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Sunghoon había despertado demasiado temprano ese día, se sentía demasiado nervioso como para seguir durmiendo, así que decidió levantarse al no tener nada más que hacer.

Algo dentro suyo decidió que sería buena idea preparar un desayuno para Heeseung, pues su madre le había dicho que tal vez así lograría caerle bien, y Sunghoon sabía que ella jamás le mentiría con algo así.

Pero cuando llegó a la pequeña sala de estar, Heeseung ya no estaba, sin embargo, había una nota sobre la mesita de centro.

"Tuve que volver al estudio, gracias por lo de anoche, te debo una".

—Heeseung."

Luego de leer aquello, Sunghoon decidió volver a su habitación, de pronto ya no se sentía con ánimos de comer algo, realmente no quería hacer nada. Esperaba que Heeseung al menos le diera los buenos días.

De todos modos, no es como si realmente fuera a ocurrir, Heeseung debía estar ocupado; después de todo, se acercaba la fecha de lanzamiento de su nuevo álbum y él no debía molestarlo.

Quizás el también debía dejar de pensar que podría tener una oportunidad con él, probablemente ni siquiera podrían llegar a ser amigos. ¿Cómo pudo pensar que las cosas saldrían como él quería?

Lo único bueno de todo esto es que al menos ahora tenía algo a su favor, y ahora que Heeseung tendría que hacer algo por él, Sunghoon lo aprovecharía al máximo.

Sólo debía pensar que haría con ese favor, porque si iba a pedir algo, sería en grande.

Luego de casi un mes sin volver a verse, Sunghoon se sentía feliz, pues luego de comprar tantas veces el mismo álbum en cuanto salió a la venta con tal de conseguir una entrada para el fanmeeting, finalmente lo había conseguido.

A pesar de que Heeseung fuera su vecino, casi no hablaban, mucho menos podrían verse, pero Sunghoon ya no creía poder soportar un día más sin tenerlo cerca, y aunque solo pudiera hablar con él durante cinco minutos que seguramente pasarían volando, era más que suficiente.

Y ahora él estaba en un taxi, llegando al lugar donde sería el fanmeeting, aunque en su mente quería que Heeseung cayera rendido a sus pies en cuanto lo viera, porque si, Sunghoon se había arreglado más que otras veces solo para impresionarlo.

No podía esperar más, solo faltaban un par de cuadras y estaría ahí, aunque ya lo había visto antes en persona e incluso haya dormido en su departamento, no podía evitar sentirse nervioso. Ahora Sunghoon tendría su atención durante cinco minutos y aprovecharía ese tiempo al máximo.

Incluso se había levantado temprano el día anterior para comprarle un regalo, porque no podía llegar al evento sin algo para Heeseung, y Sunghoon quiso darle algo que seguramente nadie más le daría: un anillo. Pero este no era cualquier anillo, claro que no, pues Sunghoon tenía el otro, así que serían anillos de pareja. Un regalo bastante ingenioso..

Pero Heeseung no tenía porque saberlo.

El taxi se detuvo frente al lugar en donde sería el evento y Sunghoon bajo del vehículo luego de pagarle al conductor, y una vez estuvo frente al gran edificio, caminó hacia la fila para poder entrar.

Ahora solo debía esperar un poco más, pronto podría estar junto a él.

Fanzoned || HeehoonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora