Mi pequeño príncipe

veintiuno

En la mañana me desperté y vi a mami entrando a la habitación con un biberón en la mano, cuando me vio me sonrió y se acercó para darme un besito en los labios

_¿Como amaneció el príncipe más precioso de todo el mundo eh?_ Se acostó a mi lado y empezó a acariciar mi cabello mirándome con una gran sonrisa, yo también le sonreí pero a diferencia de su sonrisa la mía estaba algo decaída, ella notó que no estaba bien así que tomo mi mano _¿Que pasa bebé? ¿Te sientes mal?_ Me entrega en biberón y los dos nos sentamos en la cama en posición de indio

_Es que... No quiero que me mientas más_ No me gustan para nada las mentiras

_Yo no te miento_ Levanté la mirada encontrándome con la suya _Mira_ puso los ojos en blanco y volvió a verme _Yo se que soy una persona un poco deshonesta pero eso no quiere decir que contigo vaya a ser igual ¿Okey?_ Alzó la ceja

_Hoy lo primero que me dijiste fueron mentiras_ Mami me miró con una cara de confusión

_¿Cuáles mentiras te dije?_ Frunció el ceño

_Me dijiste que era el príncipe más precioso de todo el mundo y yo estoy completamente seguro de que eso no es cierto, yo no soy ningún príncipe y soy demasiado feo_ Mami se acercó a mi y me dio un fuerte abrazo, yo también la abracé y escondí mi cara en el hueco que había entre su cuello y su hombro

_¿Por qué dices eso Richie? Tu no eres feo, tu eres un hombre muy guapo ¿Por qué piensas lo contrario?_ Me separé de ella con un gesto de enojo y tristeza

_¡Eres una mentirosa! ¿¡No ves todas las cicatrices que tengo en el cuerpo!? ¿¡Todos los moretones y rasguños en mi piel!? ¿¡Que no ves que estoy gordo y mi cabello es feo!? ¿¡No lo ves!?_ Lancé el biberón al piso y empecé a llorar de tristeza y desesperación, mami solo volvió a abrazarme, no quería que siguiera teniéndome lástima _N-no es neces-sario que me tengas l-lástima, me haces sentir más estúpido de lo que ya soy_

_Richie, que tengas cicatrices, marcas y moretones no significa que seas feo, tu cabello es muy bonito, y lo más importante, tu no estás gordo ¿Quien te dijo eso?_ Acunó mi rostro entre sus manos y me hizo levantar la mirada para que hiciéramos contacto visual _¿Tu crees que soy bonita?_ Asentí _¿Y si tuviera el cuerpo lleno de cicatrices?_ Volví a asentir _Que tengas estás marcas no quiere decir que tu belleza sea menor ¿Me entendiste? Todos, y escúchame bien, TODOS tenemos marcas o cicatrices y no por eso debemos sentirnos menos atractivos que otros ¿Okey bebé? Y si no te gusta tu cabello puedes hacerte un corte diferente o teñirlo de algún color, si te sientes subido de peso pues entonces puedes hacer ejercicio ¿Que te parece? Si en realidad no te sientes para nada bien con tus cicatrices puedo conseguirte alguna crema especial para eso o podemos ir con una amiga mía que es médico cirujano y ella te puede ayudar con eso_

Limpió mis lágrimas y me abrazo con fuerza, yo también la abracé y así estuvimos un rato hasta que me dio una palmada fuerte en el trasero, yo me separé y voltee a verla con un puchero

_¿Y eso por que fue?_ Me sobe el trasero y ella me miró seria

_Por todas las cosas malas que dijiste hacia tu persona y por haberme llamado mentirosa, no me gusta que hables así de ti así que la próxima vez que vuelvas a hacerlo en realidad te voy a dar un buen castigo del cual jamás te vas a olvidar y no podrás sentarte por varios días ¿Quieres eso?_ Me señaló con dos dedos y yo negué _Bien, entonces ya sabes que evitar, ahora vamos a bañarte que tengo cosas que hacer_

Ambos fuimos al baño y mami me quitó la pijama, puso el agua calientita y empezó a bañarme, al parecer no se le dificultaba mucho ya que es un poco más alta que yo así que puede lavar mi cabeza con facilidad.
Mientras mami enjabonaba mi cuerpo me cantaba una canción muy bonita, no recuerdo muy bien la letra pero en realidad era muy linda, me hacía sentir bien.