Vinculo Inquebrantable

- Capitulo 2 -

Esto es insoportable...Un movimiento fuerte en el corcel me hizo soltar un quejido. A diferencia de los otros últimos días. Ahora solo disponía de dos asistentes para mi preparación. Desvié mi vista a mi cama en la cual reposaba mi vestido delicadamente planchado sobre edredón. Lila...al menos hoy podía usar un color que si me agradaba.

-Ya estas lista-Dijo mi madre dejando la taza de té que estaba tomando sobre la mesita de la pequeña sala de mi habitación. Y levantándose de su lugar dijo-Creo , y esta mas de mencionar-Dijo colocando un mechón de cabello tras mi oreja-Que debes de actuar lo mas agradable posible con nuestro invitado-Dijo fingiendo una sonrisa-Sabes que necesitamos que todo salga espléndidamente bien-Finalizó.

-Si madre-Dije tomando asiento y esperando que las asistentes trajeran el vestido para ponérmelo.

-Bien-Agrego, para luego salir de la habitación.

La fricción de la suave tela del sillón al tacto de mi mano me tranquilizaba de toda la tensión que transcurría en la casa. Los pasos apresurados de mi madre me ponían en sobremanera nerviosa. Hace dos horas esperábamos la llegada de mi futuro prometido pero este aun no hacia acto de presencia ni había enviado un mensaje por si algún inconveniente hubiera impedido su visita.

-Esto es un caos- Dijo mi madre empezando a exasperarse y cambiando su taza de té por su tan conocida copa de vino, claro obviamente de la mejor cosecha que reposaba en la bodega de nuestra casa.- Es un desaire completo!- Continuo caminando de la estancia al salón principal, el cual poseía un ventanal de tamaño considerable, el cual permitía tener una vista completa a la entrada principal de la casa- ¡Es que acaso el compromiso lo dio por finalizado ¡-Grito con si vista fija a la ventana. Su rostro lucia levemente rojo ya sea por el enfado o por el hecho que ya llevaba cuatro copas seguidas.

-Madre- Hable finalmente-Nunca pasaría algo si, después de todo los planes del compromiso llevan dos años de anticipación-Tome un suspiro y continúe -No creo que a estas alturas planeen finalizarlo-Agregué al final para posicionarme a su lado con la vista fija en ella.

-Eso no, nos asegura nada-Dijo mirándome fijamente para luego dejar su copa vacía y pedir otra con una seña al mayordomo-Estas personas –Dijo titubeando-Son diferentes-Continuo-Si ellos quieren terminar algo, lo hacen sin pedir la opinión de nadie-Dijo mirando un punto invisible de la estancia, como recordando algo.

-Pero madre-Continúe-Creo que ... -mis palabras fueron interrumpidas por un ligero golpe en la entrada principal, llevándonos a ambas a mirar en esa dirección.

La ama de llaves ya se acercaba a la entrada para ver de quien se trataba, mientras madre hacia devolver la copa de vino a la cocina y se retocaba el maquillaje-Luisa, abre la puerta no hagas esperar a nuestros invitados, por favor - Hablo cortésmente, supongo suponiendo que los recién llegados pudieran escucharla.

-Por su puesto mi señora-Hablo la mencionada, apresurando su paso a la entrada principal.

Me coloque de nuevo al lado de mi madre esperándolos. Se escuchó un intercambio de palabras y luego la figura de Luisa se hizo presente de nuevo en la estancia. Su rosto lucia diferente.

-Mi señora-Hablo firme. - Un mensajero de los Banner solicita se le sea recibido-Dijo, y se quedó callada con la cabeza inclinada esperando una respuesta.

-Un mensajero-Hablo mi madre sorprendida-Que tendría yo que hablar con un mensajero-Respondió alteradamente y dándole la espalda a la figura de una persona que se asomaba por la entrada.

-Me parece que tiene un entrega para usted, mi señora- Continuo- de parte de los Banner-Hablo de nuevo Luisa haciendo hincapié en el apellido.

Mi madre volteo velozmente y haciendo un ademan con la mano hizo pasar al mensajero. Sin lugar a dudas era un muchacho de temprana edad, su tez era blanca y poseía unos ojos celestes muy llamativos. Pero en los cuales se podía ver claramente reflejado su temor de estar ahí y sobre todo tener a una figura tan imponente como mi madre delante de él.