Atrapada en él

Torpe

Brais:

Todo pasó en cuestión de segundos . Vi su vestido azul cielo empapado de mi bebida .

-Eres ciego o que ? - me gritaba Eloa desenfrenadamente
-Ups , lo siento enserio lo siento , pero ya deja de gritar por dios es solo un vestido -
-Sí ! ya se que es solo un vestido, pero este nunca lo había usado . Lo quise estrenar hoy y me lo acabas de arruinar -
-Quizás podamos lavarlo cálmate ,seguro queda sin ninguna mancha - intenté calmarla
-Pues más te vale -
-Dónde está la lavadora de esta casa?!-

Comenzó a caminar apurada y la seguí , se notaba que ella si que conocía la casa .Llegamos al cuarto de lavado nos quedamos frente a frente con la lavadora delante .

-Qué esperas ? Quítate el vestido , que yo sepa no se va a lavar solo -
-Estoy esperando a que te voltees , no pienso desnudarme delante de ti -
-Ouu ouuu tampoco te emociones mucho ,no pretendía verte en bragas-
-Y con que se supone que me quede después? no tengo nada para cubrirme -
-Bueno pero eso no es un problema -

Me desabonoté los únicos tres botones de la camisa  que llevaba abrochados , cuando me fijé en ella…

-Heyyy!!- chasqueé los dedos -mis ojos están acá . Arriba - dije señalando mi rostro .

Eloa:

<<OHH        POR        DIOS , estaba enserio viendo esto ? ,  no estaba preparada psicológicamente para verlo sin camisa>>

Y no que  fuera el hombre más fuerte que había visto en mi vida , no . No era eso ,
simplemente era delgado pero se notaban las horas en el gym .

<<Debía reaccionar ya , de seguro me vía con cara de idiota>> .

Tomé su camisa y me giré al igual que él .  Intenté cambiarme lo más rápido que pude.

-Gracias por prestármela -le dije mientras miraba que me cubría hasta casi llegar a las rodillas , cosa que era de esperarse porque si a él se le veía un poco larga ya era consciente de cómo me quedaría a mí.

Puse mi vestido a lavar y mientras esperábamos quedamos en un silencio un poco incómodo hasta que decidí hablar.

-Y tienes pensado quedarte a vivir aquí definitivamente?-<< okay ahora parecía una cotilla >>
-La verdad es que no lo sé , yo y mi familia vinimos a causa de mi universidad entre otras cosas ,pero me gustaría volver a New York -
-Nunca he estado allá , debe de ser bien bonito -
-Por lo menos es más bonito que Houston-le vi la sonrisa maldita en el rostro
-Ja Ja Ja , pues a mi me gusta Houston y la verdad que no me imagino viviendo en otro lugar -

Volvimos a quedar callados hasta esperar que la lavadora emitiera el sonido con el que todos sabíamos que ya había terminado . Unos segundos después saqué el vestido .

-Ves vesss ! que no se le ha quitadooo , mira la horrible mancha que se le quedó ! - gritè como una loca mirando mi vestido arruinado
-Te juro que pensé que se le quitaría,pero puedes clamarte por favor ?-
-No , no puedo señor torpe -
-Es usted una histerérica señorita , , ,  -
-Eloa Venoff para ti -
-Venoff??  y de donde es tu familia, de Harry Potter??escucha , puedes quedarte con mi camisa y otro día me la devuelves no pasa nada - me dijo en un horrible tono burlón
-Gracias , pero ni se donde vives como pretendes que te la devuelva ? Ah y por cierto mi apellido es inglés  cerebrito-
-Yo pasaré a tu casa a recogerla , esta bien así ? -
-Sí ,está bien -
-Guarda mi número y así me dices cuando puedo pasar -

Lo miré un poco confundida pero saqué mi móvil de la pequeña cartera y apunté su número .
-Ya está -
-Y tranquila sé que te debo un vestido nuevo  -me dijo mientras se ponía en marcha a salir del cuarto de lavado

Tomé mis cosas y salí de ahí . Brais había salido sin camisa y tan siquiera le había molestado eso , no se quejó en lo absoluto . Acerqué el cuello de su camisa a mi nariz , tenía su olor clavado así que no me pude contener,  porque parecerá una locura, pero era un olor excitante. Ya era tardísimo así que fui a buscar a David para saber si ya se iba a casa, o sino me tendría q ir caminando y la verdad que no quería eso, era demasiado oscuro y daba miedo ir sola hasta casa .

-Haz estado preciosa esta noche Alexa espero que la hayas disfrutado -le dije al oído mientras la abrazaba para despedirme
-Te  marchas porque eres una testaruda , sabes que te puedes quedar aquí y volver a tu casa mañana - me aseguró ella
-ya nos vas a contar porque rayos llevas puesta tú la camisa  de Brais ? -

<< Katherine me acaba de hacer sentir diminuta entre todos >>

-Es que se le olvidó avisarnos de que era un poco torpe , y de la nada me tiró su bebida  encima de mi vestido recién estrenadoo -Remarqué lo más que pude eso último - y pues no me quedó de otra que usar su camisa

Miré a Brais pero él no tenía ningún tipo de expresión en el rostro , estaba mirando a la nada , dudo que estuviera prestando atención a lo que dije .

-Hablamos mañana , te quiero - me dijo Katherine antes de que cruzara la puerta.

Me volteé y vi como le daba un dulce beso en la comisura de los labios a Alexa y se le quedaba detrás abrazándola por la cintura mientras nos miraba subirnos al coche. Era hermoso lo mucho que se querían.

Me subí al asiento trasero y espere pacientemente a que los chicos hicicieran lo mismo. Fue cuestión de segundo que  Brais tomara su lugar a mi lado. A medio trayecto su brazo empezó a rozar el mío de vez en cuando. No sabía si lo hacía accidentalmente o no, pero me estaba matando, el calor q irradiaba su cuerpo sin camisa era  enorme y él ni se inmutaba.

<<¿ Era de hierro o qué?>>

Nada, es como si no estuviera pasando nada. Y yo aquí temblando por el simple hecho de que su brazo me estaba rozando. <<Tenía que verme urgente eso, no era normal>>.

-Ya hemos llegado a tu casa enana- me dijo David mirando por el retrovisor.

Brais se levantó de mi lado, me abrió la puerta y me ayudó a bajar.

- Saluda a tu madre de mi parte y dile que pronto voy a que me dé de esa rica lasaña que comimos ayer- gritó  David desde dentro.
-Si Cari no te preocupes, te quiero - me voltee hacía Brais - cuando lave la camisa te la devuelvo, ahhh y recuerda que me debes un vestido-
- No hay problema -

Me despedí de ellos y mire por un pequeño rato como se iban. Cogí las llaves del bolso y abrí silenciosamente la puerta, ya era un poco tarde y no quería despertar a mamá,  de seguro había tenido un día bastante largo en el trabajo. Subí las escaleras hacía mi habitación y me tiré en la cama por un rato.
Realmente no quería lavar su camisa, era un completo crimen hacer eso; pero que podía hacer.
Cogí mi pijama de la gaveta y me cambié de ropa. Mañana sería otro día.