Capítulo 1

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¡Joohyun! ¡Párate derecha!

—¡Joohyun, tus modales!

—¡Joohyun! Recuerda que tienes clase de literatura a las siete.

—¡Joohyun, compórtate!

—¡Joohyun!

—¡Joohyun!

Qué difícil era la vida para una princesa, cualquiera que sea ajeno a la realeza pensaría que tienen la vida resulta.

La realidad es que no.

Por eso Joohyun debía seguir una inimaginable cantidad de reglas.

¿Hermana? —Bae Jinyoung, el menor de la familia se acercó a su hermana. —¿Estás bien? Saliste corriendo de la mesa cuando se te presentó al señor Kim.

¿Qué querías que hiciera, Jinyoung? Nuestros padres quieren comprometerme con un tipo al que apenas y conocen. —Los actuales reyes Surcoreanos habían acordado con la realeza Norcoreana en presentar a sus hijos, si la cosa marchaba bien la guerra terminaría, de ocurrir lo contrario se intensificará las batallas.

Es el heredero al trono, sabes que nuestro país está atravesando una situación delicada con su país. Nuestros padres solo quieren consolidar una estrecha relación con ellos, con su gente.

—Existen otros medios para lograr lo que el Rey quiera, un acuerdo comercial o algo parecido. No un estúpido matrimonio arreglado.— Bufó Joohyun molesta.

Cuida tu vocabulario, hermanita, si mamá te escuchará te aseguro que no estarías con vida.

—Desearía no estarlo así no tendría que sacrificarme por mi país. — Joohyun había conocido alrededor de seis principes provenientes de distintos puntos de Europa en lo que iba de la semana y ninguno había captado su atención.

—¿No amas a tu país? ¿No estás orgullosa de ser Coreana y pertenecer a esta familia? —El Monarca de la familia Bae aparecía en la habitación.

¡Padre! —Inmediatamente los dos jóvenes mostraron respeto a su padre haciendo una reverencia.

Estoy esperando tu respuesta, Joohyun.

Por supuesto que amo mi país, estoy orgullosa de ser Coreana y de pertenecer a la realeza —Respondió —Pero no estoy de acuerdo con realizar un matrimonio arreglado.

Escuchen muy bien los dos, su madre y yo hemos hecho sacrificios no solo por este país, sino también por la familia. Dejamos atrás nuestras vidas, a los amigos mas cercanos por cumplir con nuestro deber. —Argumentó el Monarca con claro tono de enfado —Así que salgan a desempeñar su papel allá afuera y tú, Joohyun, ve y atiende al que será tu futuro esposo.

—Él no será mi futuro esposo, ¡No pueden decidir con quién debo casarme! ¿Acaso no te importa mi felicidad? —Al borde de las lágrimas estaba Joohyun, quien luchaba internamente en lo que le decía su mente y su corazón.

Por supuesto que me importa tu felicidad, pero también me importa mi país, nuestro país y si su destino depende de ese matrimonio entonces efectuaremos la boda. ¡No podemos permitir que sigan estás luchas constantes! Así que por favor, haz lo que te pido.

HELL IN HEAVENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora