Esa diva es un chico

Capitulo 9: Los Mundos Llegan A Chocar.

Narra Dani.

Entre a casa asegurándome de que el chico que había ido, me sentía un poco mal por ellos.

Saque mi celular del bolsillo, tenía un texto de Ben, el cual me preguntaba si Habia llegado a casa, sonreí.

El era un encanto.

Suspiré y camine a mi habitación, a estas alturas lo único que me hacía falta era dormir.

Tal vez consentrarme en metas cada año funcionaria para vivir.

Aún quedaba pendiente el echo de que quería ser follado por el bombón de Ben, y eso iba a pasar si o si.

Respondí el mensaje de Ben, explicándole que lamentaba haberlo asustado.

Me tire en la cama una vez estando en mi habitación y mire al techo, las estrellas que brillan en la oscuridad estaban aún en un verde pálido.

Era aún temprano para dormir pero en serio que me hacía mucha falta.

Mire mi móvil de nuevo antes de cerrar los ojos, y tenía mensajes de Erika y las demás, Suspiré había regresado en serio.

Bloquee el teléfono y cerré los ojos quedándome dormido.

NARRA Ben.

De forma inconsciente los había seguido para ver si el estaba bien.

El chico venía de vuelta sobre la acera pero no detuve mis pasos y me pare frente a él haciendo que me mirara con una ceja alzada.

Sentía por primera vez en mi vida una inconformidad al verlos juntos, me sentía mal y dolía el pecho.

- ¿Pasa algo? - preguntó de forma seria, este tipo no me agradaba para nada, y sabía que lo había visto en el campamento.

No sabía sus intenciones con Daniel, no sabía que pretendía o buscaba, o si simplemente quería jugar.

- ¿que buscas con Daniel? - pregunte en seco cruzandome de brazos mirándolo de reojo.

El se sorprendió un poco por mi pregunta pero trato de no cambiar su expresión y me miró juguetón.

- que yo recuerde, no tiene nada que ver contigo lo que yo quiera amigo - dijo terminando con una risita burlona y pasando de largo por mi lado.

- Te advierto que si el derrama una solo lagrima por tu culpa - eleve un poco la voz haciendo que detuviera su paso y giro a verme de forma amenazadora.

- ¿Que? - preguntó girandoce de nuevo en mi dirección - ¿que harás? ¿Golpearme? - sonrio burlon - eso no me asusta para nada Ben, y te prometo, que si eres tu quien hace algo que no debe, seré yo quien te aniquile - Me miró de arriba abajo, la ira que sentía en ese momento podría salirme por la boca, apreté los puños y el solo se dio media vuelta y se fue.

Este chico me caía muy mal, y que fuera amigo tan íntimo de Daniel me desconcertaba.

Mire mi móvil de nuevo, el ya había respondió mi mensaje.

Al menos yo tenía su numero, sonreí ladino y comencé a caminar de vuelta a casa.

NARRA Dani.

Odiaba los sábados, y más por la mañana, no sólo porque recibia una llamada cada 5 min de Erika para
Preguntame que botanas debería traer para la pijamada.

No me molestaban sus llamadas, me molestaba que me despertaba de mi sueño reparador.

Habia estado dormiendo entre basura y al fin estaba en mi suave cama.