Capítulo 6

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2 de Noviembre. Snowdrop, Días antes de la guerra.

-... Planea atacar al reino entero con tal de acabar con usted, Señor... Es todo lo que logré reunir. –Dijo King luego de regresar de su misión como espía en HellBeast. –No dijeron ninguna fecha específica, el Rey Belos solo se limitó a decir que sería muy pronto. –Dio la última información que tenía para decir el joven Clawthorne.

-Está bien... –Dijo el Rey en un pesado suspiro. –Muchas gracias por cumplir tu labor, King. –«Nunca debí confiar en él.» se sentía culpable por todo lo que pasaba. Llamó al capitán de la guardia, Edalyn y a todos los soldados del reino.

-Preparen las tropas, estén listos para lo que se viene... Tendremos que luchar contra el ataque sorpresa... También yo iré. –Dijo para retirarse e ir a hablar con su hija y la amiga de su hija. –Cariño... Es hora de cumplir con el resto de tu parte del trato. Ambas lucharán junto a mí en el momento de la guerra. –Las dos chicas se miraron y asintieron. –Demuéstrame que eres capaz de defender a los tuyos.

10 de Noviembre. HellBeast frontera con Snowdrop. Día del ataque.

-Ya saben que hacer todos. No sean unos inútiles y destrocen cada rincón de ese reino... –Dijo Wittebane a sus soldados.

-¿U-usted que hará, mi Señor...? –Preguntó la capitana de la guardia, Lilith Clawthorne, una mujer de cabello teñido de color azabache azulado, piel pálida y ojos esmeralda; es la hermana mayor de Edalyn, pero terminó
uniéndose al ejercito de Belos por una deuda con él.

-¿Yo? Yo iré por el premio mayor... –Sonrió causando pánico en todos los que lo veían. –Ahora... ¡Que comience la masacre! –Todos corrieron en los caballos adentrándose a Snowdrop.

La gente en el pacífico reino corría para escapar de todos los vistos como asesinos despiadados, el rey no tardó en enterarse de los disturbios y dio orden de ataque. Amity y Luz tenían pensado acabar con el Rey tirano de una vez por todas, querían justicia y libertad... Así que con sus espadas listas y un as bajo la manga marcharon junto con todos a luchar.

-¡Atención todos! Recuerden que hay que proteger al pueblo. Ataquen a los enemigos y cuiden a los habitantes... Dicho esto ¡Al ataque! –Y empezaron, algunos en los caballos, otros corriendo, todos con diferentes armas en contra de los HellBeastianos.

Tuvieron bastantes bajas los de HellBeast, se notaban cansados y aunque entrenados, se veía que su líder no les daba pie a retomar fuerzas. Snowdrop iba triunfando aun teniendo a un par de heridos en sus tropas.

-¿Dónde está su Rey? –Preguntó la Princesa a uno de los contrarios sometido en el suelo.

-Oh, tierna y dulce chiquilla... No tienes que seguir buscando. Aquí estoy. -Se acercó caminando hacia ella y esta se puso en guardia para pelear. –No, no, no, Princesa... No pelearé contigo... -En eso llega Gerard y se coloca frente a su hija. –Y ahí está a quien esperaba. ¿Preparado para tu fin? –Sonrió, mientras El rey Noceda tenía en su mirada la furia de tantos años.

-Acabemos con esto... –Comenzaron los arrebatos entre los monarcas, ambos llevaban el mismo ritmo, siendo el mejor Noceda. Belos no permitiría algo así, como una distracción desvío su ataque de Gerard a Luz, cosa que funcionó. El padre de la chica al ver esto corrió a socorrerla recibiendo el impacto de la espada en su abdomen, cayendo al suelo al instante. Luz estaba petrificada con lágrimas en sus ojos al ver a su padre en ese estado. Amity fue hasta ella y le dijo.

-Debemos acabar con el... Hazlo por el pueblo, hazlo por tus padres... Hazlo por ti. Podemos acabar con él, juntas, mi princesa. –Al escuchar esas palabras, Luz se limpió las lágrimas, tomó su espada y ambas usaron su as oculto... Untaron un veneno en las espadas acorralando a Belos Wittebane, quien estaba celebrando su supuesta victoria olvidándose de la Heredera. Amity apuntó a su costado y Luz a su pecho... Le dieron.

El Rey escupió sangre, sacaron sus espadas y él cayó al suelo... Había terminado la pesadilla para todos... Los guardias de HellBeast se acercaron y La capitana Lilith junto con el Guardia Dorado, Hunter, sobrino del Rey, tomaron el pulso de este para corroborar que la batalla y el reinado corrupto habían acabado a favor de Snowdrop y de los buenos.

-Se... Se acabó. ¡Somos libres! –Gritó de alegría Lilith y todos le siguieron vitoreando de felicidad.

–Muchas gracias... Aunque seguro vamos a ser arrestados por nuestras malas acciones. –Le habló Hunter a las dos chicas, mirando a la princesa al decir lo último.

-Han sufrido bastante, el simple hecho de haber vivido con esa bestia los hizo esclavos durante mucho tiempo... HellBeast necesita a un nuevo Líder... –Se arrodilló para mirar los ojos esmeralda de la Clawthorne mayor. –Podría ser usted la que guíe al pueblo junto a ti, Guardián Dorado... –Le dirigió una mirada al chico quien se había sacado su máscara y capucha dejando ver su rostro cansado y cicatrizado, su cabello rubio y sus ojos color magenta. –Es hora de un nuevo comienzo. -Sonrió y todos le agradecieron. De verdad será una gran futura reina. Se retiraron todos a formar el nuevo Reino.

-Papá... –La princesa fue donde tenían a su padre dándole primeros auxilios y esperaban a los paramédicos. –Lo logramos... Todos juntos, por favor, no te vayas todavía... Quédate conmigo. –Se echó a llorar. –No me dejes… -Amity se colocó junto a ella y la abrazó, necesitaba apoyo más que nunca en estos momentos.



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Sip está es mi parte favorita aparte del final ;3 si les gustó pueden votar o no uvu gracias por leer~ (La próxima semana ya es el final AJAJJA guau)

Bye~

La Melodía de las Campanas de Invierno [Lumity] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora