-Acababa de llegar del trabajo, había llegado algo tarde ya que tuvimos una cena con la empresa, mi novio estaba en el sofá y al verme entrar se para y camina furioso hacia mí. -
¿Dónde carajos estabas?
-se notaba la furia en su tono y en sus ojos-
En una cena de la empresa
-digo con el tono de voz más calmado que logro emitir, me asusta verlo enojado-
¿Ah sí? ¿Y con el puto permiso de quién? ¿Crees que te mandas sola?
-me toma del cabello, estoy muy asustada, nunca lo había visto tan furioso-
¿Sabía que no era buena idea dejarte ir a trabajar pequeña zorra, no volverás ahí, me entiendes?
Pero...
-digo sin pensar, por lo que me arrepiento en seguida-
¿Pero? ¡¿Pero qué?!
-su agarre es más fuerte me está lastimando-
¿Te atreves a contradecirme estúpida? Te aseguro que no volverás a hacerlo
-suelta un golpe que me deja atolondrada, siento mi mejilla caliente y un líquido escurrir por ella-
No volverás ahí y punto, me obedecerás y seguirás siendo el ama de casa que siempre debiste ser
-suelta el agarre y me tira al suelo-
Enviaré un justificante médico a tu trabajo, y cuando... cuando eso se te quite iras a renunciar, ¿entendido?
-Asentí con temor, vi su mandíbula tensarse y me grito con los dientes apretados-
¡Te pregunte si entendiste, debes responder!
-se acerca a mí y suelta una patada en mi estómago-
¡Responde carajo!
S-si, entendido
-luego de eso se va caminando hacia la habitación y antes de entrar a ella me dice-
Haz la cena, tengo hambre, y apresúrate, no tengo tu maldito tiempo
-me levanté como pude y empecé a preparar la cena, estaba cocinando su platillo favorito, gracias a Dios es algo rápido, se lo llevé a la habitación y yo regresé a la cocina a lavar todo lo que había utilizado, una hora más tarde voy a verlo, está profundamente dormido, decidí dormir en un cuarto aparte, antes de que despertara y se diera cuenta que no dormí ahí me recosté a su lado-
********************************************************************************
-Pasan los días, había ido a renunciar, llevaba maquillaje ya que necesitaba tapar el hematoma notorio debido a que seguía ahí a pesar del pasar de los días, y mi novio se desesperaba cada vez más así que preferí ir a renunciar hoy mismo, luego de renunciar llegué a mi casa y me desmaquillé luego empecé a hacer los que haceres del hogar-
Mhg, tengo hambre
-voy por un vaso de jugo cuando escucho que tocan la puerta, fui a abrir y me quedé totalmente helada al ver a mi jefe ahí parado, sentí el frío recorrer mis venas y un temor indescriptible, si mi novio lo ve aquí me va a matar-
¿S-señor, que hace aquí?...
--------------------------------------------
Helou pastelitos
Que tal les pareció el capitulo?
Espero les haya gustado, ahora unas preguntas
¿Que opinan del Novio de Laia?
ESTÁS LEYENDO
Un alma Rota
RomanceLa vida actual de Leia Saintclaire parece facil, pero no muchos conocen su pasado.