Hackers: Contraataque [Libro 2]

Capitulo 7: Recuerdos

El gran golpe, estaban listos para ello pero no solo era por la información que podían robar si no que cada uno debía demostrar de lo que era capaz, todos tenían que probar que eran los mejores sin importar lo que pasara.

—¿Segura de que quieres hacer esto, aún puedes detenerlo? —Era como si William no estuviera de acuerdo al cien por ciento.

—Debemos hacerlo, además hay otra cosa que quiero saber, si sucede entonces lo sabrás.

—De acuerdo —Sin más preguntas, William arrancó, eran geniales, como en los viejos tiempos.

Si, ellos también tenían un pasado.

Hace un par de años...

—Ah Mierda —Adel salió volando por una de las ventanas de cristal de aquella casa.

—Te rindes tan rápido princesa —Su rival de toda la vida, una chica de la misma escuela que creía ser mejor que Adel.

—Apenas estoy empezando —Adel tenía sangre en todo el rostro pero seguia de pie —Veamos que tienes para mí.

La chica empujó a Adel y siguieron con la pelea en el jardín hasta que William apareció y separó a las chicas
—¡Suficiente carajo!

Adel no se detuvo y noqueó a su rival dejándola inconsciente —¡Bum perra!
Quién es la mejor ahora.

William y Adel salieron corriendo hasta estar lo suficientemente lejos.

—Carajo esa fue una maldita locura que suerte que salimos de ahí —Adel aún podía sentir la adrenalina corriendo por sus venas.

—Bien, terminemos esto de una vez por todas —Sacaron sus computadoras y comenzaron a descargar un vídeo, un vídeo que podía no acabar con una vida pero si con sus sentimientos.

—¿Pero qué...? —Adel se llevó una gran sorpresa al ver las redes sociales

—¿Qué sucede? —William no entendía nada de lo que sucedía.

—Dijiste que no había..... Que nadie más lo tenía —Le mostró su computadora, alguien más tenía el vídeo y todo el plan se había ido a la basura.

—Adel yo, iba a decirte pero tenía un trato con....

—No —Las lágrimas comenzaban a caer de su rostro —Pudrete Will —Se puso de pie para irse

—Adel espera —William intento detenerla

—No —Adel no dejo que la tocará —No te me vuelvas a acercar —Adel corrió, corrió y corrió como si no hubiera límite.

Parece que la maldición del vídeo se sigue transmitiendo en la familia.

Adel volvió a casa en busca de su hermano gemelo —Cassius, Cassius ¿Dónde estás...? —Lo encontró en su habitación —Sigues aquí

Cassius cerró su computadora —¿Tu lo sabías?

—Intente detenerlo, quería mostrarte pero no tenía idea de que ella...

Cassius la Interrumpió —Entonces si lo sabías y ¿Por qué no me dijiste nada?

—No creí que fueras a creerme si no te mostraba las pruebas, enserio te juro que no quería que pasara esto —Adel se acerco a Cassius con lágrimas en los ojos.

Pero Cassius se alejo —Ese es tu maldito problema Adel, solo piensas que tú puedes arreglarlo todo y que estará bien, sigues siendo tan ingenua como nuestro padre —Cassius tomó su mochila y guardo su computadora con algunas otras cosas —Me largo de aquí.

—No por favor Cassius —Adel no quería que se fuera, intentó detenerlo pero fue inútil, Cassius se alejo y Adel se cayó al suelo, está vez sin poder levantarse —Por favor perdóname.

Cassius se fue y no dijo una sola palabra.

Más tarde ese mismo día su madre esperaba a Adel en su oficina, sabía lo que le esperaba y trato de prepararse mentalmente que era lo que más iba a doler.

—¿Querías verme madre?

—Adel, pasa —Y ella veía por la ventana, su silla giro para ver a Adel
—Descuida, ya ví el vídeo y entiendo a tu hermano, entiendo sus sentimientos y entiendo su decisión pero tú, de verdad creí que podía hacerte más como una Crawford y no como una Bennett

—Madre yo lo siento, lo intente

—Tus disculpas no me sirven de nada y no van a arreglar nada —Miro a su hija por unos segundos —Existe una parte de mi pasado que aún no conoces, cuando estaba en la morgue por las tres balas que me dieron en la cabeza, mi padre estaba ahí y créeme que me arrepiento de no haber estado en persona cuando se disparó, el punto es que, el no regreso pero yo si.

—Mi hermano no volverá ¿Cierto?

Su madre se puso de pie —Aún no, necesita tiempo para pensar y pelear sus batallas internas. No lo molestes, no servirá de nada.

Fin de ese recuerdo

Adel se dió cuenta de que habían llegado, tomo su bolso y espero a que William la ayudará a bajar del auto.

Los millonarios si que eran muy reservados en sus eventos, algunas calles antes estaban cerradas y el lugar donde sería la gran fiesta desde la recepción se notaba la elegancia pero también podía destacar ese desprecio con el que habían conseguido todo su dinero para pagar sus lujos.

Lámparas de cristal colgando, una muy elegante barra con luces blancas con tragos saliendo a cada segundo.

—Señor y señora Reynolds bienvenidos al Six gold dirigido por el quinto hermano de la familia Lith.

Fueron muy amables al llevar a Adel y William a un pequeño recorrido por el hotel, bebían un trago en una pequeña mesa blanca en forma de reloj de arena.

—Un trago —Ness se acerco con su elegante ropa de mesero

Adel y William tomaron otra copa

—Enserio no puedo creer que su nombre tenga el número de hijos que tuvieron

—Concuerdo contigo —Adel entendió la referencia de Ness —Preparate

Ness se alejo para no hacer notar nada sospechoso y continuo con su recorrido dando copas de champagne a quien le hiciera falta.

Cassian y Ly llegaron poco después, ambos muy elegantes, estaban cerca de la barra, lejos de Adel y William.

—Adel sobre la última vez —William tomo a Adel por la cintura para acercarla a el y poder susurrar a su oído —No hemos hablado

—No hay nada de que hablar —Adel lo miro y en el fondo aún lo amaba pero no quería cometer los mismos errores de la última vez —Y por favor se más discreto.