Capítulo 2

44 6 0
                                    

La alarma del móvil me despierta.
Otro día más.
Respiro forzadamente y me levanto de la cama. Me dirijo a mi armario y decido ponerme un jersey negro y unos tejanos básicos. Suelo vestirme así para no destacar, ni marcas ni superficialidades, todo eso crea expectativa hacia los demás. Me pongo mis botines negros y los pequeños collares que me regaló mi madre en navidades. Me gustan mucho, pero en especial el que tiene una pequeña medallita plateada con mi signo del zodiaco: leo. Voy al baño y me peino un poco el pelo.
-Que asco.- dejo ir inconscientemente haciendo que mi padre se despierte.
-Buenos días Natalie.- le oigo decir medio dormido.
-Buenos días papá.- le contesto con poco énfasis.
-Sonríe un poco anda, que estas mucho mas guapa. Te voy a preparar las tortitas que te gustan, a ver si alegras esa carita.- Me sonríe y desaparece por el pasillo.
No entiendo como alguien puede estar tan enérgico a estas horas de la mañana, yo parezco un zombie.
Me hago la ralla de los ojos y me pongo un poquito de rímel. Normalmente no me maquillo mas que eso, pero hoy estas ojeras me piden ayuda. Las disimulo un poquito con base de color carne y salgo del baño.
Mi padre me espera sonriente con un plato de tortitas i frutos del bosque.
Como me conoce.
-Gracias, tienen muy buena pinta.- digo dibujando una media ronrisa y sentandome en la silla.
-Hija, ya sabes que si te pasa cualquier cosa, puedes hablar conmigo...¿Verdad?
-Lo sé papá. Gracias.
Se marcha y yo termino de almorzar.
Hoy va a ser un dia muy largo.

Skinny loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora