Beacon Hills: Gay Wolf

Capítulo 14.- Abrázame fuerte

Capítulo 14.- Abrázame fuerte

Derek había llegado a un claro en el bosque. Scott estaba parado en medio. Le veía la espalda. No sabía porque no se movía. Luego siguió avanzando, y notó el porqué. 

Al frente de Scott, se encontraba el Kanima. Estaba algo lejos, para escuchar exactamente lo que decía. Pero, por la forma en que hablaba y movía los brazos. Se notaba que quería tranquilizarlo. Quizá quería hacer que Jackson recuerde quien en realidad es.

Derek se quedó en un lado mirando. No quiera interrumpir. Parecía funcionar lo que hacía.

De repente, el Kanima alzo un brazo, y con sus garras, aruño el pecho de Scott. El hombre lobo cayó al suelo. Derek corrió para ayudarlo. Cuando el Kanima lo vio, salió corriendo y desapareció.

-          ¡Scott! ¿estás bien? –preguntó llegando a él. Lo recogió del suelo, y lo alzó poniéndolo sobre sus piernas.

-          Duele –se quejó.

-          Lo sé, lo sé. Déjame llevarte donde Deaton.

***

-          La herida tardará en sanar. Pero está bien. No fue tan grave –aclaró Deaton- Ya que fue hecha por un Kanima, demorara en recuperarse. A diferencia, de las otras heridas que sanan más rápido.

-          ¿Qué podemos hacer para ayudar a Jackson? –preguntó Scott.

-          Por el momento, ir a sus casas y protegerse.

-          ¿Y después? –continuó.

-          Mañana, en el día, buscar a Jackson y ayudarlo con cualquier problema que tenga.

***

Scott se encontraba en su cuarto. Sentado al borde de la cama. No cargaba nada puesto, más que las vendas en su torso y su ropa interior. Estaba llorando. Como estaba solo, nadie lo escuchaba. Y eso a él, le parecía bien. De esa forma nadie, podía oírlo llorar. Y así, podía llorar lo más fuerte que pueda.

Él no podía creer que Jackson, se hubiese transformado en ese monstruo. Él no era un monstruo. Y no merecía, perder el control, de esa forma. Deaton les dijo que solo podían arreglarlo y solucionaban algún problema que tuviera. Pero, Scott no sabía que podía ser.

Se acomodó, en su cama. Se acostó de lado. Sus lágrimas no dejaban de bajar. Cada una, caía sobre la almohada.

***

Stiles escuchó un ruido en su ventana. Él estaba tratando de dormir, cuando eso pasó. Tenía un pantalón de pijama puesto, y nada más. Al ver bien. Notó que Derek había entrado por la ventana. El hombre lobo solo cargaba unos jeans negros. Tampoco tenía camisa. Stiles le sonrió. Se sorprendió al ver la cara del mayor. No le sonrió de vuelta. Es más, tenía una expresión de tristeza.

Stiles no sabía que le sucedía a Derek. Solo sabía, que nunca lo había visto así, y no lo quería ver así, otra vez. Si algo sabía Stiles, era que, en ocasiones, no debes preguntar que está mal. Solo apoyar a esa persona, hasta que tenga la certeza de decírtelo. Stiles, sabía que ese era uno de esos casos.

-          Ven –le dijo el menor, estirando la mano, con una sonrisa en su rostro.

Derek avanzó. Tomo la mano de Stiles y puso una rodilla sobre la cama. Stiles lo atrajo con algo de fuerza. Haciendo que Derek se acercara más a Stiles. El menor, lo recostó a su lado. Derek le dio la espalda. Stiles le paso un brazo por el torso, sujetándose de su pecho.

-          Abrázame fuerte –le pidió Derek, con una voz suave. Casi quebradiza.

Stiles lo hizo. Lo abrazó fuerte. Ambos disfrutaron del momento. Sus torsos desnudos, tocándose. Les daba una sensación de calor, y comodidad. Algo que los dos necesitaban.

Derek se quedó pensando. No sabía si decirle a Stiles lo que sentía. Nunca lo había dicho de verdad. Si es que alguna vez lo dijo, no lo sentía en su corazón. Esta vez, si lo sentía. Si era de verdad.

Cuando finalmente se armó de valor para decirlo. Notó que Stiles roncaba. “Justo cuando lo iba a decir, me pasa esto. Sí que tengo mala suerte” pensó Derek. Sin embargo, sabiendo que no lo iba a escuchar. Igual lo dijo en voz alta.

-          Te amo, Stiles.

***

-          ¡Hey! ¿Has visto a Jackson? –ya era la quinta persona a la que le preguntaba, Scott, si había visto a su novio.

-          No, lo siento –y esa fue la quinta, que le dijo lo mismo.

Posteriormente, lo vio. Ambos se encontraban en las duchas donde se cambiaba todo el equipo de Lacrosse.

-          Hey Jackson –dijo con voz suave- tenemos que hablar.

-          Sí, yo también tengo que decirte algo.

Se apartaron del grupo de personas.

-          Jackson, no sé si recuerdas lo que…

-          Tenemos que terminar –lo interrumpió.

-          ¡¿Qué?! ¿Por qué? No, no tenemos.

-          Si tenemos, lo siento –Jackson se fue. Scott tenía lágrimas en los ojos.

No sabía por qué le había terminado. Que había hecho mal. Él en serio lo amaba, no quería que eso quede así. Volteó a verlo y Jackson estaba hablando, y riendo con unos cuantos chicos del equipo. Scott simplemente salió de ahí. No lo soportó. Las lágrimas eran imparables.

Se escondió en el armario de limpieza. Se acomodó en una esquina. Y el mar de lágrimas que contenía, finalmente se desató. 

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Aqui el otro capitulo :)

¿Por qué creen que Jackson le terminó a Scott? Diganme que opinan.

Comenten y voten para continuarlo :D

Gracias por leer, cosas hermosas.