CAPÍTULO 8

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-Mi señor, traemos a la bruja.-Hanna pataleaba, aunque los pinchazos en su pierna se lo impedía

-Soltarme, bestias.- Ante ella se encontraba un hombre que ya había visto antes, el hombre de las imágenes en la esfera el día que murieron sus padres, Hanna enfureció. -Tu, tú mataste a mis padres.-Los dos hombres que tenían cogida a Hanna por los brazos la lanzaron frente al rey oscuro.

-Encantado de conocerte, Hanna.-El hombre sonrío frío, clavando los ojos verdes en ella.-Eres igual a ella, tu antepasada, que por, si no lo sabias, llevas su nombre.-El hombre caminaba por la sala, de un lado al otro de la mesa de madera, donde cabían doce comensales.-En su honor, eres la bruja que ha heredado un legado, pero un legado maldito.-Se sentó en una especie de trono, con muchas puntas de lanza como decoración, encima de un reposabrazos había una corona, una corona negra de huesos.-Ella me ganó hace 40 años, fue una batalla injusta, debió unirse a mi pero no, ella era testaruda, siempre siguiendo la luz.-Hanna miraba a su alrededor, buscando una forma de salir, de poder huir, desde que había llegado al monte de Grift no sentía su conexión con sus poderes, con la naturaleza, y la daga que le había dado Alexa la tenía en el muslo, pero la cubría el pantalón.-Tú puedes unirte a mi en esta revuelta Hanna, podemos hacer cosas grandiosas, tener el poder absoluto del olimpo, gobernar este mundo, dejar de lado a los mundanos que solo nos molestan, crear la única raza digna de vivir con la magia.-Hanna palideció, ahora lo entendía, solo la quería por su poder, tenía que salir de allí cuanto antes.

-¿Unirme a ti?-Una carcajada salió de su garganta, irritando al rey oscuro.-Tú mataste a mis padres, y yo te mataré a ti.-Hanna se levantó del suelo y tocó la daga por encima de la ropa.

-Eres una bruja ilusa, nunca podrás ganar una batalla contra mi, eres una cría.-Se levantó de su trono y caminó hasta Hanna.- Podría matarte ahora mismo y nadie se enteraría, nadie te echaría de menos, bruja insolente.- El rey oscuro aguantaba la cara de Hanna con la mano derecha, clavando las uñas en las mejillas, haciendo pequeños cortes. Hanna no bajó la mirada en ningún momento.

-Si me matas, el legado muere conmigo.-Escupió entre dientes. El rey la soltó con asco.

-Llevarla a las mazmorras, nos la quedaremos una temporada.-Los hombre la cojieron por los brazos.-Al final entrarás en razón pequeña bruja.-Hanna miró por última vez al rey, mientras se dejaba arrastrar por sus hombres.

El pasillo era frío y no había luz, tal vez la estaban llevando a un lugar bajo el suelo.Hanna miraba a todos lados, intentando memorizar el camino, pero le era imposible, las paredes eran todas iguales, había girado a la derecha tantas veces que ya no podía recordar cuántas. Los hombres del rey la dejaron en una celda que parecía una cueva, había mucha humedad y podía escuchar los gritos de otras personas.

-Ponte cómoda bruja, esperamos que esta habitación sea de su gusto.-Los hombres empezaron a reírse mientras se alejaban.

-Malditos trogloditas.-La joven se sentó en el suelo y sacó de entre sus ropas la daga. La piedra del mango brillo.

-¿Eres nueva?-Una voz la hizo sobresaltarse.-No pienses en escapar, es imposible.

-¿Cómo lo sabes?-Hanna se puso de pie de un salto, buscando la voz que la hablaba.

-Lo he intentado tantas veces que he perdido la cuenta, todo el que llega al monte de Grift no sale de aquí

-¿Quién eres?-Cuestiono Hanna mientras miraba a todas direcciones a traves de los barrotes de su celda.

-Soy Alan, príncipe de los snappz.

-¿Rey de qué?-Hanna no entendía de qué le estaba hablando

-Soy un ser acuático, vivo dentro del bosque mayor, en un reino oculto. ¿Tú quién eres?,porque el que estés aquí me hace saber que eres lo suficientemente importante como para gastar las pocas energías que le quedan al rey oscuro.-Hanna no sabía si debía fiarse de aquella persona, podía ser una trampa del mismo rey oscuro para que hablara, pero que mencionara el reino del bosque mayor la tranquilizó, podía ser de ayuda.

-Soy Hanna, Hanna O'sullivan y...-Pero no pudo continuar porque Alan la había callado.

-Eres la princesa del reino de las brujas, la heredera del legado.-Hanna frunció el ceño.

-¿Cómo sabes quién soy?

-Todo el mundo sabe quién eres, cuando la suprema murió te dejo el legado a ti, una joven que todavía no había nacido, pero que sería lo suficientemente fuerte como para acabar con el rey oscuro.

-Todo eso ya lo se, pero sigo sin entender porque yo, joder, no tengo ni puta idea de como van mis poderes, suerte que tengo esta daga porque sino..

-¿Tienes la daga?-El tono de voz de Alan era de asombro, Hanna empezaba a cansarse de que la interrumpiera cada dos por tres.

-Si tengo una daga,¿qué pasa ahora?

-Con ella puedes salir de aquí Hanna, debes huir, que el rey te tenga aquí solo quieres decir una cosa, quiere el legado, y con él en sus manos es invencible, tienes que huir,acude a los lobos, ellos están de nuestro lado, podrán protegerte.

-No se como utilizarla para huir, sabes solo me la dieron no me dijeron nada más, no estaba en mis planes ser capturada por un rey oscuro.

-Solo concentrate Hanna, esa daga es tu futura arma mágica, tu canalizador, sabes como utilizarla solo concentrate.

-Lo dices como si fuera tan fácil...-Hanna miraba la daga sin saber qué hacer. Hanna pasó las manos por los barrotes, podía sentir la energía de la magia en las palmas de su mano derecha, miró la daga que aguantaba con la mano izquierda y la pasó por los barrotes, la energía poco a poco fue disminuyendo. La cerradura dió de sí y se rompió en pedazos.- Oh dios mio.-Hanna salió de la celda empuñando la daga, parecía que nadie se había enterado. -Alan, ¿dónde estás?, te llevaré conmigo, no pienso dejarte aquí.- Hanna corrió por el pasillo de las mazmorras, pero nadie decía nada.

-¡Alan!- Hanna gritaba con todas sus fuerzas, pero nadie quería decir nada.Mientras corría no vió a los hombres del rey, que de tanto grito habían acudido.

-¿Cómo has escapado joven bruja?-Hanna se giró de golpe, empuñando la daga y con el corazón a mil. Estaba tan concentrada en los hombres del rey oscuro que no vió que alguien venía por detrás y la atacó por la espalda, quedando inconscente.

-Muy bien Alan, serás liberado de inmediato.-Dijo el Rey oscuro al príncipe.-Vosotros, coger la daga y encerrar a la señorita en la celda de nuevo, quiero más protección, no quiero que se me escape la bruja.

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⏰ Última actualización: Aug 30, 2023 ⏰

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HANNA O'SULLIVAN Y EL LEGADO MALDITODonde viven las historias. Descúbrelo ahora