamos y nos fuimos hasta el carro, de ahí me llevaron hasta mi casa.

-¿Qué te pasó?- preguntó Scott

-Larga historia- dije de mal humor

Y subí hasta mi cuarto cojeando y tratando de no golpearme mucho. Me pareció una eternidad subir las escaleras. Me recosté en mi cama. Que bueni que mañana es domingo me dije a mi mismo.

-Allan, vamos a salir- dijo Scott -¿no vienes?- añadió

-No puedo ni moverme- dije

-Papá no esta, cuidate, adios- dijo

-Adios, tranca bien la puerta- dije

-Okay- dijo

Miré el reloj y eras las 7:13 pm. No podía moverme mucho porque con cualquier movimiento qye hiciera me lastimaba el pie. Asique me quedé quieto.

-Hola mi amor- dijo Johana

-¿Que haces aquí? creí que Scott había trancado la puerta- dije

-Me escondí entre uno de los arbustos de tu patio y Scott si trancó la puerta pero no la cerró. Cuando la estaba cerrando lanzé una pierda y detuvo la puerta- dijo mientras sonreía

-Estas demente- dije mientras intentaba moverme pero el dolor no me dejaba

-Yo no diria demente sino loca de amor- dijo

-au- dije

-¿Esta intentando irte? vi cuando saltastes por la ventana pero cuando salí de la casa no te vi- dijo

-Yo estaba en el patio- dije

-¡Debí bucar en el patio!- dijo

-¡Vete!- dije

-No, porque te traje un regalo- dijo

-¿Que cosa?- dije inseguro

-Un condón- dijo con una sonrisa en la cara

Traté de levantarme pero no podía, me dolía demasiado el pie. Ella trancó la puerta y se subió a mi cama, yo la estaba empujando lo más que podía pero ella me ganó y se sentó encima mio de manera que sus piernas estaban encima de mi brazos para que no la pudiera seguir empujando y su nalga muy cerca de mi cara.

-Johana no- dije

-Allan despues me agradeces por el regalo, ahora estamos en la acción- decía mientras me quitaba el jean

-¡Esta muy mal lo que estas haciendo!- grité

-¡Oh! lo tienes bien grande papi- decía mientras me miraba en el centro del boxer

-Porfavor Johana piensa muy bien lo que estas haciendo- 1dije

-Ahora ya nada podrá detenerme- dijo

Intenté empujarla pero no pude. Ella me quitó el boxer mientras reía y me empezó a ponerme el condón. Cuando me lo puso me lo empezó a chupar.

-¡Auxilio!- grité

-Como vuelvas a gritar, te vas a arrepentir- dijo mientras sacaba una navaja de su bolsillo

Dificultades de vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora