Feliz navidad chicos

Fiesta

El pelinegro se encontraba en su casa, pensativo de lo acontecido, se arrepentía mucho de lo que había hecho. La mirada de decepción de su esposo, viendo cómo lo engañaba frente a sus ojos, eso le partía el corazón. No tenía ni el coraje de mirarlo a los ojos para pedirle disculpas ¿Y si acaso no lo acepta? ¿O ya quiere saber más de él?. Por ahora lo que estaba pensando era en recompensar a Matt, le convenía para evitar la cárcel. El sonido de la puerta lo desconcentra de sus pensamientos.

-¿Qué?-. Pregunto su esposo de mala gana, viendo con decepción,igual que la última vez.

-Light-. El pelinegro se acerca a él sorprendido, quedando de rodillas.- Por favor perdóname-. Solloza.

-Te ves patético-. Cuelga su chaqueta en su hombro y sigue su rumbo a la habitación, dejándolo solo.

L, sabía que no iba hacer fácil conseguir un perdón de su esposo, así que se limpio las lágrimas y fue a seguirlo, veía que estaba sin camisa viendo la televisión, pero no apartaba su mirada de sus abdominales tonificados, por dios que lo provocaba.

-Quiero hablar por favor, arreglar las cosas-. Se acerca lentamente al pelinegro, notaba que el ajeno lo ignoraba pero aún así seguía hablando.- Verás, lo que pasó te lo juro que será la última vez, Near me amenazó, tiene todo grabado y si no hago nada para reparar el daño iré a prisión.-

-En realidad tu te lo buscaste, no me interesa si vas a prisión o no, solo déjame tranquilo-. Se levantó de la cama yendo para la cocina, tenía ganas de beber, la bebida lo puso pensativo, en realidad no se sentía tan molesto con L ya que él varias veces lo hizo con Misa. Se posó una sonrisa en el pelirrojo al recordar lo que hizo.

Mientras que el de ojeras estaba acostado en la cama en posición fetal llorando, abrazando una almohada para secar el resto de sus lágrimas que caían sin parar, pensando en cómo recuperar la confianza de su esposo que se dió cuenta que lo ama mucho.

-¿Por lo menos me puedes explicar por qué lo hiciste?-. La voz de su amado lo desconcentro, que dirigió la mirada hacia él.- ¿Ummm?-. Continuó esperando la respuesta.

-Impulso-. Exclamó temeroso, sabía el carácter de su esposo.- Solo quería saber que se siente dominar a alguien, poseerlo-. Finalizó su respuesta sin mirarlo, sentía vergüenza.

-¿Y que sentiste?-. Siguió preguntando, dándole un sorbo a la botella que tenía en la mano.

-Me gustó-. Respondió con la verdad,pero aún así no le dirigía la mirada.

- Interesante-. Se fue acercando a él de apoco, dejando la botella en una mesa cerca, gateó en la cama para acorralar a su esposo.- Sabes, a mi también me gusta dominar-. Lo sujeta bruscamente del cabello quedando debajo de él una vista perfecta para ver aquel miembro que se asomaba por el pantalón.- ¿Quieres que te domine mi amor?-.

-No entiendo, ¿No estás molesto?-. Gimió por el tirón que sintió en su cabello, quedando más cerca del miembro de su esposo.

-Digamos que estamos a mano-. Sonrió con malicia.

-Espera a qué te...-. No terminó de hablar cuando sintio aquel miembro grueso y grande en su boca, en verdad tenía tiempo sin sentirlo de esa manera, en el fondo aún se sentía decepcionado ya captó a lo que se refería pero a la vez quería olvidar todo y seguir con esto. Procedió a lamerlo con cariño, para luego volverlo a introducir a su boca moviendo su lengua a la vez, eso le agrada al pelirrojo, le acariciaba el cabello.

-Bueno chico-. Le seguía acariando, aguantando los gemidos pero no podía detener el sonrojo, el pelinegro logró esparcir semen en su rostro, lo cual disfruto.- Aún tengo energías-.  Posiciono a su esposo para masturbarlo en 69 duraron un rato, aunque L no podía evitar gemir era muy débil.

Otra vez se esparció semen en la sábana, lo cual procedieron a quitarla para penetrar a su querido pelinegro con brusquedad, le encantaba a ambos, su intimidad ya no existía entre ellos desde hace mucho, es por eso que cada quien hizo de lo suyo. Resonaba los gemidos fuertes del pelinegro apretando las sábanas que quedaban hasta llegar al climax, sin duda fue cansado que se quedaron dormidos sin notarlo.

Al día siguiente, ambos despertaron con buen humor, tanto que actuaron como si nada paso, hubo atención de esposo a esposo y una brillante idea al fin se le ocurrió a L, rogando que Matt lo perdonará.

Se programo un llamado para todos los trabajadores accediendo les que pueden llevar a un acompañante, era una reunión, o una mini fiesta en la empresa, el pelinegro esperaba con ansiedad a Matt, temía en que no llegará. Pues luego de unos minutos notó la presencia de el de gafas sin parar de jugar en su consola, lo cual noto que el rubio lo golpea para que dejara aquel aparato, eso le hizo gracia esa pareja es bonita. No dudo en acercarse.

-Hola Matt-. Saludó con nerviosismo, no por el pelirrojo sino por el rubio su mirada era asesina.- Gracias por aceptar la invitación-. Continúo.- Y te pido disculpas por mi mal comportamiento, te lo juro que no volverá a pasar con nadie más, mantendré mi postura como trabajador y tú cómo jefe-. El público estaba en silencio, no sabían la mayoría lo que realmente había pasado solo se rumoraba que fue muy descortés, sin embargo les impacto aquello, ¿Acaso le dió su puesto como socio?.

-¿Espera que quieres decir?-. El de gafas aún no había captado la idea, mientras que el rubio lo miraba con una sonrisa al igual que todos, él era el único confundido.

-Eres ahora mi socio Matt-. Aclaro Near.- L y tú intercambiaron de ocupación.-

El pelirrojo de la emoción abrazo a su novio y luego al pelinegro dándole las gracias por accederle un puesto tan importante, muy importante para él, ser el dueño de una empresa, sería lo mejor que le haya pasado, después de eso el resto del día se fue en celebración, esperando la siguiente celebración del año nuevo.

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Hola lectores espero que les haya gustado, dudo mucho que haga un capítulo de año nuevo, en verdad consideren que este es el fin espero les guste no leemos a terminar FOTOS y LA ESTAFADORA. Luego uno de angeles y demonios de la death note UwU

Bye¥¥