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❛ epilogue ꒱
𝗔𝗤𝗨𝗘𝗟𝗟𝗔 𝗡𝗢𝗖𝗛𝗘 𝗘𝗥𝗔 𝗟𝗔 primera vez en meses que estaban teniendo algo que se podría considerar una cita.
No era algo muy elaborado, simplemente era una cena doméstica preparada por ellos mismos. Algo simple pues nunca habían disfrutado de lo complejo.
La televisión estaba puesta mientras ellos intentaban cocinar la pasta al mismo tiempo que se molestaban el uno al otro. Con indicaciones para la receta impresas en el envoltorio de la pasta intentaban fastidiarse cariñosamente el uno al otro.
Las sonrisas los invadían más las risas no llegaban, Sapnap no había reído desde aquel día y George no quería forzarlo. El tejano lidiaba con su dolor de aquella manera y a él no le importaba.
El ruido blanco del televisor no permitía que existiera el silencio. Algo que ambos apreciaban pues, después de tanto silencio continúo en aquel hogar el sonido era simplemente relajante.
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No sabían cómo pero habían logrado cocinar correctamente la pasta. Ninguno de los dos lo entendía, simplemente le daban crédito a la suerte. Eso era la explicación que necesitaban. —George cariño, pon la mesa por favor—la voz del tejano sonó por la cocina. Un sonido fue lo que confirmo que el británico había entendido la orden pues, poco después, comenzó a sacar la vajilla de la alacena.
El de cabellos oscuros tomó rumbo a la televisión después de eso. Aquella noche habían decidido que sería noche de memorias agridulces. Comer pasta y ver videos de recopilaciones de su fallecido novio coqueteando con ellos o simplemente riendo.
Querían recordarlo como lo merece, como una excelente persona que siempre quedaría en sus corazones.
—Sap, la cena está servida.
No pasó mucho para que volviera el mismo ambiente que los había enamorado de los otros en un inicio. Bromas y coqueteo lleno de albur inundó aquel bello momento que ambos necesitaban. El cansancio emocional de todo el dolor era simplemente demasiado para ellos.
Por primera vez en meses de habían dado tiempo para recordarle al otro lo mucho que se amaban, y aquello era suficiente para ellos.
Por primera vez en meses Sapnap rió después de pensar que no podría.
Por primera vez George pudo sentarse en la silla que alguna vez fue de Dream sin llorar.
Por primera vez Sapnap usó una de las viejas hoodies sin importarle perder el aroma.
