cap 35

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Miro fijamente a Elaine y su mirada se ve decidida

Pero no puedo aceptar su oferta, quiero que la primera vez que estemos juntos sea por qué ella quiera y no por una sensación de deuda

- Elaine - mi mano se posa en su hombro y ella me mira extrañada - no puedo aceptar eso

Su mirada sorprendida y herida no se me hace rara

- quiero que la primera vez que estemos juntos, sea por que de verdad me deseas y amas, no por que sientes que estas en deuda conmigo

Elaine se levanta un poco y se sienta en la esquina de la bañera

- pero. . . Yo quiero - su mirada es pura mentira

- Elaine, no me debes nada, hago todo esto por gusto

- pero mi madre y hermanas - su mirada baja

- Elaine. No les tocaría jamás un pelo a las personas que amas, eres mi mate, lo menos que quiero para ti es sufrimiento y dolor

Su rostro Palidece y el shock se hace presente en su rostro

- ¿ tu mate? - confundida pregunta

- si angel, eres mi mate - intento acercarme un poco lentamente

- pero. Mi olor, no puedes. Las hierbas no permiten que sientas mi olor - su mirada llena de confuncion me mira fijamente

Llegó a su lado y tomó su mano suavemente para que sepa que todo lo que digo es verdad

- ¿ has visto el color de tus ojos en alguien más aparte de ti y de mi? - rápidamente niega - mi pareja destinada eres tú estaba escrito y yo lo siento justo aquí

Llevo su mano y la mia en el espacio de mi corazón que esta latiendo fuertemente

- ¿ enserio tu eres mi compañero? - asiento con una sonrisa

Elaine me abraza y me da un beso en la mejilla

- muchísimas gracias por salvarme . Tengo una petición - la escucho atentamente

- pídeme lo que quieras

- quiero ver a mi padre y a los aldeanos, quiero ver cuál es su defensa ante toda la crueldad que me hicieron pasar y quiero que mi padre pague todos sus crímenes - la mirada de Elaine es decidida

- te prometo que te llevaré y tu decididas el castigo de cada uno - me levanto de la bañera y tomó dos toallas de un estante

Le pasó una a Elaine y con la otra claro mis caderas

Salgo de la habitación y veo que Elaine no me sigue

Sigue sentada donde estaba antes, en una orilla de la bañera

- vamos, tenemos que cambiarnos para poder ver a los condenados

Elaine con una sonrisa me sigue y ve el vestido que trajo la servidumbre en algún momento

El vestido es color rojo vino con pequeños detalles en dorado y lo demás en blanco

Un vestido que casi exclusivamente la realeza utiliza , es práctico y cómodo ya que el armador no es necesario

Elaine entra al armario y se coloca el vestido, en color vino complementa el color de sus ojos

Ya vestidos los dos salidos rumbo a los calabozos

Entramos en el pequeño pasillo oscuro y decendemos las estrechas escaleras

Elaine se detiene abruptamente  y una sonrisa de maldad inunda su cara

- jamás pensé verte de esta manera. Eliot Sorni

la mate de los alphasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora