| Capítulo 34

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YoonGi sacó las llaves de su apartamento y las introdujo en la puerta sin dejar de besar a TaeHyung. El menor por su parte se aferraba al cuello de YoonGi sin parar de besarlo. YoonGi al fin pudo abrir la puerta dejándolo entrar mientras cerraba de nuevo con su pie. Corrieron hasta la habitación del mayor, TaeHyung se dejó caer en la cama separándose unos pocos segundos de los labios del contrario hasta que éste se subió encima de él cuidando de no aplastarlo con su cuerpo. Los sonidos de los besos eran lo único que se escuchaba, por momentos TaeHyung soltaba pequeños gemidos de placer al sentir los labios de YoonGi en su cuello o besando su rostro tiernamente.

—¿Estás seguro de esto? — preguntó mientras lo miraba fijamente.

—Lo estoy. — TaeHyung le sonrió, YoonGi volvió a acercarse para besar sus labios.

La guerra de besos siguió dándole paso a sus lenguas. Era algo que TaeHyung nunca había hecho pero al sentir la lengua de YoonGi que le pedía permiso para entrar, accedió abriendo un poco más su boca mientras sus lenguas se encontraban en una difícil batalla para saber quien era el vencedor. YoonGi metió una mano dentro de la camisa de TaeHyung mientras acariciaba su vientre y su espalda. El menor soltó un gemido al sentir la erección de YoonGi en sus piernas.

—Vamos, hazlo. — lo alentó con un gemido levemente agudo.

YoonGi asintió, comenzando a desabotonar la camisa blanca que llevaba TaeHyung mientras que con su otra mano se deshacía de su saco y comenzaba a desabotonar la suya. TaeHyung rápidamente quedó descubierto ante la hambrienta mirada del mayor, sintiéndose abochornado y penoso. YoonGi se tomó un momento para mirarlo atentamente, TaeHyung sonrojado con los cabellos hechos un desastre y sus labios rojos e hinchados, era su nuevo concepto favorito.

El menor al sentirse muy observando por el mayor cubrió sus ojos con sus manos mientras sonreía. YoonGi le sonrió, apartandolas para mirarlo y luego besarlo. Comenzó a quitarse su playera ante la atenta mirada de TaeHyung, llevando una mano hasta los pantalones del penoso chico. TaeHyung detuvo su mano ahí mientras lo miraba con terror.

—¿Qué sucede? — le preguntó agitado.

—No mires cuando lo hagas. — suplicó.

—¿Por qué? — lo miró preocupado.

—Tengo la cicatriz de cuando nació EunMin y me da vergüenza.. Siento que cuando la veas te dará asco y me dejarás. — dijo mordiendo su labio para no llorar.

YoonGi se acercó hasta él, limpió sus lágrimas mientras besaba sus mejillas con ternura. Así se quedó un momento mientras que con sus manos ágiles y lentas, comenzaba a bajar los pantalones de TaeHyung sin que él notara que lo estaba haciendo. Cuando se separó, bajó su mirada, notó la cicatriz de la que TaeHyung hablaba pero no sintió asco, al contrario, se sintió más enamorado de su chico y de todos los sacrificios que tuvo que hacer para poder tener a su niña.

TaeHyung volvió a cubrir sus ojos maldiciéndose por no detener a Min mientras podía hacerlo. Pero sintió algo que lo sorprendió y lo hizo llorar más de felicidad que de tristeza. YoonGi estaba besando delicadamente su cicatriz mientras le decía lo hermoso que era y cuanto lo amaba. TaeHyung en poco tiempo ya estaba en boxers mientras enredaba sus dedos en el cabello de YoonGi que lo besaba.

—Esto no es justo, solo yo estoy en ropa interior. — hizo puchero.

YoonGi sonrió ante eso. Comenzó a terminar de quitar lo que faltaba de su ropa para quedar de la misma manera que TaeHyung.

YoonGi sonrió ante eso. Comenzó a terminar de quitar lo que faltaba de su ropa para quedar de la misma manera que TaeHyung. El menor lo miró apenado, eso era algo tan íntimo que se sentía rojo de la vergüenza. Lo habían hecho antes, claro que sí, pero ninguno de los estaba conscientes de eso, solo lo hicieron sin pensar, ahora era algo real, los dos estaban conscientes, así que se podría decir que esta sería su primera vez oficial.

—Eres realmente hermoso, Tae. — le dijo para comenzar a besar su cuello.

—Tú también lo eres. — con sus manos acarició el pecho desnudo de YoonGi.

Las manos de YoonGi comenzaron a bajar hasta llegar al elástico del bóxer de TaeHyung pero ¡Oh, Sorpresa! El celular de YoonGi comenzó a sonar. TaeHyung lo miró apenado indicándole con la mirada que debía contestar. YoonGi se levantó a regañadientes para buscar su celular en su pantalón. Miró el número, era un número desconocido, no lo tenía agendado. Contestó ante la atenta mirada de TaeHyung y palideció al escuchar su voz.

...

—¿Estás en casa, Yoonie? Me preguntaba si podría pasar un rato, mi apartamento está siendo ordenado por las chicas de limpieza que contraté y no tengo a donde ir.

Habló con ternura y pasividad para convencerlo.

—YeonWoo.. No lo creo, estoy en algo importante ahora y prometiste no volver a buscarme después de lo que pasó.

Bajó un poco la voz para que TaeHyung no escuchara.

—Sé lo que dije pero en serio te necesito ahora, eres el único con el que tengo contacto y por lo tanto, el único que me puede ayudar.

—No puedo, te dije que ya no. Estoy con mi pareja ahora mismo, por favor YeonWoo, deja de llamar y sal de tu casa mientras limpian, no necesitas más de mí.

TaeHyung gateó en la cama hasta donde se encontraba YoonGi sentado, lo abrazó por la espalda mientras le repartía pequeños besos.

—Pero Yoonie...

—Tengo que colgar ahora, estoy en algo muy importante.

YoonGi no esperó a que YeonWoo dijera algo más, terminó la llamada y lanzó su celular junto con su pantalón al suelo. Tomó las manos de TaeHyung, lo hizo moverse hasta quedar sentado en sus piernas.

...

—Lo siento por eso ¿Quieres que sigamos? — YoonGi llevó una mano a su frente mientras cerraba un poco sus ojos.

Se sentía frustrado y cansado, ahora la culpa lo había vuelto a golpear, tenía miedo de decirle a TaeHyung lo que había sucedido en la tarde y que él se molestara así que mejor preferiría esconder la verdad, aunque no le haya seguido el beso a YeonWoo, YoonGi era igual de culpable por no separarlo y dejarlo hacer lo que quisiera con sus labios. TaeHyung miró que algo lo estaba mortificando pues había soltado un suspiro en cuanto el menor lo abrazó y besó.

—Perdóname, Tete. — dijo. TaeHyung negó sonriente.

—Está bien, no sucedió nada. Vamos a dormir.

TaeHyung sonrió, levantándose de sus piernas para tomar las manos de YoonGi y hacerlo levantar para entrar a la cama.

—Hoy no fue mi día, me siento muy mal porque te mereces esto y me siento tan cansado.. — TaeHyung lo hizo callar.

—Está bien, Yoonie, yo no me siento mal, estoy bien, estoy feliz con que tú seas honesto y cariñoso conmigo. — sonrió.

YoonGi maldijo, TaeHyung no se merecía a alguien tan mentiroso como él, que no tenía todo el valor para ir y decirle lo que había hecho mal. TaeHyung cubrió sus cuerpos con las sábanas, se abrazó a YoonGi mientras cerraba sus ojos. YoonGi le sonrió y besó su frente para abrazarlo más a su pecho y cerrar sus ojos también.

papi ¡ yoontae Donde viven las historias. Descúbrelo ahora