Hybrids | Las Denali (Terminada)

Capítulo 1

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Ya había acabo mi penúltimo año en el internado y empezaba uno de los dos veranos que pasaría con mi padre. Agarré mejor mi maleta mientras acomodaba mi mochila en mi hombro, busque con rapidez el carro de papá, no lo veía en ninguna parte hasta que lo vi a él recargado contra su carro de policía y su uniforme. 

Al verme sonrió con timidez, me acerque a él para abrazarlo, aspire profundamente su perfume abrazándolo con fuerza.

- Te extrañe tanto mi pequeña - Me dijo con voz quebrada acurrucándome a él

- Yo igual te extrañe papi - Le dije con suavidad separándome un poco del abrazo

- Vamos a casa pequeña - Me dijo soltándome por completo- Feliz 17 años atrasado - Me reí

Metimos mi maleta en la cajuela del carro para subirnos e irnos a casa, en el camino hablamos de como se estaba yendo en el internado y sobre su trabajo, él era más como yo, calmado, tranquilo y de pocas palabras.

Él y Renée fueron un gran sustento en mi vida al no tener a mis padres biológicos conmigo, al principio no me decía que le había pasado a mis padres, ya me dijeron cuando demostré tener la suficiente fuerza para saber lo que paso con ellos, lloré cuando me contaron que había pasado.

Cada vez que podíamos ir a Seattle para ir a ver la tumba de ellos le dejaba un ramo de lirios verdes, en mis pocos recuerdos con ellos sabía que papá me decía que era su pequeña lirio mientras que mamá me decía que era su niña. 

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...3 años después...

Me encontraba en la biblioteca de la universidad haciendo tarea de Administración, ya tenía 20 años, estaba en mi segundo año de mi carrera de Negocios y Administración en la universidad de Phoenix, al igual que en el internado había ganado una beca completa por mi rendimiento escolar.

Desde muy chica mis padres descubrieron mi facilidad de negociar y administrar mis cosas, literalmente negociaba mis pocos castigos desde que tengo memoria y administre todo lo que podía. A mis padres les daba risa y ternura al verme tan decidida cuando entraba en mi faceta de administradora o negociadora. 

- Lai, vamos a la fiesta de la facultad - Me dijo Edna en un susurro

- No Ed, tengo mucha tarea aun - Le susurre mirándola unos segundos para seguir en mi tarea

- Mentirosa - Me acuso- La última tarea es la que estas haciendo, vamos a esa fiesta - Dijo decidida

- No iré, hay que estudiar - Me quito el libro- Ey!! Eso es mio - La mire mal 

- Iremos a esa fiesta o no te doy el libro - Me dijo con una sonrisa "inocente"

Bufé - Bien, pero solo un rato - Le dije dándome por rendida- Máximo tres o dos horas

Edna me vio satisfecha dándome mi libro, lo abrí de mala gana para seguir en mi tarea, apenas terminamos Edna me llevo hasta nuestro dormitorio arrastrándome de la mano, me la pase refunfuñando todo el camino, no quería ir a la fiesta, prefería quedarme a dormir.

- Me gustan las fiestas, pero en serio prefiero quedarme durmiendo Ed - Le dije mirándome al espejo

- ¿Ves que me importe? - Me pregunto señalando su cara- Verdad que no, ahora deja de hacer berrinches y para tu culito lituano de esa silla

Me reí un poco mientras negaba con la cabeza, me paré de la silla agarrando mi pequeña bolsa donde metí mi celular y algo de dinero junto a mis credenciales. Marco y Connor son nuestros amigos se nos unieron en el camino, ellos ya habían ido a donde era la fiesta, regresaron por nosotras.

Marco y yo nos fuimos por algo de beber mientras que Edna y Connor se quedaron hablando con otros amigos o compañeros de la facultad.

- ¿Cuándo será el día que Connor se le declare a Edna? - Le pregunte a Marco con mi vaso cerca de mis labios

- Yo igual me lo pregunto todos lo días, siempre lo hablamos por el muy cobarde siempre se arrepiente - Dijo fastidiado- Si yo fuera él ya le hubiera dicho a Edna

- ¿Ya le dijiste a Marinette? - Le pregunte alzando un ceja mientras sonreía de lado

- Sí - Dijo orgulloso- Esta noche este nene, tendrá al amor de su vida entre sus sabanas - Paso su mano por su cabello

Nos reímos un poco, regresamos con los chicos dándoles sus bebidas, la noche paso entre risas, platicas, baile y algunos besos con desconocidos o desconocidas. Bebí lo suficiente como para sentirme algo mareada, mire la hora 12 p.m. de la noche, me despedí de los chicos para regresar al dormitorio.

Las farolas iluminaban bien el camino, pero sentía que me veían desde el el pequeño bosque que rodeaba la zona por donde iba, ignore esa sensación dándole lógica de que era algún animalito que viva en este mismo, hay varias ardillas, gatos y parajitos viviendo en el pequeño bosque así que me quede con esa respuesta.

Sentí un gran jalón a un costado al mismo tiempo sentí una mano en mi boca y un brazo rodeando mi cuerpo, cerré los ojos por inercia, sentía como si volara al ir a gran velocidad. 

- Que bien hueles - Me dijo una voz masculina cuando paramos

Abrí los ojos de golpe, no podía ver su cara bien por la oscuridad del pequeño bosque, pero sus ojos color carmesí resaltaban como dos pequeños faroles mirándome deseoso, pasaba sus mano libre por mi cintura hasta mi espalda.

Sus manos eran heladas y extremadamente firmes, empecé a forcejear mientras le golpeaba su pecho el cual era helado y firme como una pared, me dolía las manos de golpearlo.

- No hagas eso linda solo te harás daño, tienes agallas - Se acerco a mi cuello- Eso me gusta, hace que seas más deliciosa - Sentí su aliento en mi cuello haciendo que mi piel de erice por su cercanía

Volví a forcejear con más fuerza mientras mis lagrimas rodaban por mis mejillas, sentí como pasaba su lengua por mi cuello para sentir como se alejaba un poco, pensé que me iba a soltar... que ilusa fui. 

Sentí como me clavaba algo en el cuello, en cuestión de segundos me empecé a sentir débil con la mirada algo borrosa, sentí como se separo de golpe, la mirada la tenía demasiado desorientada, pude ver dos sombras peleando antes de desmayarme.

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