Esta es mi historia

Capítulo 4- El Viaje

Al llamar a Silvia y decirle que se venía con nosotras durante un tiempo. Le dijeron que se viniera a dormir y así directamente se iban al aeropuerto.Empezaron a estar nerviosas porque ya era mañana que se iban y tenían que acabar la maleta. Necesitaban lo imprescindible y poca cosa más porque ahí tenían que comprar algunas cosas necesarias. Cuando ya era hora de dormir estaban demasiadas nerviosas como para poderse dormir pero al final después de esperar y esperar se consiguen dormir.
Hoy es el día en que el viaje comienza, las aventuras comenzarán, habrá romances, amigos y por supuesto amig@s...
Y claramente casa nueva y colegio nuevo.
Ya se dirigen al aeropuerto recogen las maletas y llaman a un taxi para que les lleve. Se despiden de su padre y se van por la puerta. Cuando salen se encuentran con el taxi, el taxista baja y les coge las maletas se las lleva hasta el maletero y se las coloca con suavidad, y después se siente en el sitio del piloto y se dirige al aeropuerto.
En el camino hacia el aeropuerto Emma y Silvia hablan sobre lo que se van a comprar....
Cuando llegan al aeropuerto el taxista baja del taxi y recoge las maletas mientras que ellas salen.
Cuando entran oyen por megafonía: Por favor los pasajeros con destino a Miami vayan a facturar las maletas, gracias.
Se dirigen a la puerta de embarque; No había mucha gente que se iba de viaje.
Les piden el DNI, el Ticket... Y entran por la terminal.
Cuando ya están dentro del avión empiezan a decir que van a hacer cuando lleguen a su casa. Su madre les enseñó una foto de la casa y les encantó porque la casa tiene 2 pisos, está justo al lado de la playa y es enorme. Ya están aterrizando y están más nerviosas que nunca. Ya están bajando del avión y cogiendo las maletas. En el aeropuerto alquilaron un coche para dirigirse a la casa.
Cuando llegan les encanta la casa, es mucho más bonita que la de Nueva York, y más grande. Abren la puerta y se encuentran un salón enorme con una televisión grande. Solo quieren subir a el piso de arriba para ver las habitaciones. Van corriendo, suben las escaleras y abren la puerta.
-Wooooww!! - Grita Silvia.
-Aahhhh!!- Grito.
Es enorme y super bonita, como si fuera una de diseño. Un armario solamente y únicamente para la ropa y un pequeño para los zapatos. No se lo pueden creer. Mientras que las dos chicas alucinan con la habitación, la madre deja su maleta en su habitación, y empieza a sacar ropa. Cuando ya ha acabado sube va hacia la habitación de Emma y Silvia.
-Hola chicas. -Nos dice mientras entra en la habitación
-Hola mamá, ¿Podemos empezar con las maletas? -Le digo.
- Claro que sí, mientras que vosotras estabais hablando yo ya he acabado con mi maleta.
- Vale, pues entonces vamos a empezar. -Dice Silvia con una sonrisa de oreja a oreja.
- ¿Tenéis hambre? ¿Os preparo la comida?
-Sí, porfavor. -Decimos las dos.

Cuando ya hemos acabado con las maletas, nos llaman para comer. Cuando terminamos queremos ir a ver la playa y la piscina. Salimos y hay un sol enorme. Corren hasta la habitación, se cambian y se ponen un bikini.Cuando ya están listas, abrimos la puert ay corremos hasta legar al agua de la playa. Estamos bastante tiempo pero mientras que nosotras nos bañabamos a mi madre se le ocurre la idea de que podíamos ir de compras, ya que sólo habíamos traído lo imprescindible. Nos llama y nos cambiamos.

-Ya estamos listas mamá. - Digo mientras me coloco la falda.

-Perfecto, entonces vamonos.

Llegamos al centro comercial, era el más grande que habían visto y cómo no, entran sorprendidas. Hay un montón de tiendas y muchas cosas que comprar. Están ahí horas hasta que ya no pueden más, tienen mucha hambre como para seguir mirando ropa. Nos dirigimos a casa después de una larga tarde en el centro comercial.Cuando llegamos estamos las tres muy cansadas y directamente nos vamos a dormir.

-Buenas noches, mamá te quiero. -Le digo, mientras subo las escaleras hasta el segundo piso.

-Buenas noches, no habléis mucho que estáis muy cansadas.

-De acuerdo, buenas noches - Dice Silvia.

Llegamos a la habitación nos cambiamos nos ponemos el pijama y nos tumbamos cada una en un adiferente cama.

-Buenas noches Silvia.- Le digo

-Buenas noches Emma- Me dice.

Y nos dormimos, mientras tanto mi madre enciende la tele del salón, se prepara una infusión y se tumba en el sofá.