REMINISCENCIAS

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Logro entrar en un profundo sueño, pero a diferencia de lo usual este sueño es tan vívido que de no ser porque estoy consciente de estar en una época pasada, juraría que es realidad.

Trascurría el año 1987 aproximadamente, Yo tenía alrededor de doce años. Podía ver a mi Madre en la cocina preparando un delicioso almuerzo para la llegada de Papá y su medio hermano, quien es mucho mayor que él. Hace alrededor de tres semanas que mi Padre recibió una llamada de mi Tío Roberth (a quien de cariño le llamamos Roby), en dicha llamada mi Tío Roby le pidió a Papá que viajara con urgencia al pueblo donde él vivía para ayudarle a resolver unos asuntos verdaderamente importantes. No tenía ninguna idea de qué podrían tratarse esos asuntos tan importantes para el tío Roby, pero si estaba seguro de que se trataba de algo serio, pues el tío Roby no suele pedir ayuda ni menos pedir a Papá que viaje sabiendo las responsabilidades que tiene con nosotros; es más, a pesar de ser tan frecuentes las visitas del Tio Roby nunca nos telefonea y siempre llega por sorpresa, no solo porque sabe que siempre es bien recibido, sino porque trae consigo víveres y abarrotes que nos han sido de mucha ayuda.
En realidad era rara la llamada que recibió Papá, pero más aún lo eran las razones por las que debía viajar a sabiendas de ser un viaje tan largo y tedioso. Fue por todo ello que se me despertó la curiosidad a tal punto que quería saber a toda costa la realidad tras ese improvisado viaje, y ojalá lo descubriera antes de que papá partiera.
La noche después de que fue recibida la llamada del tío Roby, no podía consiliar el sueño, y como ya me sentía más independiente con doce años, en lugar de acudir a la habitación de mis padres, decidí bajar a la cocina a servir un vaso de leche, ya que mi abuela solía decir que nada como un vaso de leche para recuperar las ganas de dormir.
Cuando bajaba las escaleras comencé a escuchar las voces de mis padres en la cocina, y como no lo estaban haciendo en voz baja, me senté en silencio en el último escalón para lograr escuchar su conversación, con la esperanza de resolver mis dudas sobre el viaje que realizaría papá al siguiente día en la tarde, (cosa que también me extrañaba, pues si era urgente y para algún tipo de papeleo, no era una hora apropiada para partir).
Escuchaba con atención:
-Cariño, creo que ha llegado el momento, mi hermano ha preparado todo. Recogeremos lo necesario en el pueblo y volveremos de inmediato, luego a más tardar en dos días nos iremos todos de aquí. No quiero que nos arriesguemos a perder a nuestro hijo.
No puedo creer que todo esto esté pasando y menos tan pronto.
-Yo tampoco me esperaba que todo sucediera así.
-Crees que todo esto se halla desatado con la muerte de tu padre?
-Estoy seguro de que es así, pero por favor no hables en voz alta sobre la muerte de mi padre, Nick no lo sabe y por su seguridad es mejor que no se enteré; por lo menos mientras llega el cambio.
-Tienes razón. Y que hay con nuestro traslado sin anunciar, que explicación le daremos?
-Ya veremos, algo se nos ocurrirá, además con Roby en casa tendremos más ayuda para convencer a Nick de que es lo mejor sin que haga tantas preguntas.

Sentí que mis padres terminaron su conversación y volví rápidamente y en silencio a mi cuarto, sin ir por mi vaso de leche, igual después de toda esa información aunque incompleta no podría dormir en toda la noche.

OSCURO SILENCIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora