Capítulo 8 - Juntos

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Capitulo 8 - Juntos

Lovino se sentó sobre una de las amplias mesas dispuestas en la sala de practica esperando a Antonio le había tenido que abandonar desde primera hora en la mañana para hacer una operación de riesgo y las practicas sin él no eran para nada lo mismo.

La puerta se abrió con un chirrido y dejó a la vista a Antonio que entraba despidiéndose con la mano de alguien del exterior. Y luego cerro la puerta centrándose en el italiano que lo miraba desde la mesa.

-Siento haber tardado- susurro Antonio sonriendo y acercándose a Lovino.

-Cállate inútil - sonrío Lovino con picardía enredando sus brazos en el cuello del español acercándolo a sí.

-No diré ni una sola palabra más-.

Lovino observó al mayor y peino el pelo castaño del español, pasando sus dedos entre sus sedosos cabellos.

-No digas eso maldito estúpido- le soltó Lovino con algo de tacto en su voz que se había suavizado -no quiero que te calles...Quiero que me despiertes todos los días con tu hermosa voz-.

Antonio lleno sus pulmones de aire disponiéndose para hablar pero Lovino le cortó sonriendo.

-No te tomes a pecho lo de "no te calles" , porque si te pones a decir mierda cursi te golpeare, te golpeare sin piedad- Lovino miro al español directamente a sus brillantes y hermosos orbes.

Antonio beso la comisura de la boca del menor dulcemente riéndose suavemente para seguidamente abrazarle con fuerza queriendo no soltarle nunca.

-Te quiero- susurro Antonio depositando un suave beso en el cuello de Lovino presionando sus labios contra este.

Lovino no pudo evitar que una sonrisa se dibujará es su cara mientras echaba su cabeza hacia atrás y pudo sonreír sacando la felicidad que sentía ya que el español no le estaba mirando y no tendría gritarle que no estaba sonriendo.

Antonio beso la barbilla de Lovino, recorriendo con sus labios cada parte de esta y abrazo fuertemente su cintura acercándose al pequeño italiano.

-Tengo un proceso bioquímico en el hipotálamo debido a la segregación de dopamina- .

Lovino se río suavemente haciendo que su risa flotara en el aire suavemente cual mariposa batiendo sus alas.

-Te amo-.

En ese momento el inocente español no sabia si derretirse por la dulce risa de Lovino o besarle apasionadamente hasta que sus alvéolos pulmonares pidieran atención.

-Yo también- Antonio lo abrazo con tanta fuerza que lo termino tirando sobre la mesa y beso toda su cara -Te amo, más que a nada en el mundo-.

Lovino se mordió el labio inferior mirando al español y recorriendo con su mirada el cuerpo del moreno.
Antonio paseaba gracilmente sus manos por el cuerpo de Lovino atrayendolo hacia su cuerpo.

-¿Cómo harías una operación de apéndice?-pregunto Lovino mirado a Antonio completamente absorbido por sus brillantes orbes.

Antonio levanto ligeramente la camisa de Lovino. Con una sonrisa que se había suavizado.

-limpias el area mientras el paciente está dormido por la anestesia- Antonio acarició con suavidad la zona donde estaba el apéndice de Lovino -se hace una pequeña incisión en la parte derecha inferior del adomen y por aquí llegamos al apendice y....-.

Lovino temblaba mientras sentía los dedos de Antonio recorrer su sensible y palida piel haciendo que su piel se erizara sintiendo como besaba su vientre mientras seguía hablando.

-¿Lo has entendido?- pregunto Antonio mirando como el otro asentía.

-Me podrías explicar una de corazón- pregunto sabiendo que Antonio se libraría de su camisa para hacerlo y que besaría su pecho suavemente arrancando suaves gélidos de la garganta del italiano que ansiaba su boca sobre la suya enredando sus lenguas con una estrategia que solo ellos conocían y que los volvía locos.

Lovino enredo sus hábiles dedos en el pelo de Antonio y sus pies en su cintura.

-Antonio...-murmuró pidiendo más cercanía y golpeando con sus caderas las del otro.

-Lovino...-suspiro Antonio al sentir a Lovino golpear sus caderas contra las suyas.

-¿Realmente me vas a amar para siempre?- pregunto Lovino suspirando pesadamente .

-Siempre- sonrio Antonio dulcemente apartando el pelo que caía sobre la cara de Lovino tapandola para poder ver sus hermosas facciones.

Lovino sonrío fundiendolos en un beso...

Gilbert abrazo a Matt por detrás haciendo que el otro se tensar y se diese la vuelta para abrazarlo apropiadamente.

-¿Estas bien mi amor?- pregunto Gilbert besando delicadamente su mejilla.

-Wow Gil -sonrío al sentir los labios fríos del albino que le pedían que le besara y eso es lo que hizo, le dio igual estar en medio del desolado pasillo del hospital, necesitaba sus labios....


You don't know me (SpaMano)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora