𝟏𝟐- 𝘿𝙚 𝙫𝙪𝙚𝙡𝙩𝙖

112 14 3
                                    

—Sinceramente, no entiendo la urgencia. —Decía Minho viendo al chico frente suyo. 

—Entonces te lo explicare de nuevo. —Jimin se giro para verlo de frente. 
—Quiero pasar la navidad con esos pobres, pobres huérfanos de Busan. 

Minho lo observo con curiosidad. 
—¿No es el orfanato de  Gwangju? 

—Yo estoy a cargo y tú como mi leal súbdito debes hacer lo que te digo. —Park dio unos cuantos pasos y sonrió. 

—Lo haría. —Dijo Choi acercándose. 
—Si en realidad fueras Sir Taehyung pero no lo eres ¿O si? 

—¿Cómo osas cuestionarme? 

—Usted es su primo. 

—Haré que te arresten por traición. 

—No creo que lo hagas porqué puedo probarlo. 

Jimin se alejo del chico. —Llamaré a los guardias. 

Minho lo tomo del brazo. —Solo hace falta un vistazo a tu mano. —Giro un poco su muñeca. —Y ver el pequeño tatuaje en tu meñique. —Debiste esforzarte más para cubrirlo. 

Park jalo su brazo para que lo soltara.

—Bueno ¿Y ahora que? 

—Me imagino que quieres dinero. 

Jimin se vio el meñique con molestia, había olvidado cubrir su pequeña flor. 

—Porqué no eres tan tonto para pensar que puedes mantener este acto por mucho. —Minho camino hasta un espejo y se acomodo el saco. 
—Así que puedes hacerme cómplice en tu conspiración o te expondré como impostor y traidor. 

Giro en la dirección de Jimin. 

—Tú no necesitas mi dinero, tienes una fortuna. —Reprocho el más bajo. 

—Mi hermano mayor heredo la mayoría de las propiedades familiares, lo que me dejo con gustos costosos y un ingreso pequeño. 

Jimin se cruzo de brazos, suspirando con enfado. —¿Y que hay de Taehyung? 

—Una vez que obtengas lo que quieres, desaparecerás sin dejar rastro así que Taehyung no tiene porqué saber nada.

—Me aseguraré de que la coronación sea esta noche, después te reunirás con el canciller de tesorería y harás una donación increíblemente generosa  a una caridad ficticia de la que serás director financiero. En cuanto me des una donación por mis servicios, prepararé un escape discreto y puedes quedarte con el resto del dinero. 

Jimin no estaba para nada conforme pero no podía negarse. 

—Cuando lleguemos, manténgase alertas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Cuando lleguemos, manténgase alertas. —Les decía Yugyeom. —No sabemos que encontraremos ahí.

Estaban a minutos de llegar a la finca de Jimin. 

𝑰𝒏𝒕𝒆𝒓𝒄𝒂𝒎𝒃𝒊𝒐 𝒅𝒆 𝒑𝒓𝒊𝒏𝒄𝒊𝒑𝒆𝒔 𝟐 •ʏᴜɢᴋᴏᴏᴋ/ʜᴏᴘᴇᴠ•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora