Sasuke Pov's.
- No puedo creerlo, pellízcame porque creo que estoy soñando - dije totalmente sorprendido.
Naruto soltó una pequeña risa mientras manejaba. ¡Dios! Era sorprendente, lo veía a mi lado y no podía creer de lo que era capaz cuando estaba junto a él, no le temía a nada.
Sentía que mi vida ya estaba completa, que no necesitaba más para ser feliz.
Gire mi cabeza y mire a Naruto conducir concentradamente, su perfil perfecto mirando al frente guiando nuestro camino, el cabello hacia arriba, esas cejas grandes, sus ojos azules y sus pestañas perfectamente rizadas, doradas, brillaban como la luz del sol.
Su nariz fina y perfecta, sus sexys y calientes labios rosados aterciopelados, su cuello desnudo, y esa camiseta blanca de cuello 'V' que me dejaba ver sus músculos marcados a través de ella.
- ¿Qué tanto me ves? - me preguntó Naruto sonriente.
- No lo se - me removí en mi lugar - es sorprendente cómo cambian las cosas en tan solo un abrir y cerrar de ojos... como creí que era feliz y que todo en mi vida estaba completo y entonces apareciste tú y cambiaste toda mi perspectiva de lo que yo pensaba que era la verdadera felicidad...
- ¿Te vas a poner nostálgico ahora niño bueno? - bostezo sonriendo.
Baje mi cabeza mientras reía y buscaba en mi mochila.
- Has conducido prácticamente toda la noche, ya casi amanece... ¿no quieres descansar antes de llegar a casa de tu madre? - pregunte aun buscando en mi mochila.
- La verdad si, pero ya estamos muy cerca de la isla, llegaremos en un par de horas y no puedo evitar querer llegar ya para verla...
- Lo sé - sonreí.
- ¿Qué tanto buscas ahí? - me pregunto.
- Aquí están... son caramelos... cómelos, el azúcar te mantendrá despierto.
- No los necesito, puedo seguir despierto por mi mismo.
Típico de Naruto, no acepta la ayuda aunque sea un poco.
- Si, si - dije yo - abre la boca.
- No -dijo rápidamente mientras conducía, rodee con los ojos, Naruto era tan terco.
[🥀]
Naruto Pov's.
Ya había pasado casi todo el día conduciendo con Sasuke, él durmió unas horas en el camino a la Isla Jeju, pensé que jamás llegaría, aunque estaba cansado no quería detenerme, quería ver a mamá, ha sido tanto tiempo.
Estacione el auto en frente de la dirección que me entregó, era un lugar muy lindo en la isla, cerca de la playa, mejor dicho enfrente de ella.
Tenía un pequeño jardín rodeado con una cerca blanca, la casa también era blanca, ni muy grande ni muy pequeña.
Dios, sentí como mi corazón comenzaba acelerarse, estaba ansioso.
El niño bueno me miró fijamente y acarició mi nuca suavemente enterrando sus dedos en mi cabello desde su lugar.
- ¿Nervioso? - me pregunto. Yo suspire largamente. Eso respondió a su pregunta.
- Algo...
- Vamos Naruto, se que tu madre se muere de ganas de verte tú a ella... ya quiero conocerla.- me sonrió.
Yo asentí y ambos bajamos del Mustang. Me quedé junto a él observando la casa de mi madre por un instante, los pies se me quedaron estampados en el suelo y otra parte de mi luchaba por correr a esa puerta.
Sasuke agarró mi mano lentamente y con ternura, entrelazando mis dedos con los suyos y suavemente como un niño pequeño me hizo caminar paso a paso hacia la casa.
Cuando al fin quedé en frente de la puerta junto a él recordé la conversación que tuvimos hace unos días por teléfono, respire profundo para darme valor, cuando la verdad era que me sentía nervioso y ansioso. Mi mano tembló cuando la acerque al timbre y presione el botón con algo de temor, me sentía como un niño.
Aún sujetaba la mano de Sasuke y lo apreté más aún cuando sentí que la puerta se abría, se que le duele mi apretón, pero no me dice nada, solo me mira tranquilamente.
Entonces la puerta se abrió completamente y era ella, con sus hermosos ojos violetas grisáceos, la sangre se me congeló y el corazón me latía deprisa, ella no había cambiado mucho, de hecho se ve tan hermosa como siempre.
Me mira fijamente y no puede evitar llorar, suelto lentamente la mano de Sasuke y la abrazó con todas mis fuerzas, al fin tenía de nuevo a mi madre conmigo.
- ¡Naruto, cariño! - sollozo en mis brazos - estás aquí... mi bebé.
- Mamá... - susurre con la voz tan quebrada.
Acaricie su cabello, sedoso y suave como siempre supe que era, su piel blanca y tibia, sus brazos rodeándome y sintiéndome como un niño entre sus brazos. Los latidos de mi corazón eran tan intensos que los podía sentir como mis pensamientos, sentía que mis pies no resistirían mucho, estaba muy emocionado de volverla a ver.
- ¡Dios mío! - lloro - Déjame verte... ¡Estás enorme! Has crecido mucho y que guapo estas, querido - me sonrió con sus lágrimas resbalando por sus mejillas - lo siento, es que estoy tan feliz de que estés aquí..
- Mamá, cuánto te he extrañado - la abrace nuevamente - Oh por Dios, gracias gracias, gracias.
- Naruto, estás tan fuerte que siento que me quitas el aire...- acarició mi rostro lentamente.
Me miraba fijamente y tocaba mi cara como queriendo guardar mi imagen en su memoria por siempre.
Mis ojos, mi nariz, mis mejillas, todo lo acaricio.
- Mi bebé... - susurró emocionada.
- Ha pasado tanto tiempo - sonreí.
Mamá me sonrió y de repente giró su cabeza hacia Sasuke, el niño bueno aun seguía ahí, a mi lado, sin decir ni una sola palabra, tenía los ojos brillantes, como si también estuviese a punto de llorar por este encuentro.
- Tu debes ser Sasuke, ¿verdad? - preguntó mamá y sonrió.
- Si... - dijo Sasuke asintiendo.
Mamá tomó su mano y me miró fijamente.
- Es precioso, parece un muñequito... o un príncipe...
- Sasuke, ella es mi madre... Kushina - dije yo presentándolos, Sasuke le sonrió.
Y de repente mamá y él se acercaron y se dieron un cálido abrazo.
Hoy era el día mas feliz de mi vida, las dos personas más importantes de mi vida juntos y conmigo. Nada me hizo más feliz que estar aquí.
🌟
Hola, ¿qué tal les pareció el capítulo? 🤔
Muchas gracias por leer 😊
Hasta el próximo capítulo 💕
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MALAS ENSEÑANZAS -NARUSASU-
Fanfiction'Esta fue la última vez Naruto Uzumaki, estoy harto de tu mal comportamiento y de ti' - dijo su abuelo por octava vez en la semana - 'te vas a la Academia de Konoha no me importa si quieres o no, es una orden' Es la Quinta escuela de la que lo echan...