Gemelos |Langa x Reki x Lian

Three

Langa no estaba enojado, desde un principio supo de toda la situación. Pero nunca supo que la causa por la cuál su hermano se hundiera en el alcohol fuera por el.

Tenía que hablar con Lian.

Unas semanas más tarde.

Reki viajo a su hogar a visitar a sus padres y familiares. Fue un lindo viaje en dónde pudo aclarar un poco su mente. Cuando llegó al departamento se le hizo extraño no ver a los gemelos, la mayoría del tiempo se quedaban ahí cuando Reki salía.

—¿Habrán salido algún bar?

Se pregunto mientras dejaba las maletas en su habitación y acomodaba su ropa en cu correspondiente lugar.

Reki saldría en unos minutos con Miya, necesitaba algún consejo. No podía simplemente jugar con los sentimientos de los dos y menos cuando ellos tienen una gran hermandad de por medio.

Sin más salió del departamento.

—Asi que eso paso... No pensé que tuvieras algo tan intenso con ellos.— Exclamó asombrado Miya.

—Lo se, tengo un gran conflicto en mi cabeza de quién realmente me gusta. Lo que me hacen sentir los dos es tan...— Exclamó Reki agotado.

—Bueno, si es un gran conflicto. ¿Por qué no solo te quedas con los dos? — Menciono con una sonrisa.

—¿Estás loco? No creo que ellos lo vean así. Que estrés.— Exclamó ocultando su rostro entre sus brazos.

Miya solo le dió golpecitos en su espalda en forma de apoyo.

—Por cierto, ¿Siguen molestos entre ellos?— Le pregunto tomando su bebida entre su mano y tomando un sorbo.

—¿Enojados? ¿De que hablar?— Pregunto confundido a este.

—¿No sabes? Hace dos días ellos tuvieron una gran discusión en los pasillos de la universidad, los tuvieron que separar sus amigos.

Reki lo miro perplejo, no podría creer lo que escucho. Lian y Langa nunca llegaron a discutir con golpes.

—¿Cómo pasó eso? Maldita sea.— Exclamó tomando su mochila y parándose de su asiento.

—¡Suerte!

Miya le mando toda la suerte que iba a necesitar para hablar con esos dos.

[•••]

Reki se sorprendió de enterarse que esos dos habían peleado, desde que eran niño nunca lo hicieron. Su mente le decía que pudo haber sido por el, pero el pensaba que habían otra razón más importante.

—¿Langa? — Tocó varias veces la puerta de la habitación de este sin recibir alguna respuesta.

Abrió lentamente la puerta encontrando una habitación desordenada y sin luz. Entro y prendió la luz.

Langa estaba en la cama dormido, parecía que no durmió en días por su rostro demacrado. Su rostro estaba completamente relajado, era muy lindo.

Reki solo se dispuso a limpiar y ordenar la habitación, pudo darse cuenta de algunas latas de alcohol tirados en el piso. De no ser por el corte de cabello de Langa diría que era Lian el que estaba en la cama.

—¿Reki?— Exclamó Langa mientras se tapaba los ojos, la luz le irritó al abrir sus ojos.

—Tenias un desorden. ¿Te sientes mejor?— Le pregunto tocando su frente con su manos suavemente.

Langa solo paso su brazo por su cintura atrauendolo hacia el. Recargo su frente en el abdomen del pelirojo suavemente.

—Estas aquí...— Murmuró levemente.