𝑺𝒊𝒈𝒖𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝑨 𝑴𝒊 𝑬𝒔𝒑𝒐𝒔𝒐 ♥︎ᵏᵒᵒᵏᵐⁱⁿ♥︎

♥︎𝑪𝑨𝑷𝑰𝑻𝑼𝑳𝑶 #2♥︎

Ese mismo día Jimin no volvió a casa, solo le envío un mensaje a Jungkook para avisarle que no iría hasta la hora que regresara de su salida, que era a la una de la mañana, siempre disfrutaba sus sábados, pues salía con sus amigos y se divertía, pero este era distinto, pues el dolor en sus pecho aún no desaparecía por completo, a pesar de que los chicos intentaron animarlo, el solo se la paso bebiendo y mirando a la nada, tratando de asimilar todo lo que había ocurrido esa madrugada del viernes, buscaba miles de pretextos para poder confiar plenamente en su esposo, pero y ¿las manchas de labial en el cuerpo y ropa de Jeon? y ¿el perfume que se había impregnado en sus prendas? como pasar por alto aquello, pero nuevamente las palabras de su mejor amigo llegaron a su mente, "puede que sea un plan de Sana para separarlos", quizá tenga razón, pero ¿Y si no? Recordaba las miles de formas que intento Sana para separalos, ¿Sería este otro de sus planes? Su cabeza empezó a dolerle de tanto pensar, siempre fue una persona insegura, antes sufrió de baja autoestima, y le era difícil poder confiar plenamente en las personas, pero el solo quería proteger su corazón de salir lastimado, Jungkook fue su primer amor y el también él lo fue de su esposo, a pesar de tener tanto tiempo juntos, sus inseguridades seguían presentes, no como antes, pero aún le afectaba, aveces llegaba a sentirse poca cosa para su esposo, pero luego recordaba las miles de palabras llenas de amor que este le susurraba a la hora de intimar y cuando estaban juntos que llegaba a olvidar todo lo que le atormentaba, lo estaba controlando, empezaba a superar aquellas etapas donde se sentían poca cosa gracias a las palabras llenas de odio de el grupo de chicos y chicas que lo molestaban en la secundaria, pero luego del suceso de la noche anterior todo eso se derrumbó, las inseguridades volvieron, volvió a sentirse poca cosa para Jungkook, volvió a sentir que esté lo dejaría por alguien mejor y más bonito, dejaba de confiar.

Jeon siempre le demostró de mil maneras lo mucho que lo amaba, pero  al parecer no funcionaba, él necesitaba confirmar por sus propios ojos que Jungkook no le era infiel, una parte de él estaba seguro que su esposo no sería capaz, si no lo hizo desde un principio, no tenía porque hacerlo ahora, pero su inseguridad salía a hacer batalla y lo llenaba de dudas, dudas que lo lastimaban.

Para cuando Tae lo dejo en su casa, eran la 1:15 de la madruga, Jungkook había llegado pasadas las 5 ¿Porque él no hacía lo mismo? Porque lo amaba, porque a pesar de todo, esa parte de su corazón y razón le pedía confiar en el amor de su esposo.

Con una sonrisa amarga y tratando de retener las lágrimas abrió la puerta, no estaba ebrio, a diferencia de Jungkook él sabía controlarse, sabía cuando parar y dejar de beber, pues al siguiente día recordaba todas y cada una de las cosas que hacía, sin embargo, Jungkook aveces se excedía tanto, que para el siguiente día no recordaba nada de lo que había hecho estando borracho, justo como ahora.

Se encontraba en el sofá mirando un programa la TV, tan concentrado que no noto cuando abrió la puerta, siempre era igual, cada vez que salían ellos se esperaban para poder recostarse juntos, razón por la cual Jimin no había dormido la noche anterior, cosa que al parecer a su esposo se le olvidó, pues lo había hecho esperar demasiado.

Se sacó su abrigo y zapatos tranquilamente, recordando como había llegado Jeon hace horas atrás, tan borracho que ni pararse bien podía, rápidamente limpio un par de lágrimas que habían fluido si permiso y volvió la vista a su esposo, quién seguía concentrado en al parecer un documental, él quería confiar, no, él necesitaba confiar.

Lo veía tan concentrado mirando a los animales en la TV, su rostro haciendo muecas de sorpresa y fascinación, para nadie era un secreto que Jeon era amante de los animales. No reflejaba arrepentimiento de nada, quizá porque había olvidado todo lo ocurrido la noche anterior, se veía tan hermoso solo iluminado por la tenue luz de la TV, que Jimin se permito olvidar y disfrutar de ese momento, ya después se mortificaría con sus pensamientos.