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C A P I T U L O
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—Llorando no ganas nada.

—No necesito ganar para llorar

No entendí lo que ese día dije, no entendía ganar para llorar. No comprendía y a la fecha aún sigo sin comprender lo, necesidad de ganar y no llorar ¿? Algo incomprensible para mí

...

Las cortinas no eran suficientes para que los rayos del sol pegara a mi cara

—Ayla arriba necesitas llegar temprano — Si, habían pasado 2 días después de lo que pasó y en serio no estaba emocionada por mi trabajo nuevo, si no a aterrada de que la señora que me  me tratara mal. ¡Diablos debo dejar de ver tanta comedia!

—Ya voy mamá — Entre al baño con mucha fatiga

Estaba hecha un desastre, mis labios estaban secos y mis ojos los cuales eran color verdes estaban rojos al igual que me habían salido uno que otro grano en la mejilla, mi cabello castaño estaba hecho un desorden pareciera que un rayo me pasó encima

—Vamos Ayla — Gritaron

Me metí a la ducha no sin antes quitarme la ropa, abrí la agua fría supongo que un baño con agua fría me despertaría

Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo.

...

—¡Ten mucho cuidado! Me llamas cuando llegues — Asentí

—Si mamá — Tome la manija de la puerta y salí del coche —Adiós — Toque repetidas veces el timbre de la puerta

—Si? — Una voz sonó en una pequeña máquina que estaba pegada a la puerta

—Soy Ayla Jackson la ¡nueva empleada! — Hablé

La puerta se abrió automáticamente, brinque del susto pues no estaba acostumbrada a esto. A simple vista la casa está muy hermosa, tenía un hermoso jardín con rosas de todo color, una hermosa fuente con un ángel adentro cuál sacaba agua de la boca, no entendía ese tipo de decoraciones eran algo raras y perturbadoras

—¡Que bueno que llegas! Ya te estábamos esperando desde hace rato — Hablo la misma señora del parque, la misma que dijo que no tocará las flores

—¿Usted? — La mire confusa

—La misma — Sonrió, mire el jardín estaba muy bien cuidado ¡Que lindo! —Gran parte de mi vida me he encargado en cuidar este jardín con mi vida, es demasiado hermoso ¿No crees? —Cabizbajo la cabeza —Lastimosamente la persona que me gustaría que viera este jardín no puede — Supongo que a lo mejor es su esposo a lo mejor falleció

—Lo siento mucho — Me miró

—Tienes unos hermosos ojos pequeña — Sonrió —Vamos adentró — Me tomó de los hombros

—Esta bien — Sonreí y entramos

Por dentro la casa se veía aún mejor, era hermosa y lujosa. Esta casa no la podría pagar ni con mi vida, es lindísima

—Vamos, por aquí — Me llevó a la cocina dónde ya hacía la señora que me contrató —Stella ha llegado — Habló

—Buenas tardes, mi nombre es Ayla Jackson y tengo 18 años — Di una de mis mejores sonrisas

—Lo se, mi nombre es Stella Rowling y ella es mi madre, Lilia Rowling — Sonrió

—¡Que lindos nombres! — Me ofreció una galleta la Sr. Stella a lo cuál acepte pues me moría de hambre, ¡ni desayuné ni e comido! —Realmente pensé que mi jefa sería una mujer regañona y mandona pero no fue así — Sonreí

En Busca De Un Asesino Donde viven las historias. Descúbrelo ahora