La Mierda Que Provocaste

Capítulo 13

Capítulo 13 anónimo...

Hoy después de muchos años puedo decir que voy a volver a ver a mi familia tantos años aquí encerrado en esta posilga llamada prisión todo por un crimen que no cometí y me declararon culpable, tengo 8 años de no ver a mi madre, mis hermanos, mis sobrinos, y sobre todo de no saber lo que es la libertad, pero aquí estoy afuera del dormitorio con todas mis pertenencias esperando a que me lleven al centro para firmar mi acta de salida para que venga mi cuñado a recogerme

Luego de firmar me encuentro con mi cuñado y nos vamos para mi casa

-Que alegría verte aquí-
-Lo mismo digo mamá, mamá puedo hacerte una pregunta-
-Dime-
-¿Que sabes de ellas?- noto que todos los presentes se ponen nerviosos y eso me preocupa

-No hemos sabido nada de ellas desde hace 5 años, ella se alejó de nosotros...-

-Y supongo que mi "familia" no hizo nada para buscarlas en estos años o me equivoco mamá?- veo que ella me baja la cabeza y eso me lo confirma

-Denme un teléfono necesito llamarla- mi cuñado me entrega su teléfono y marcó el número de ella al tercer tono contesta

-A que debo el milagro de esta llamada?-
-Te dije que pronto ibas a saber de mí y mucho más ahora que estoy libre- la línea queda en silencio
-Co como que estás libre?- está nerviosa
-Si estoy en casa de mamá ya le dijiste a ella?
-Dame tiempo por favor ella no recuerda nada sobre lo sucedido- me dice llorando

-Te di mucho tiempo te di prácticamente 8 años no me pidas más tiempo por que no va a pasar- le hablo en un tono algo concho

-Te lo pido no hagas esto deja que ella se enteré por mí te lo suplico-

De pronto escucho otra voz y mi corazón empieza a latir al saber quién es

-Mamá con quién hablas? Y por que estás pálida parece que hubieras visto un fantasma-

-Con nadie corazón ya casi bajo- le dice y no vuelvo a escuchar nada más y veo que ella colgó la llamada

Veo la hora y decido llamar al esposo de Maritza ya que es muy buen amigo mío y debe de saber en dónde están ellas

Luego de una larga charla consigo la dirección de la casa y en dónde se encuentran en este momento

Voy camino en donde está la persona que más me importa en estos momentos, de pronto sin querer me tropiezo con una chica

-Perdone es que venía distraída- veo que ella se levanta del suelo y me vuelve a ver al verme se sorprende pero luego cambia a una cara de confusión y luego se va casi corriendo, puedo ver qué se le callo una pulsera y decido guardarla

Sigo con mi búsqueda y puedo ver qué la misma chica con la que tropecé está con su mamá, al ver quién es la madre decido acercarme a darle a la chica su pulsera

Su madre al verme se pone pálida como si hubiera visto un fantasma, y la verdad no es para menos, decido llamar a la chica

-Oye se te cayó esto cuando chocamos- le digo con una sonrisa
-Oh muchas gracias- me dice algo nerviosa

Luego de eso veo que la chica entra al colegio y su madre vuelve a ver disimuladamente para asegurarse que no la estén viendo y se acerca a donde estoy yo casi corriendo

-Se puede saber qué haces aquí?!- me dice
-Pues creo que es un poco obvio no-

-Como estuvo eso de que chocaste con ella?!-vaya está histérica

-Yo la andaba buscando pero parece que Dios me la puso en el camino y a ti también-le digo con una sonrisa

-Vamonos de aquí hay muchas cosas que tenemos que hablar-