La noche que la luna se apagó

El encuentro (Cap 4)

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-El reggueton me gusta, pero siendo sinceros, escucho de todo, y quién no!?-dice Alex-

-Pues si, pero debes tener un tipo favorito, que escuches de todo no quiere decir que todo te guste, simplemente es de tu agrado, más no tu favorita, tengo un punto no!?

- Lo tienes,-rie- y tú sabes cuál es mi tipo favorito de música!?

-Deberia!?-niega- aún así, creo saber cómo averiguarlo, el cerebro tiene una reacción cuando le gusta algo, y al tratar de expresarlo tu cuerpo puede hacer movimientos involuntarios, también podría hacer que escribas un poema hermoso, bailes, o cualquier otra de las miles de formas que hay, a eso nosotros le llamamos inspiración, y eso solo te lo puede dar lo que realmente te gusta, me explique!?

-Asiente- entonces ya se cual es mi música favorita!!

- Cuál es!?

- La música clásica, esa me da inspiración y hace que puedo pintar mis cuadros, además me da paz

-Me alegra haber podido ayudarte, aunque tú ya lo sabías solo necesitabas un pequeño empujón.

-La primera vez que te vi, me parecias muy gruñona, y la verdad es que no, eres inteligente y buena onda, solo eres muy seria y ya.

- Me lo han dicho mucho, créeme que se por experiencia propia que no me veo amigable, así que no te preocupes y gracias por el cumplido.

Alex y yo nos hemos vuelto muy buenos amigos, al parecer estudiamos lo mismo, y ambos estudiamos dos carreras, solo que el estudia  administración y licenciatura en pedagogía, y yo estudio administración y veterinaria.

La plática me hizo olvidar que hoy ya es viernes y que mañana es el viaje y no se que siento al respecto, mis sentimientos están muy confusos, lo único que si tengo claro es que esto es muy mala idea.

No se por que acepte, o bueno si lo se, pero odio admitir la razón, ella volvió demaciado pronto, demaciado pronto para olvidarla, puede que yo no muestre ningún tipo de nervios, pero muy en el fondo se que aún la quiero, eso jamás cambiaría, pues es mi hermana,  aún así me niego a aceptarla de nuevo en mi vida.

Solo iré para hacerle ese favor, pero le dejaré muy claro que es todo lo que recibirá de mi, después de que la ayude, será la última vez que nos veremos.

(...)

Hoy siendo nuestro último día de clases mis compañeros decidieron hacer una pequeña reunión en el salón, hoy no nos dieron ninguna clase pues los profesores no le vieron ningún uso, es el último día y no hay tareas ni cosas que entregar.

La mitad de la universidad sale hoy de vacaciones, la otra mitad tendrá que quedarse dos semanas más pues sus carreras así lo piden.

Lamentablemente diana y yaniz son parte de esos alumnos, aunque eso me da un poco de alivio no quiero que vean el torbellino de emociones que sere en el instante en qué vea a Lucia, no quiero que ellas me vean así, y aunque me impuse no sentir y  dejar todo atrás y simplemente ignorar el hecho de que me abandono se que no servirá de nada, que fácil sería poder hackear el corazón y decirle que no sienta, ayudaría a tantas personas.

Sin siquiera saber ya estábamos a nada de que el timbre sonora y nos dejará ser libres, y entonces cuando por fin sono yo estaba inmersa en mis pensamientos y me quedé ahí en el asiento como si eso hiciera retroceder el tiempo y no tomar las malas decisiones que tome,por qué si, haber aceptado ayudar a Lucia era una completa locura, una maldita y absurda desición que tome como una estúpida.

Por qué en el mismo instante en qué esa enfermera me dijo esas palabras ahí mismo se derrumbó la barrera que yo había levantado por años, ahí mismo me derrumbe porque el solo hecho de pensar que está vez la podría perder definitivamente me dolió hasta el alma.

Ella lograba eso en mi, lograba hacerme la persona más fuerte del mundo y después la más débil, por qué si, yo podía aparentar ser fuerte, ser como una roca por fuera con cara de pocos amigos pero por dentro lloraba cada día, noche tras noche por dentro estaba totalmente destruida eso lo sabía, ella me rompió en mil pedacitos que yo ya no pude volver a juntar.

Eso es algo que jamás en la vida admitiría en voz alta por qué eso sería demostrarle que me daño a más no poder y hizo de mi lo que se le dio la gana y eso jamás va a pasar de nuevo no dejaré que ella vuelva a poner mi vida patas arriba, al tener todo claro me levanté y fui directo a casa para poder hacer  mi maleta y terminar de una vez por todas con ese maldito encuentro.

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La caminata a casa fue muy rápida y de un momento a otro termine mi maleta, fue rápido y muy productivo, al terminar limpie un poco para no pensar y funciono muy mi cuarto quedó impecable, ahora solo falta poder cenar y planear lo que haremos cuando llegue haya.

Las chicas cocinaron por que dijieron que yo debía estar muy descansada para tomar ese vuelo mañana que no hiciera ningún esfuerzo para no estar cansada, y me parece que exageran un poco, o bueno mucho pero no les dije nada, después de terminar me fui a mi habitación y mire mi laptop para ver qué me esperaba mañana, el horario que me dio la enfermera dice que debo estar en el hospital a las 2 de las tarde, considerando que el vuelo sale a las 6 de la mañana yo llegaré haya a las 11 son 5 malditas horas de vuelo.

Al llegar iré directo a el apartamento y dejaré mis cosas después de eso ya vere que hago para que le tiempo pase lo más lento posible, sin más que hacer me acosté a dormir o bueno me acosté por qué dormir no pude, como ya lo dije antes tengo problemas para dormir y con este acontecimiento pues menos lo pude hacer la última vez que vi mi reloj eran las 3 de la mañana, faltaban dos horas para que yo tuviera que estar en el aeropuerto y no habia dormido absolutamente nada, a regañadientes y muy molesta me fui a dar un baño.

Me quedé en la ducha por 45 minutos, salí hasta que senti que realmente estaba bien, bueno es un decir no lo están pero la dicha ayudo a qué mi cuerpo se relajara, me cambié me cepille el cabello y los dientes, y fui a desayunar algo, opte por algo ligero pero delicioso, un plato de fruta con yogurt, al terminar limpie todo y fui a despedirme de las chicas ya eran las cinco con diez de la mañana, me despedí y tome rumbo al aeropuerto, al llegar fui a mi sala y espere ahí para abordar, fui poco lo que tuve que esperar o eso pensé yo.

Abordamos y yo me puse a leer, pero me fue imposible concentrarme pues solo eran letras y ya, mi mente estaba en otra parte, me impuse dormir todo lo que pudiera.

Y eso hice, desperté 15 minutos antes de aterrizar, al final solo tome mi maleta y apague mis audífonos, bajamos todos y todo estuvo normal, al llegar a la salida del aeropuerto mi corazón latía como loco, trate de no pensar en ese momento pero me fue imposible, que que solo lo dejo fluir, tome un taxi y en el camino les avise a las chicas que había llegado con bien y que me estaba de camino al departamento.

Llegamos al lugar, pague y subí, el apartamento es el tercer piso, estába a muy buen precio y es muy bonito, todo son colores neutros y la luz entra por todas partes pero a la vez podría ser un lugar muy oscuro, un contradicción, una fabulosa contradicción, y bueno entre dejé mis cosas y me hice a la idea que era la hora ir al hospital.

Tome lo que necesitaba y salí, el hospital no queda tan lejos de aqui pero a la vez esta lo suficientemente lejos para hacerme una idea, se lo que están pensando, todo es una contradicción conmigo pero bueno así soy, confundo mucho, pero bueno, ya me entenderán más adelante.

De un momento a otro ya estaba delante del hospital repite ondo y entre, fui a recepción y pregunte lo que debía me dijeron a dónde ir y empeze a caminar junto con la enfermera me dijo que esperara un momento, me pare en un esquina y  por inercia empeze a jugar con mi anillo, a buscarla esperando que me dijeran que volviera más tarde o que me había equivocado de hospital pero se que eso no es posible me asegure de ello, de pronto la vi.

Estaba muy cambiada, su cabello era negro ahora, estaba más largo y ondulado, está más alta pero sigue siendo las mismas, sigue siendo Lucia, mi confidente, mi hermana, seguía siendo mi Lucia.

Su sonrisa se ensanchó cuando me vio, pero yo solo la observé, esto es un gran error.