Fallout

Parte I: Caer

Si tuviera que contarte algo, algo sobre mí, que te permitiera entender porque tome esta decisión empezaría por todo lo que nos pasó, pero eso tu ya lo sabes, eres demasiado lista para comprender las cosas aun sin que te lo diga, pero quisiera decirte, darte una explicación.
Cerrare los ojos y mirare al frente, mientras camine, paso a paso hacia adelante te diré, el ¿Por qué?
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"Déjenla allí" ...
Nunca sentí tanta desesperación como la que sentí cuando Vander y los demás murieron, en ese momento fue la rabia lo que disminuyo todo el dolor, pero su sangre en mis manos hizo que recordar que ella lo era todo para mi y que era todo lo que me quedaba en ese momento...pero ese sentimiento de enojo me consumió...la golpee y le dije cosas que quería decirle pero que no sentía...

Me desperté y ella no estaba conmigo aquí, en este lugar frio y cerrado, quizás este viva, quizás logro escapar... (¿a quién engaño, porque hago esto? Powder probablemente este muerta, probablemente Silco la mato, y no pudiste salvarla), trato de sacar esa idea de mi la cabeza, sé que las celdas son mas fuertes que yo, pero trato de romperlas, de buscar una manera de salir...

Lo próximo que recuerdo son todas las veces que intente salir de este lugar y las veces que, por ello, me golpearon, patearon y hasta me encerraron en aislamiento por meses, por tratar de escapar...y aunque a veces mi cuerpo ya no resistía, lo único que me levantaba para persistir en mi idea era la posibilidad de salir y encontrar a Powder...me pregunto ¿Dónde estará? ¿podrá sobrevivir sola?, estoy segura que si...

Los primeros días en este lugar los llene de gritos "no debería estar aquí", las siguientes semanas me la pase inspeccionando el lugar y los próximos meses persistí en los intentos de fuga cada uno con una paliza infernal como resultado...recuerdo la sangre y sus golpes, pensaba que en las calles de Zaun o en la ultima Gota golpeaban mejor para evitar que doliera y en ocasiones funcionaba pero a veces y solo veces dolía demasiado y en esos días me sentía débil, muy débil y aquel sentimiento me traía a la realidad "¿Por eso no pude proteger a Powder?".

Quería sacarla de todo esto, darle una mejor vida y posibilidad porque yo era consciente de que ella no era buena en muchas cosas, y de que le faltaba mucha experiencia, pero también conocía sus fortalezas y sabía perfectamente, que ella podría lograr lo que quisiese, era buena para entender algunas cosas que yo no, admiraba su destreza y dulzura, este lugar, el lugar de donde éramos no era un sitio para ella...

Quería sacarla de allí, pero ahora que lo pienso mejor, nunca lo hice de la mejor forma, en lugar de ello inconscientemente le estaba enseñando a aceptar nuestro destino y a sobrevivir, a ella nunca le gusto aprender esto, pero se entusiasmaba cada vez que le enseñaba algo y en pequeños momentos podía ser una niña de su edad, jugando y riendo como los niños de Piltóver, los cuales solo deben preocuparse por jugar y vivir. Todas las veces que visitamos esas calles lujosas me lo demostraron, Powder estaba maravillada, se emocionaba con esas cosas científicas y la motivaba cada vez mas a seguir con sus inventos, aunque no funcionaran, nunca deje de alentarla en ello, porque no podía comprarle una muñeca elegante como las que tenían las niñas de esta cuidad o los pastelillos que ella miraba por la vidriera de una tienda.

-Te lo aseguro Vi, ellos seguro ni lloran, lo tienen todo-ahora que recuerdos, aquellas palabras de Mylo me parecieron ridículas, pero los odiaba, tenia un amplio rencor hacia las personas de ese lugar. Pero trataba de reprimir ese odio para regalarle momentos buenos a Powder...

El frio del suelo me aliviaba los dolores, aunque nunca pude calmar uno...buscaba arrancarme esa idea de la cabeza. Ella esta allá afuera sola, debo sobrevivir aquí y buscar una manera de escapar. Debo salir de esta mierda...

Cerré los ojos y cuando los abrí nuevamente pensaba en esas veces, esta vez tenia una ceja rota, me sangraba demasiado, sentía sus pisadas y sus golpes y ese barrote de metal...nunca olvidare esos golpes. Entonces solo aguantaba con la idea de despertarme en unos días en el suelo un poco mejor. Casi siempre era así, tras una tremenda golpiza, dormía aproximadamente 3 días, y luego las goteras o el frio me despertaba, entonces fuertes punzadas sacudía mi cuerpo...