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—Puedes girar a la izquierda.— Louis le da la instrucción a Harry cuando están a punto de llegar a su casa. La calle está vacía e iluminada por farolas.

Harry jala el freno de mano y se detiene justo en frente de una puerta color rosa. —Es linda.

—Pequeña en comparación a tu casa. Es todo lo que puedo pagar.

—Oye, es lo que te mantiene a salvo, así que no es menos hogar para ti.— Harry se acerca para tomar su mano. Para este punto, Louis está seguro de que Harry ya se ha percatado de la forma en que cede fácilmente al más mínimo toque del hombre mayor, por lo que ahora lo toca en cada oportunidad que tiene. Louis no se quejará, ambos lo saben.

Después de poner a dormir a Damien, tuvieron una cómoda conversación para conocerse más. Louis descubrió que hay ocho años de diferencia entre sus edades y se quedó un poco sorprendido cuando Harry le dijo que tenía treinta y dos ya que el hombre se ve un poco mayor. Es obvio que hay un lazo entre ellos, claramente se atraen el uno al otro. Harry admitió que en realidad seguía buscando una pareja estable ya que quiere que Damien tenga la familia perfecta que merece, pero también porque el mismo Harry a veces se siente bastante solo.

Louis también, al igual que la mitad de la población mundial, quiere tener una pequeña familia perfecta. Simplemente no sabe cuándo lo logrará. A la edad de veinticuatro años, algunas personas aún se están enfocando en obtener su maestría, pero Louis siempre ha preferido abrir un negocio donde pueda vender helados, ser dueño de una linda heladería. Ha estado observando este lugar no muy lejos de donde siempre estaciona su camionetita, pero necesita trabajar un poco más para tener el dinero suficiente. También quiere sentar cabeza, desea pasar más tiempo con su futura propia familia para así compensar su infancia solitaria como hijo único.

—Sí, estoy agradecido por lo que tengo.— Louis sonríe tímidamente cuando siente el roce áspero en su pequeña mano.

—Entonces, ¿estarás libre este sábado?— Harry se estremece ante la frase no tan sutil que todos pronunciarán al menos una vez en su vida.

Cubriéndose la boca, Louis mira al hombre mayor con ojos suaves. —Sí, no hago muchas cosas los sábados.— Un toque de color fresa adorna su rostro mientras trata de ser valiente y cuestiona. —¿Quieres preguntarme algo más?

—Bueno, creo que es bastante obvio que me gustas. Quiero decir, puede que sea un poco mayor para ti, pero siempre puedes decir que no. Simplemente, tengo esta sensación de confianza cuando estoy contigo, me haces querer estar cerca de ti, tocarte y simplemente mirar tu hermoso rostro. Te lo digo una vez más, puedes decirme que no en cualquier momento. Pero, ¿serías tan amable de permitirme llevarte a una cita este fin de semana?

El color en las mejillas de Louis solo se intensifica, está tan feliz. Existe este pequeño lado fangirl en sí mismo que se siente como si saliera de él en forma de chillido, pero trata de controlarlo. Honestamente, no cree que Harry debería de haberle advertido acerca de que es un hombre unos cuantos años mayor, él sabe que es una puta por los hombres mayores.

—Yo también estoy interesado en ti, si soy honesto. Me haces sentir seguro, no por tu edad, bueno al menos no es del todo por eso.— Harry sonríe, haciéndolo gemir delicadamente. —Bueno, no puedo evitarlo, ¿de acuerdo? Los hombres mayores simplemente tienen esta cosa en la que siempre toman la iniciativa en todo y eso me gusta. Especialmente tú, eres muy amable conmigo. Creo que quiero intentarlo, así que sí, saldré contigo.

—Gracias, bonito. Tomaremos esto con calma. Prometo que haré todo lo posible para que valga la pena.— El silencio de la noche intensifica la tensión entre ellos, Louis se siente sofocado por el firme agarre alrededor de su mano, además el tono confiado de Harry le transmite una energía que le dice que posee una gran polla.

Coldest with the kiss, nice with the cream [bottom!louis] [traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora