"El Club de Los Villanos"

Capítulo 3

Al llegar a la fiesta lo primero que veo es a algunas personas tiradas por el piso pasando la borrachera, otras besándose casi que comiéndose vivos y otros más bailando. Hago una mueca de asco, hay demasiadas personas en este lugar para mi gusto.
Pero si deseo continuar con mi vida perfecta hasta ahora tengo que sacrificar mis gustos y ser lo que todos esperan que sea, la inalcanzable, la novia de Carter, la porrista estrella o lo que sea que me digan.

Carter me coge de la mano y entramos a la casa la gente nos saluda pero no le hago caso a la mayoría solo a los que son más o menos populares y están al mismo nivel.

Carter se va con sus amigos del equipo y me deja sola

Maldito...

Veo a las garrapatas bebiendo y bailando en una pista improvisada y me acerco a ellas, aunque no veo a Maya con ellas, y eso me parece raro. Me sonríen al verme y me ofrecen un vaso, ¿el contenido?, creo que es vodkca con naranja. Le doy un sorbo y lo confirmo.

Después de un rato bailando, con las chicas y algunos chicos que se me acercaron decido alejarme de todo y subir al segundo piso de la casa a coger un poco de aire fresco. No sé si son los tragos que tengo arriba o es real pero creo que acabo de ver pasar al antisocial hijo del alcalde y se dirigía escaleras arriba, siempre me pareció alguien muy misterioso y más ahora que está mirando hacia todos lados como asegurándose de que nadie lo siga, pero lo sorprendente es que al ver su cara me fijo que no queda rastro alguno de la pelea de hoy... osea ninguna herida, ningún moretón, nada, es como si nada hubiera pasado y como no me apetece volver con las chicas y hace rato no veo a Carter me decido por seguir al pelirrojo.

Al llegar arriba veo que se mete en una de las habitaciones que quedan al final del pasillo pero no la cierra del todo, la deja entreabierta. El recorrido hasta la habitación se me hace un poco tedioso, los tragos me están pasando factura.

Las habitaciones están cerradas pero en algunas se escuchan gemidos y objetos calléndose de una de ellas, paro en seco cuando reconozco la voz de Carter seguido a eso abro la puerta sin delicadeza, y sinceramente no sé si reír o llorar, Carter se encuentra en la cama follando con Maya ¿enserio?,¿con ella?, sabía que me era infiel pero nunca lo había visto en pleno acto de infidelidad. En estos momentos siento, decepción, tristeza, y un montón de emociones más que no estoy dispuesta a identificar ahora.

Carraspeo lo suficientemente alto como para que mi voz sobresalga de los gemidos chillona de Maya. Me miran y abren los ojos que parece que se les van a salir de sus cuencas.

Carter pálidece.

-Nena no es lo que parece-, me dice Carter separándose de ella como si quemara, ella lo mira dolida y yo esbózo una sonrisa burlona, el se apresura a vestirse.

-Sabes- empiezo- no me voy a complicar la vida armándote un drama innecesario, solo te voy a decir que de todas las perras que besan el piso por dónde caminas pudiste encontrar algo mejor- ella me mira ofendida.

-Soy mejor que tú eso seguro, ¿o no vez en donde está tu noviecito?, a quien quiere es a mí, porque yo le doy lo que tú no, porque tú jamás serás suficiente para él.

-¡CÁLLATE!- le grita él.

-Ok- me encojo de hombro y le resto importancia porque sé que está dolida y se le nota, se le nota que lo quiere pero el no le hace caso ahora, su mirada está en mí y eso a ella le duele y más porque le gritó y no habla para defenderla en absoluto, así que le guiño un ojo y se pone roja de la rabia.

Predecible.

Salgo de ahí y voy a lo que estaba. En ese momento suena por toda la casa Bichota de Karol G, entiendo la letra porque se hablar español y otros cuántos idiomas más que no tengo ganas de recordar en estos momentos. Solo sé que empezé a cantar la canción en medio del pasillo y a perrear, como dice mi prima Andrea que es Mexicana.