Él hermano de mi mejor amiga.

Capítulo 15; "Su silencio fue mi respuesta."

EMMA.

Maldito idiota, ¿cómo puede referirse así a su madre?

Con toda la rabia del mundo caminé lo más lejos que podía del auto de Jacob, acto muy estúpido porque él retrocedía con facilidad y al ver que yo lo ignoraba, detuvo su auto y bajó de éste.

Escuché como dejó soltar la puerta del carro con mucha fuerza y sé dirigía a mí.

-Emma.

Dijo pero yo lo ignoraba mientras seguía caminando.

-Mierda, Emma, estábamos bien.- dijo mientras caminaba más rápido hacia mí y me detuve para enfrentarlo frente a frente.

-Jacob, es tú mamá, ¿por qué hablas así de ella?.- pregunté en tono tan decepcionante y vi como él bajaba su mirada.

-Cada quien lo supera a su manera, ¿o tú cómo superas lo de tú papá?.

Me quedé totalmente paralizada, es cierto, a mi me cuesta hablar de mi papá, me duele no haberme despedido de él... Pero no trato mal su memoria.

-A mi papá no lo metas.- dije en tú tono frío

-Claro, ¿ves?, admito que sueno como un idiota... No me gusta que mencionen a mi mamá porque me hace ver la realidad; que está muerta. No quiero oir de ella, sólo quiero pensar que se fue de viaje y volverá pronto.

En su tono se oía lo dolido que estaba, es muy raro ver su lado vulnerable y efectivamente noté que aún no supera su muerte.

-¿Me llevas a la casa de Cassie?.- pregunté cambiando de tema mientras veía la hora de mi reloj, le prometí a Cassie estar a las 2pm en su casa.

A parte no quise que Jacob se volviera a poner a la defensiva por tocar éste tema.

No diré nada al respecto, a mi tampoco me gusta que me mencionen a mi papá, aunque yo sí acepto que él está muerto...

Jacob no dijo ni una sola palabra y sé dirigió a la puerta del asiento del copiloto seguidamente abriendola y esperando a que yo entrara.

Él aún sigue siendo un caballero.

-

Durante todo el trayecto hacia la casa de Cassie hubo un enorme silencio, aunque no estuvo incómodo, creo que ambos estábamos reflexionando de lo que había sucedido anteriormente.

Cuando finalmente llegamos a la casa de Cassie sentí como la mirada de Jacob indagaba cada parte de mí.

-¿Qué?.- pregunté en un tono burlón.

-¿Te han dicho lo bella que eres cuando te enojas?

Ahí me sonrojé y al parecer eso le pareció divertido.

-Eres un tonto.- dije tratando de abrir la puerta, éste chico me está poniendo nerviosa, tengo que salir de aquí.

-Tú tonto.

Sí, mi tonto.

Finalmente salí de ahí y le dediqué una última sonrisa antes de tocar el timbre de la casa de Cassie.

-¡Pero miren quién llegó!- exclamó Cassie emocionada, ella realmente me da buenas vibras. -Adelante, has llegado a la sala, demandada.

¿Demandada?