Fred, Draco y Cedric -2-

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—Eh... ¿____? —Fred me miró extrañado, y yo le hice una señal para que hiciera silencio.
—Shhhh... —Apagué la luz de mi varita y me metí en su cama para acurrucarme con él.— Es que tenía frío... —Él rió levemente y me abrazó. Yo correspondí y me dispuse a dormir en brazos de mi Weasley favorito.

***

Ya en Hogwarts, llegué a mi mesa y extrañada de no ver a Cedric le busqué por todas partes, hasta que di con él en la mesa de las aves, más concretamente, a dos milímetros de los labios de Cho Chang. Mi cuerpo se llenó de rabia; ¿¿de todas las brujas existentes tenía que estar con Chsng?? Cuando empezaron a caer truenos del techo del comedor me percaté del numerito que estaba montando y me calmé, intentando respirar hondo. Le lancé una mala mirada a todos los que se me quedaban mirando, y en silencio acabé mi comida.

Al salir del comedor la cabellera platinada se acercó a mí, y en un intento de despistarle giré por un pasillo pero me quedé atrapada por el mismo que me perseguía. —¿Podemos hablar? —Negué rotundamente.— Venga, ____... —Sin dejarme marchar siguió insistiendo.— ¿Acaso vas a ignorar todo lo nuestro?
—¿Nuestro dices? Lo único que hacía era buscarte si estaba muy estresada. No sé tus gustos, tus odios, no sé nada de ti... y tú menos de mí... —¿____? —La voz de Fred nos interrumpió y Malfoy al final me soltó.—¿Te está molestando este idiota?
—En verdad sí, Fred. —Cogí su mano y tiré un poco de ella.— Mejor vámonos.
Entonces antes de irnos, Draco se empezó a reír.
—¿Así que es este, un Weasley, por el que me has remplazado? —Fred le miró extrañado.
—¿De qué habla ____? —Yo me puse nerviosa e intenté ignorar la pregunta y marcharnos, pero ahora Fred no quería.
—¿Se lo dices tú? ¿O lo hago yo? —Draco sonrió maliciosamente, y yo solo permanecí callada mientras Fred me miraba en busca de respuestas.
—____... Por favor...
—¿Qué pasa ____? Antes estabas muy orgullosa de venir a mi habitación en la búsqueda de consuelo sobre mis brazos, ¿ahora no te atreves a decírselo a Weasley?
Me sentí totalmente arrepentida de todo lo que había hecho con Draco, solo deseaba volver atrás y no cagarlo con Fred... Pero ya era tarde.
—Fred, yo... —Al mirar su cara de espanto y asco dio media vuelta y se fue, pero yo le paré en su camino.— Fred...
—¡No me toques! —Me miró, dolido. — Has estado acostándote con Draco Malfoy, sabiendo cómo nos trata y lo mala persona que es... ¿¡Y aún así tuviste la decencia de ligar conmigo y enamorarme!?
No sabía qué responder...
Fred se marchó, dejándome paralizada en mitad del pasillo, y encima, Cedric había escuchado a Fred, y dejándome una mirada de odio, se fue. Y ahí quede, mientras todos me miraban, sola.

***

¿Cómo se puede romper un mundo en medio minuto?
—____, tienes que bajar ya, por favor... Has perdido mucho peso... Estamos todas muy preocupadas por ti... —Mis amigas intentaron animarme, y a veces lo conseguían, pero generalmente me encontraba desganada y triste.
—Bajaré, porque me apetece tarta de queso... —Mis tripas rugieron y ellas me sonrieron y ayudaron a arreglarme un poco.
Algo contenta, bajé al comedor con ellas, pero al entrar por esas grandes puertas... toda mi pequeña se esfumó al ver las miradas punzantes de casi todas las casas salvo la de un platinado, que por primera vez en su vida se sentía culpable de algo.
Me senté en una esquina, con mi mejor amiga, e intenté no ponerme muy mal mientras comíamos. Escuché que Cedric estaba algo tenso porque no sabía qué comprarle Cho, y también escuché algunos comentarios horribles sobre mi qué quise ignorar.
—Tranquila, ¿vale? Tú come ____. —Tayla me sonrió y yo asentí.
Al salir del gran comedor para ir a clase Draco se acercó a mí. —Hey ____... ¿Podemos hablar? —Suspiré.
—¿Qué quieres, Draco? —Seguí caminando mientras este intentaba mantener mi ritmo.
—Yo... Siento haber sido un idiota, sé que el otro día me porté como un imbécil y... por favor dime si puedo hacer algo para compensarte. —Nos paramos y me miró como nunca lo había hecho, no con lujuria, sino con pena. — Siento haber fastidiado todo lo nuestro... —Cansada le miré unos momentos y sonreí levemente.
—Te perdono. Estoy cansada de estar peleada con la gente, así que simplemente no vuelvas a comportarte como un idiota ¿vale? —Le revolví un poco el pelo.
Entonces pasó Cho al lado nuestro con su grupo. —¿Habéis visto esos nuevos pendientes? Son tan bonitos...
Me quedé mirándola con la mirada mientras se iba, luego volví a mirar a Draco.— Y si necesitas algo... —Lo pensé, y se me iluminó la cabeza. — Necesito dinero, ¿a ti te sobra no? —Asintió. —Vale...
Me despedí de él y fui a mi habitación, planeando cómo arreglar las cosas mentalemnte.

***

Volví sonriente de Hosmeage, y guardé la bolsita debajo de la cama. Me senté en la mesa y me puse a escribir a George.

Querido George,
Como no puedo acercarme a vosotros sin que Fred me mate con la mirada, que lo entiendo, quiero pedirte ayuda para poder arreglar esto, ¿me ayudarás? Por favor George, por favor 🥺.
Un enorme abrazo <3
____

Con un hechizo transformé el papel en un pajarito que salió volando hacia la habitación de los Weasley.
Tras pasar una tarde leyendo, recibí una carta de George en forma de fénix.

Te ayudaré, más te vale que funcione, ____...

Sonreí y comencé a escribir una lista con todo lo que necesitaba.

***

Hoy era el día, todo estaba planeado y Umbridge cada vez estaba más pesada con sus nuevas reglas e intentos de hacernos la vida imposible, pero hoy... Jeje...

Sonreí preparando lo que necesitaba para mi broma y bajé hacia la sala con la escoba en la mano.
Cuando llegó la hora, me subí a ella y probé los fuegos mágicos, cuando vi que todo iba bien abrí la puerta con un hechizo y entré en la sala en la cual se estaban llevando a cabo los TIMOS, y empecé a tirar varios fuegos por toda la clase, asegurándome de que cayeran sobre Umbridge, y uno especial para Freddy. Tras montar un pequeño espectáculo, salí de la clase mientras los alumnos me seguían, y fui a los jardines, donde solté en el cielo un gran fuego que ponía: Para ti, mi Weasley.
Entonces me giré y desde lo alto miré a Freddy, que intentaba ocultar su sonrisa.
Contenta, fui a descender sin ser descubierta y para mi suerte allí estaba Cedric, en el puente que conectaba Hogwarts. Cuando me vio puso una expresión de enfado e intentó irse, pero yo se lo impedí.
—Cedric porfa, quiero arreglar las cosas...
—No puedes arreglar lo que ya esta hecho, ____... —Me acerqué y dejé la escoba en el suelo.
—Puede... pero... de verdad quiero que nos llevemos bien Ced. —Le extendí el regalo.
—¿Esto es para mí? —Negué.
—Es para Cho. Escuché que no sabias qué regalarle, así que te compré esto. Se que la gustará, le oí decir que le gustaban estos pendientes.
Él me miró sorprendido y yo le sonreí un poco. —No me mires así anda.
—¿Cuánto te han costado? —Negué.
—No importa, pero tómalo como mi forma de pedirte perdón Ced. Quiero hacer las cosas bien.
Él lo pensó, y suspiró.— Tienes suerte de que estuviera muy estresado por el regalo de Cho, si no... —Me miró.— Te perdono, anda. —Sonrió y yo contenta fui a abrazarle.— ¡Gracias Cedric! —Cogí mi escoba y me despedí de él mientras corría hacia la escuela.
A la entrada y para mi sorpresa estaba Freddy, apoyándose en el marco con los brazos cruzados, esperándome. —Con que... ¿Ahora soy tu Weasley? —Me miró arqueando una ceja.
—Siempre lo has sido, idiota. —Sonreí.
—¿Sabes que te van a expulsar por esto no?
—Seguramente... pero mejor eso que seguir mal contigo. —Se despegó de la puerta y se me acercó. —Fui una idiota y me deje llevar por... no lo sé, pero mira Freddy, hacía ya un tiempo que Draco y yo habíamos dejado de hacer cosas, y además yo cada vez estaba más enamorada de otra persona y...
—¿Otra persona? ¿Ahora hay alguien más?
—No, idiota... Esa persona eres tu. —Su cara de enfado se disipó (desapareció).— Me empezó a gustar mucho más todo de ti: tu sonrisa, tu pelo, tu forma de ser... todo Freddy, y yo de verdad que quería algo contigo... —Le miré con ojos de cordero. —Así que... ¿podrías perdonarme?
Él me miró por unos segundos, y me abrazó rápidamente, y yo aunque algo después le correspondí con mucho cariño. —Más te vale que no vuelvas a ser wevona, ____.
—Te lo prometo Freddy. —Le apreté.

Y así, todos acabamos felices y en harmonía, solo que yo terminé con el mejor de los Weasley.

Harry Potter One Shoots /en ello/Edición/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora